Sánchez Vara salió por la puerta grande de Las Cruces
01/10/2010 - 09:45
Por: JOSÉ L. ARCÁNGEL. GUADALAJARA
Tarde intempestiva la vivida ayer en el coso de Las Cruces. El frío, el viento y el poco ambiente taurino no lograron amilanar a los toreros y a los valientes que ayer se acercaron a la plaza capitalina. Todos salieron contentos porque nuevamente vieron salir en hombros a su torero, Sánchez Vara. El ganado fue propicio para el triunfo. Sin ser excelentes no pusieron en dificultades a los diestros. Eugenio de Mora dejó patente su veteranía y solvencia durante todo el festejo. Por su parte el joven, Andrés Palacios no se acopló con ninguno de sus dos toros pero dejó detalles.
Tarde intempestiva la vivida ayer en el coso de Las Cruces. El frío, el viento y el poco ambiente taurino no lograron amilanar a los toreros y a los valientes que ayer se acercaron a la plaza capitalina. Todos salieron contentos porque nuevamente vieron salir en hombros a su torero, Sánchez Vara. El ganado fue propicio para el triunfo. Sin ser excelentes no pusieron en dificultades a los diestros. Eugenio de Mora dejó patente su veteranía y solvencia durante todo el festejo. Por su parte el joven, Andrés Palacios no se acopló con ninguno de sus dos toros pero dejó detalles.
Abrió la tarde Eugenio de Mora. Su primer oponente fue muy bravo y se quedó crudo en el caballo. Lo saludó de capote con buen sentido lidiador. La faena de muleta comenzó en las tablas por bajo para ir sacando al burel al tercio. El astado con mucha fuerza y transmisión no se lo puso fácil al de Mora. Poco a poco fue consiguiendo meterlo en la muleta pero la faena careció de sentimiento. Al natural, ni tan siquiera lo intentó. Con el cuarto que tuvo mucho fuelle y bondad, no pasó de aseado. El toledano estuvo bien con la diestra pero la faena no tuvo temple. A pesar de todo ligó varias tandas de poca rotundidad. Una oreja fue su premio después de un estocada fácil y rápida. El castellano se volvió a justificar en una plaza que no se le da mal en las últimas temporadas.
Vara, fácil y convincente
El alcarreño Sánchez Vara ya le ha cogido la medida a la plaza de su tierra. El público le demostró su aprecio en todo momento y el diestro lo devolvió con una actuación meritoria. A su primero lo saludó cadencioso rematando con dos medias y una revolera. Banderilleó con facultades y exposición para dar paso a la faena muleteril. Comenzó doblándose muy torero para seguir con la primera tanda. Basó su faena en la diestra imponiéndose a un viento que no paraba de moverle los trastos. Logró ligar dos tandas al final y tras una estocada eficaz se llevó una oreja.
En el quinto realizó lo mejor de la tarde. Su oponente fue colaborador y el alcarreño lo aprovechó. En banderillas cuadró un gran tercer de dentro a fuera. Con la muleta ligó al toro con la diestra llevándo lo largo y toreado. Pese a fallar a espadas recibió un cariñoso trofeo.
Andrés Palacios sólo dejó detalles. El triunfador del certamen Puerta Grande se mostró faltó de oficio. Lo mejor de su tarde fue un quite a la verónica en el tercero. A ese animal lo toreó con disposición pero sin limpieza alguna. En el complicado sexto dejó algún buen natural. Habrá que esperarle.
Abrió la tarde Eugenio de Mora. Su primer oponente fue muy bravo y se quedó crudo en el caballo. Lo saludó de capote con buen sentido lidiador. La faena de muleta comenzó en las tablas por bajo para ir sacando al burel al tercio. El astado con mucha fuerza y transmisión no se lo puso fácil al de Mora. Poco a poco fue consiguiendo meterlo en la muleta pero la faena careció de sentimiento. Al natural, ni tan siquiera lo intentó. Con el cuarto que tuvo mucho fuelle y bondad, no pasó de aseado. El toledano estuvo bien con la diestra pero la faena no tuvo temple. A pesar de todo ligó varias tandas de poca rotundidad. Una oreja fue su premio después de un estocada fácil y rápida. El castellano se volvió a justificar en una plaza que no se le da mal en las últimas temporadas.
Vara, fácil y convincente
El alcarreño Sánchez Vara ya le ha cogido la medida a la plaza de su tierra. El público le demostró su aprecio en todo momento y el diestro lo devolvió con una actuación meritoria. A su primero lo saludó cadencioso rematando con dos medias y una revolera. Banderilleó con facultades y exposición para dar paso a la faena muleteril. Comenzó doblándose muy torero para seguir con la primera tanda. Basó su faena en la diestra imponiéndose a un viento que no paraba de moverle los trastos. Logró ligar dos tandas al final y tras una estocada eficaz se llevó una oreja.
En el quinto realizó lo mejor de la tarde. Su oponente fue colaborador y el alcarreño lo aprovechó. En banderillas cuadró un gran tercer de dentro a fuera. Con la muleta ligó al toro con la diestra llevándo lo largo y toreado. Pese a fallar a espadas recibió un cariñoso trofeo.
Andrés Palacios sólo dejó detalles. El triunfador del certamen Puerta Grande se mostró faltó de oficio. Lo mejor de su tarde fue un quite a la verónica en el tercero. A ese animal lo toreó con disposición pero sin limpieza alguna. En el complicado sexto dejó algún buen natural. Habrá que esperarle.