Trabajo augura "andanadas y embestidas de la derecha" contra el diálogo social
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
El secretario de Estado de Seguridad Social y secretario de Economía y Empleo del PSOE, Octavio Granado, aseguró hoy que "se van a vivir andanadas y embestidas contra el diálogo social por parte de los agentes mediáticos y los políticos de la derecha".
Durante la clausura de la jornada parlamentaria 'Diálogo Social y Concertación', Granado indicó que "la derecha española" es patriótica en sus "actitudes", pero no en sus "comportamientos", ya que "hace todo los posible porque al Gobierno le vaya lo peor posible en cada uno de los días del año".
Así, pronosticó, por ejemplo, que "los voceros de la derecha" ya están realizando peticiones incluso "paradójicas" alentando a los sindicatos a que se movilicen. Si bien, Granado advirtió de que "si se desplaza el problema hacia la calle", algo que precisamente permite evitar el diálogo social, el Gobierno va a tener problemas".
En este contexto, Granado indicó también que "se han diversificado las fuentes de información y de ruido", por lo que la concertación social es fundamental en la actual situación de confianza.
"EXCEPCIONES" EN EL DIÁLOGO SOCIAL.
Por otro lado, Granado señaló que el diálogo social tiene también sus límites. Así, indicó que en la actual coyuntura habrá de haber "excepciones". "Habrá alguna medida puntual en la que no se pueda llegar a un acuerdo al 100% y en la que tengamos que conformarnos con un acuerdo al 90% o al 95%", añadió.
Si bien, quiso dejar clara su oposición a gobernar por decreto ley. "Pensar que en momentos de crisis es cuando más justificado gobernar de esta manera es como asumir ser un cirujano y pasar a ser un matarife. Al final, lo más probable es que uno acabe haciendo autopsias", añadió.
En la misma línea y durante una mesa redonda previa sobre el diálogo social, la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, indicó que, aunque "el contenido del diálogo social sigue siendo vigente, la realidad lleva a situaciones más complejas y obliga a tomar decisiones más rápido".
"La complejidad del actual diálogo social es el ritmo de la coyuntura, que obliga a acelerar el ritmo de consenso" para que el Gobierno alcance a tomar las medidas oportunas a tiempo. "No podemos estar discutiendo eternamente, pero queremos discutir", añadió.
Por ello, llamó a la "responsabilidad de todos" y "a plantear la negociación de manera diferente". Así, haciendo suyas las palabras del ex presidente de la CEOE, José María Cuevas, apuntó: "Negociar, negociar y negociar, pero llegar a acuerdos".
LA LEGISLACIÓN LABORAL YA NO ES "LA ESTRELLA".
Por otro lado, Rojo indicó que es preciso abordar nuevas medidas en el terreno de legislativo, pero aclaró que la legislación laboral "ya no es la estrella del diálogo social" y que éste requiere ahora nuevas leyes en otros ámbitos.
Asimismo, indicó que a la hora de sentarse a negociar en este y otros ámbitos es preciso tener en cuenta el actual marco competencial, en el que muchas competencias laborales están en manos de las comunidades autónomas.
Este reparto competencial supone, a su juicio, "una riqueza compatible con el diálogo social", pero que hace "más difícil" este proceso en la actual coyuntura. "No se puede dialogar sobre aquello cuya competencia está transferida", añadió.
Con todo, la secretaria general de Empleo indicó que aún quedan ámbitos, como la protección por desempleo, que no están transferidos, ámbitos desde los que se puede hacer una labor "complementaria" sin modificar el marco competencial.
OTRAS OPINIONES.
Desde el departamento de Relaciones Laborales de la CEOE, Pilar Iglesias señaló que es preciso abordar reformas estructurales y consideró "insuficientes" las medidas aprobadas por el Ejecutivo el pasado sábado.
