Siete zonas verdes de la capital han sido desbrozadas sólo durante el mes de julio

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

El de julio fue el primer mes de actuación de la nueva contrata encargada del cuidado y el mantenimiento de buena parte de los parques y jardines de la ciudad, que a lo largo de este tiempo ha tenido tiempo de ejecutar un elenco de actuaciones que además de su objetivo definido también pretendían devolver el esplendor a aquellas zonas verdes que se vieron afectadas durante semanas por la huelga de jardineros que experimentó en carnes propias la anterior empresa adjudicataria.
Según refiere el Ayuntamiento, y en respuesta a las críticas vertidas desde la Oposición, durante el primer mes de trabajo, la nueva contrata –conformada por la Unión Temporal de Empresas (UTE) de Sufi-Rayet– ha realizado diferentes tareas –hasta diez distintas– prácticamente a lo largo y ancho de la ciudad.
La primera de ellas se refiere a la siega de praderas, realizada hasta una altura máxima del césped de tres centímetros, así como a su perfilado, buscando en todo momento resaltar el valor estético de las zonas verdes, como así ha ocurrido en los parques de los mares y en el barranco del Alamín.
En cuanto a desbroces, se han llevado a cabo en el barranco de la Olmeda, barranco del Alamín, parque de la Constitución, del Coquín, de la Mota, los taludes de la calle Méjico y en el llamado Cerro del Pimiento.
En lo que se refiere a los sistemas de riego, se está procediendo a la elaboración de un informe detallado del estado actual de las zonas verdes y parques de Guadalajara, haciendo especial hincapié en aquellas zonas con sistemas de riego automatizado en desuso y con su consiguiente deterioro, a fin de poder corregir los errores y averías observadas. En concreto, destacan los parques de la zona de los mares y el de La Mota, en donde el sistema de riego por cable se está programando y se están llevando a cabo las acciones pertinentes para su reparación. Asimismo se está procediendo a un correcto posicionamiento de aspersores y difusores a fin de un uso más eficiente del agua.
Además, se han realizado numerosos arreglos de averías en la red de riego que han ido surgiendo desde el inicio del contrato, destacando las acciones llevadas a cabo en el parque Salvador Embid, parque de la Avutarda, los mares,...

Plantaciones
Se ha procedido a la plantación de flor de temporada, así como a la reposición de marras (thuyas y teucrium) en la plaza de Santo Domingo y Ligustrum en la calle Salvador Embid. Según la propuesta de la nueva adjudicataria del cuidado de parques y jardines, la intención es que cada año se planten unas 85.000 flores por toda la ciudad, muy por encima de las 20.000 que exigía el Ayuntamiento.

La plantilla ha crecido en una veintena de operarios

En las labores de poda de árboles y arbustos, la nueva contrata está
realizando la resubida de ejemplares en el barranco de la Olmeda, la calle Alamín, avenida de Barcelona y Cuesta del Matadero, así como la retirada de ramas, como ha ocurrido en la plaza Bailén. Por otro lado, diariamente se realiza el retirado de escombros y suciedad que se encuentra en las zonas verdes. Mención especial merece las labores acometidas en el saneamiento del barranco de la Olmeda –cuyo estado denunciaba el Grupo Socialista hace unas semanas–, donde se ha procedido a la limpieza de canal, retirando piedras, residuos y lodos. La nueva contrata también tiene entre sus cometidos las labores de pintado de bancos y papeleras de las zonas de su competencia. En este sentido, ya se ha realizado con las jardineras de la calle Mayor y los bancos de la plaza Ceuta y Melilla. En cuanto al riego, éste se realiza de forma periódica en las zonas mediante manguera, aunque también a través de la apertura de llaves.

Entre los objetivos de la nueva gestora del cuidado de los parques y jardines se encuentran el de favorecer la movilidad de sus trabajadores; la mecanización y automatización de las tareas en la medida de lo posible; el ahorro de agua; el cultivo de flores y aspectos concretos como el acondicionamiento del barranco del Alamín, que en los últimos años ha soportado estancamientos constantes de agua. Los nuevos operarios que se encargan del cuidado de los trabajos han cambiado la camiseta naranja –que identificaba a la anterior contrata, Agricultores de la Vega de Valencia– por otra de color amarillo fosforito. La plantilla la conforman un total de 52 trabajadores, cifra sensiblemente superior a la que limpiaba los parques con anterioridad, que llegaba, aproximadamente, a la treintena. Un jefe de servicio se encarga de coordinar a diario los trabajos de la jornada.