Torija: un pueblo ideal para vivir con un polígono en pleno crecimiento

10/05/2021 - 14:12 Redacción

Pulsar Properties ha logrado que se instalen XPO o Factor 5 y trabaja en otros dos proyectos

Torija es un municipio ubicado a 15 minutos de Guadalajara capital y a unos 30 minutos del Aeropuerto Madrid Barajas, por lo que la cercanía con estos lugares convierte a la localidad en centro geográfico. Está situado en el corazón del enclave logístico más importante de España con conexión con Zaragoza, Barcelona o Madrid gracias a la autovía A-2. Con estas premisas es un municipio ideal para vivir, trabajar y formar una familia. 

“Torija es un municipio fantástico para vivir y para trabajar, pues no solo tenemos servicios, sino también nuestra buena gente, nuestros buenos empresarios; y también la parte más social, nuestro pueblo representa lo más moderno de la provincia de Guadalajara y también lo más tradicional”, explica su alcalde, Rubén García, que añade que su cercanía a Guadalajara capital y a Madrid “hace que Torija se encuentre en el centro del país; seguramente somos el polígono más centrado de toda España”.  En este sentido recalca que es un pueblo “muy bien comunicado” porque está al pie de la autovía A-2. 

Torija destaca por su polígono industrial y logístico por el que pasan a  diario miles de trabajadores, que duplican la población, y que repercute en los restaurantes de la localidad que les dan servicio diariamente. “Es un polígono recientemente inaugurado, en 2004, con nuevas instalaciones que se incorporan a este mercado; con parcelas muy grandes de entre 70.000 y 100.000 metros cuadrados, y ahora estamos en un punto de subida que hace que Torija se convierta en la puerta de Guadalajara a la entrada de nuevas empresas de España y a nivel internacional”. En este sentido, el primer edil señala que actualmente están instaladas en el polígono empresas tan importantes como Leroy Merlin o Primark. Además, desde 2019 están trabajando en la ampliación del polígono en el que se van a instalar ya seis nuevas empresas, como la ampliación de Leroy Merlín y de Primark, Factor 5, La Caixa con su centro de datos a nivel nacional “y tenemos una de las primeras empresas de transformación de queso, que es TGT, que estará terminando sus obras a finales de año”. 

 

 

En el polígono de Torija trabajan actualmente unas 1.600 personas y en la localidad hay empadronadas unas 1.700, “y se convertirá a finales de este año en un municipio donde se tendrá más empleos que empadronados”, puntualiza su alcalde.

De esta forma, el polígono industrial está en pleno crecimiento. En lo que llevamos de año, Pulsar Properties ha conseguido que se instalen en él empresas tan importantes como XPO con una superficie de 32.000 metros cuadrados o Factor 5 con 25.000. Además, Pulsar Properties está trabajando en dos proyectos de gran importancia. “Torija tiene mucho presente, pero desde luego mucho futuro. Actualmente estamos con todos los polígonos desarrollados menos uno, que es el I-10, y a su vez ya estamos pensando en ampliar otro tipo de sectores como el I-6, que se convertirá en un futuro I-11 ó I-12”. 

Así, el alcalde lo tiene claro: “En Torija se vive, se trabaja y es un muy buen pueblo para echar raíces”, pues tiene todos los servicios, además de la Escuela Infantil y el colegio tienen ludoteca municipal, biblioteca y dispone de una programación de actividades culturales y educativas muy amplia junto con el AMPA. En breve tendrá un servicio de autobuses que conectará con Guadalajara y Madrid y con entradas y salidas al polígono. Tienen atención sanitaria todos los días y también servicios sociales, tiendas, supermercados, farmacia, restaurantes...

 

Esto bien lo sabe Mayte Cambra, que ha sido enfermera en la localidad durante 23 años y que con su jubilación asegura que deja amigos en el pueblo por la atención cercana que se presta. “Yo soy de Aragón pero vine hace 40 años a esta provincia, y los pacientes de Torija no son pacientes, son mis pacientes”, dice orgullosa. Con motivo de su jubilacion, el Ayuntamiento y las asociaciones le dieron una placa como reconocimiento a su trabajo. “Los ayuntamientos de Torija han sido super colaboradores. Yo empecé hace 23 años en un consultorio a los pies del castillo que no tenía ni electro, y ahora tenemos aparato de electro, se pueden poner aerosoles, oxígeno con caudalímetro, se hacen extracciones...”. 

El centro histórico del pueblo cuenta con establecimientos de restauración y otros servicios como la peluquería de Gloria Ropero, que cambió su pueblo por Torija. Lleva seis años con este servicio y asegura que se ha adaptado y se vive muy bien. Como ella, Paloma López también decidió establecerse hace nueve años en Torija, y asegura que se gana en calidad de vida y en tranquilidad. Confiesa que no se arrepiente, pues la han acogido muy bien y aunque era muy urbanita, no le ha costado nada adaptarse. 

 

Nuevos desarrollos
El alcalde asegura que están trabajando también para aumentar la población del municipio. “Estamos viendo la posibilidad de ampliar el casco urbano, tenemos preparados los sectores R-2, R-6 y R-7 para recibir a agentes urbanizadores”. 

El desarrollo de Torija beneficiará también a municipios cercanos como Brihuega, Trijueque, Heras de Ayuso, Torre del Burgo, Hita o la pedanía de Rebollosa de Hita, donde se puede vivir y trabajar en Torija. Está a dos kilométros. “Es un pueblo con ese toque de lo que es un pueblo humilde”, apunta el alcalde de Torija.

 

Y durante el fin de semana, el turismo cobra protagonismo en Torija con su  castillo, que es Centro de Interpretación de la provincia de Guadalajara, “la joya de la corona”, según García , donde se pueden aprender las costumbres y contemplar el Museo de Viaje a la Alcarria en homenaje a Camilo José Cela. “El turismo es muy importante porque es una fuente de ingresos para nosotros y para los bares y restaurantes”, dice el alcalde. 

Así lo corrobora Isabel García, propietaria del Restaurante Las Cucharitas. Llegó a vivir a Torija en 2004 y abrió su negocio cuatro años después, en 2008. Torija es, por tanto, punta de lanza en la repoblación de la zona tanto por la opción laboral como por la calidad de vida que no tiene que envidiar a las grandes ciudades, pues el que llega, se queda y los vecinos animan a que así sea.