Sara Simón: “No vamos a permitir que se desperdicie ni un solo euro reservado contra la violencia de género”

La guadalajareña Sara Simón afronta su primer 25-N al frente de la Consejería de Igualdad preocupada por el incremento de casos de violencia de género y por el negacionismo presente en algunos partidos políticos y ayuntamientos.

Mañana es el Día Internacional contra la Violencia de Género. ¿Cómo se vive una fecha como el 25-N desde la Consejería de Igualdad?

Es una fecha importante, en la que tenemos el foco puesto en la lucha contra la violencia de género, la violencia que sufrimos las mujeres por el hecho de serlo. Pero para esta consejera y para todo el Gobierno regional, todos los días son 25 de noviembre. Tenemos unas cifras que son terroríficas. Este año han asesinado a 52 mujeres en nuestro país, dos en Castilla-La Mancha. Por tanto, tenemos claro que todos los días tienen que ser importantes en la lucha contra la violencia de género, no solamente por atender a esas cifras, sino también por ser conscientes de que hay miles de mujeres afectadas. El delegado del Gobierno dio el otro día la cifra de que más de 4.000 mujeres están siendo atendidas a través de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, pero hay muchas más que en sus casas están padeciendo la violencia de género. Somos muy conscientes de que tenemos que estar aquí para respaldarlas y para animarlas a salir de esa espiral.

En alguna ocasión ha dicho que la violencia de género es una emergencia nacional. ¿De qué manera se trabaja desde el Gobierno regional para acabar con esta lacra? 

Es una emergencia nacional porque las cifras así nos lo demuestran. Estamos en el mes de noviembre y ya hemos superado la cifra de asesinatos del año pasado. Tristemente, o preocupantemente, nos estamos acostumbrando a ver estas cifras en la televisión, a ver casos de violencia de género, y no le damos la importancia que le deberíamos dar. Por eso entendemos que es una emergencia nacional. ¿Cómo lo afrontamos desde la Consejería? ¿Cómo queremos romper con estas dinámicas? Lo primero, desde la pedagogía y concienciando a toda la sociedad de que tenemos que estar unidos para combatir esta lacra. Por ello, nos preocupa muchísimo cómo se están instalando algunos discursos negacionistas de la violencia de género. Hay partidos políticos que la asumen sin ningún tipo de complejo. Estamos viendo en estos días cómo hay instituciones que niegan e invisibilizan la violencia de género. Nos preocupa, porque esto influye de manera negativa en cómo las mujeres ven las instituciones, que están para respaldarlas y para cuidarlas. Por tanto, esta emergencia nacional tenemos que trabajarla desde la pedagogía y desde poder concienciar a todo el mundo, y especialmente a las personas más jóvenes. Estamos estudiando la manera de llegar a las personas más jóvenes, para poder educarlas en igualdad y hacer que ellas también sean agentes de ese cambio. Es imprescindible que la sociedad en su conjunto se una para combatir este problema estructural.

Fotografía: Rafael Martín

¿De qué manera se presenta este 25-N en la región?

Hemos elegido un lema que pide tanto a las mujeres como a los hombres que se desmarquen de la violencia de género. A las mujeres víctimas les decimos que se desmarquen, que sepan que en Castilla-La Mancha tenemos 87 centros de la mujer, a los que cualquier víctima puede acudir, haya puesto denuncia o no. Con esta campaña también pedimos a los hombres que se involucren en acabar con la violencia de género, que pongan pie en pared, que no miren para otro lado, que esto también les afecta. No tener una sociedad igualitaria, en la que las mujeres y los hombres tengamos las mismas oportunidades, también les afecta de una manera importante y creemos que es imprescindible que los hombres se sumen de manera activa a esta lucha contra la violencia de género.

¿Se ha puesto su Consejería en contacto con administraciones, principalmente locales, que han eliminado servicios e infraestructuras que trabajan por la igualdad y contra la violencia de género, como los puntos violeta?

La verdad es que nos preocupa. Efectivamente, durante el verano vimos como había ayuntamientos que eliminaban estos puntos violeta, que principalmente sirven en momentos en los que hay mucha gente en la calle por ser momentos festivos. Servían para que aquellas mujeres que habían sido víctimas de agresiones, principalmente sexuales, tuviesen un refugio al que acudir donde se sintiesen seguras. Porque hay muchas veces en el que no denuncian una agresión sexual por miedo a no ser creídas, por vergüenza o por no saber muy bien cómo afrontarlo. Pero además, en esos puntos también se hace una labor pedagógica importantísima, principalmente con la gente más joven. Por tanto, nos preocupó mucho que esos puntos se eliminasen en ciudades como la mía, Guadalajara, o también Talavera de la Reina.

"Es momento de tratar de ser menos

efectistas en los discursos y de ser

mucho más efectivos en las políticas”

¿En qué se traduce ese negacionismo?

Hemos tenido contacto con estos ayuntamientos, especialmente ahora con motivo del 25 de noviembre, porque hemos visto que hay ayuntamientos que están tratando de invisibilizar la violencia de género quitándole ese apellido. Hay muchos tipos de violencia, pero eso no significa que la violencia de género no exista. Por tanto, desde la Consejería, a través del Instituto de la Mujer, estamos recordando a todos los ayuntamientos que los recursos del Gobierno regional y de estos centros de la mujer están para combatir la violencia de género. Y si alguien trata de invisibilizarlo, tomaremos las medidas oportunas para que esos recursos del Gobierno regional se destinen de manera correcta. Si hay instituciones que no están comprometidas con la lucha contra la violencia de género, el Gobierno regional tomará nota y medidas, porque no vamos a permitir que se desperdicie ni un solo euro reservado a la lucha de la violencia de género, porque haya ayuntamientos, instituciones o partidos políticos que quieran negar la violencia de género.

La iniciativa ‘Empresas y entidades por una sociedad libre de violencia de género’, que ha puesto en marcha su Consejería, ya suma 70 participantes. ¿En qué consiste exactamente?

Viene a dar respuesta a este compromiso global que mencionaba. Como sociedad tenemos que ser capaces de comprometernos de una manera plena, y es importantísimo que los entornos laborales se sumen a esta lucha contra la violencia de género. Hay muchas mujeres que encuentran en el trabajo un refugio, al salir de su hogar, su entorno de violencia. Y tener una empresa comprometida en la lucha contra la violencia de género, que traslada a todos sus empleados y empleadas los recursos, por ejemplo, que tiene el Gobierno regional, que los hace visibles, que les da publicidad o que ayuda a trasladar esas campañas, nos sirve para que esas mujeres víctimas puedan encontrar en esos espacios esos recursos, ya sean centros de la mujer o la línea 900 100 114, que es gratuita y que funciona todos los días del año, las 24 horas del día. Por ello, quiero agradecer a todas esas empresas o entidades que ya se han sumado al convenio. Y también quiero animar a que muchas más empresas lo hagan, porque nos viene muy bien tener aliados para trasladar esta lucha contra la violencia de género y para visibilizar todos los recursos que las mujeres tienen a su disposición. 

Son otras muchas las políticas que aborda su Consejería, como diversidad o igualdad laboral, todo ello de manera transversal con otras consejerías. ¿Cómo se trabaja?

Uno de los primeros cometidos que tuve cuando fui nombrada consejera de Igualdad por parte del presidente de Castilla-La Mancha, fue que fuésemos capaces de armar una política transversal en materia de igualdad. Desde luego que desde la Consejería se pone mucho hincapié en prevenir la violencia de género o en dotar de recursos a aquellas mujeres que son víctimas de la violencia de género. Y, por supuesto, también en concienciar y para poner en valor acciones encaminadas a sensibilizar para conseguir una sociedad más igualitaria. Pero, en la acción transversal de todo el Gobierno, todas las consejerías ponen en marcha políticas de igualdad. Y además, todas las consejerías tienen una unidad de igualdad de género, que es la propulsora también de esas políticas y de que en todas las políticas que se pongan en marcha haya una perspectiva de género, que se vea cómo afecta de manera especial a las mujeres.

¿Algún ejemplo de esas políticas transversales?

El otro día firmé con el consejero de Fomento un convenio muy importante con Gicaman, la empresa de vivienda pública. Aparte de las ayudas para el alquiler para mujeres víctimas de la violencia de género, para lo que este año tenemos un presupuesto de 1,6 millones, cuando no es posible que esas mujeres puedan encontrar un hogar y  pagarlo con esas ayudas, tenemos el banco de viviendas públicas. Y lo mismo pasa con la Consejería de Economía. Estamos viendo cómo esos datos y esa perspectiva de género en sus políticas se traducen en que a día de hoy tenemos a muchas más mujeres incorporadas al mercado laboral. Y respecto al Plan de Empleo, es imprescindible para aquellas personas que tienen una situación más complicada a la hora de acceder al mercado laboral, como las mujeres o incluso las propias víctimas de violencia de género. De los 7.000 empleos que se van a crear, el 55 por ciento están reservados para mujeres.

El presupuesto de Igualdad para el próximo año gana 35 millones respecto a 2015 hasta un total de 48 millones. ¿A qué va a ir principalmente?

Las políticas de igualdad no solamente se realizan con esos 48 millones de euros, que es un presupuesto histórico para esta Consejería.  En estos tiempos estamos escuchando discursos o a grupos políticos en las Cortes de Castilla- La Mancha que tildan este gasto de chiringuito o de que no es necesario. Estas políticas impactan de una manera evidente en la vida de las mujeres. Pero no son solamente estos 48 millones de euros, sino que todas las consejerías, de manera transversal, en sus propios presupuestos, tienen partidas para estas acciones. Estos 48 millones de euros están destinados principalmente a la lucha contra la violencia de género. Tenemos casi 10 millones de euros para los centros de la mujer; otros 5 millones de euros para los 15 recursos que tenemos en Castilla-La Mancha para las mujeres víctimas de la violencia de género que tienen que salir de sus casas, muchas veces con sus hijos e hijas y en situaciones muy dramáticas; y este año hemos llegado casi a los 15 millones de euros para una de las políticas imprescindibles, el plan Corresponsables. Este plan viene primero a sensibilizar a la ciudadanía en su conjunto de que tanto los hombres como las mujeres nos tenemos que corresponsabilizar de los cuidados al 50 por ciento, pero también da herramientas eficaces para que tanto las mujeres como los hombres puedan asumir el cuidado de sus hijos e hijas o de sus personas mayores y puedan conciliarlo con su vida laboral. Y luego, por supuesto, hay una cantidad de dinero destinada a la promoción de la igualdad. También queremos poner en marcha campañas de sensibilización, dirigidas principalmente a los más jóvenes, o campañas de visibilización del talento femenino.

Usted ha sido alcaldesa de su pueblo y teniente alcalde de la capital guadalajareña. ¿Qué le ha aportado esa experiencia a la hora de asumir una consejería?

La política municipal es una escuela de vida impresionante. Tuve la inmensa suerte de que con 23 años los vecinos y vecinas de mi pueblo, Montarrón, decidieron que asumiese la Alcaldía. Fui alcaldesa durante 12 años y aprendí muchísimo, sobre todo aprendí a gestionar la responsabilidad que te da el cargo, a saber que tienes detrás a mucha gente que te necesita. Después tuve también la inmensa suerte de acompañar a un gran hombre como es Alberto Rojo, aquí en Guadalajara durante cuatro años. Yo venía de un municipio en el que teníamos 22 personas censadas y llegamos a la capital, donde ahora mismo pues hay censadas 87.000 personas, pero viviendo algunas más. Ha sido una experiencia impresionante para mí y me ha permitido conocer a mucha gente que vive en esta ciudad. Y ahora he tenido el privilegio de que el presidente de Castilla-La Mancha me haya pedido que me sume a su Gobierno y para mí es un honor. Me esforzaré como he hecho siempre en todos los puestos que he tenido la suerte de poder desarrollar para estar a la altura. 

Aunque es muy reciente, hay nueva ministra de Igualdad. ¿Tiene pensado reunirse con ella en breve?

Desde luego que tenemos muchos aspectos en los que trabajar y en los que seguir mejorando. Venimos de tiempos convulsos en las políticas de igualdad y es momento de tratar de ser menos efectistas en los discursos y de ser mucho más efectivos en las políticas. Tenemos un gran Pacto de Estado en este país, que ahora sí está dotado económicamente, pero que tenemos que revisar y tenemos que garantizar la financiación de las comunidades autónomas a través de ese Pacto de Estado. Tenemos que ver también cómo se puede mejorar este plan Corresponsables para ser más eficaces. Me parece imprescindible que en esta legislatura sigamos avanzando en la erradicación de otras maneras de violencia contra las mujeres, como la prostitución.