Por su parte, el secretario general de Cepyme, Elías Aparicio, señaló que la "base del diagnóstico compartido" sobre la economía que dio lugar al diálogo social en julio sigue siendo válida, si bien pidió que se mejore su precisión "para llegar al fondo de los asuntos". "Las situaciones complicadas no se resuelven con medidas globales y a corto plazo", advirtió.
Por su parte, el secretario confederal de Acción Sindical de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, advirtió de que ni siquiera ahora se ve la crisis en toda su extensión, por lo que pidió una reflexión sobre la ley concursal y los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).
Su homólogo de UGT, Toni Ferrer, pidió ahondar en reflexiones sobre la reforma de los servicios públicos de empleo y pidió un incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) el año que viene, algo que, dijo, "va a medir el compromiso de diálogo del Gobierno".
Por último, esperó que se renueve el acuerdo para la negociación colectiva, adaptándolo en lo necesario a las nuevas circunstancias, pero con la condición de que sea prácticamente el mismo que el vigente. "Si no no habrá acuerdo", sentenció.
Así, pronosticó, por ejemplo, que "los voceros de la derecha" ya están realizando peticiones incluso "paradójicas" alentando a los sindicatos a que se movilicen. Si bien, Granado advirtió de que "si se desplaza el problema hacia la calle", algo que precisamente permite evitar el diálogo social, el Gobierno va a tener problemas".
En este contexto, Granado indicó también que "se han diversificado las fuentes de información y de ruido", por lo que la concertación social es fundamental en la actual situación de confianza.
"EXCEPCIONES" EN EL DIÁLOGO SOCIAL.
Por otro lado, Granado señaló que el diálogo social tiene también sus límites. Así, indicó que en la actual coyuntura habrá de haber "excepciones". "Habrá alguna medida puntual en la que no se pueda llegar a un acuerdo al 100% y en la que tengamos que conformarnos con un acuerdo al 90% o al 95%", añadió.
Si bien, quiso dejar clara su oposición a gobernar por decreto ley. "Pensar que en momentos de crisis es cuando más justificado gobernar de esta manera es como asumir ser un cirujano y pasar a ser un matarife. Al final, lo más probable es que uno acabe haciendo autopsias", añadió.
En la misma línea y durante una mesa redonda previa sobre el diálogo social, la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, indicó que, aunque "el contenido del diálogo social sigue siendo vigente, la realidad lleva a situaciones más complejas y obliga a tomar decisiones más rápido".
"La complejidad del actual diálogo social es el ritmo de la coyuntura, que obliga a acelerar el ritmo de consenso" para que el Gobierno alcance a tomar las medidas oportunas a tiempo. "No podemos estar discutiendo eternamente, pero queremos discutir", añadió.
Por ello, llamó a la "responsabilidad de todos" y "a plantear la negociación de manera diferente". Así, haciendo suyas las palabras del ex presidente de la CEOE, José María Cuevas, apuntó: "Negociar, negociar y negociar, pero llegar a acuerdos".
LA LEGISLACIÓN LABORAL YA NO ES "LA ESTRELLA".
Por otro lado, Rojo indicó que es preciso abordar nuevas medidas en el terreno de legislativo, pero aclaró que la legislación laboral "ya no es la estrella del diálogo social" y que éste requiere ahora nuevas leyes en otros ámbitos.
Asimismo, indicó que a la hora de sentarse a negociar en este y otros ámbitos es preciso tener en cuenta el actual marco competencial, en el que muchas competencias laborales están en manos de las comunidades autónomas.
Este reparto competencial supone, a su juicio, "una riqueza compatible con el diálogo social", pero que hace "más difícil" este proceso en la actual coyuntura. "No se puede dialogar sobre aquello cuya competencia está transferida", añadió.
Con todo, la secretaria general de Empleo indicó que aún quedan ámbitos, como la protección por desempleo, que no están transferidos, ámbitos desde los que se puede hacer una labor "complementaria" sin modificar el marco competencial.
OTRAS OPINIONES.
Desde el departamento de Relaciones Laborales de la CEOE, Pilar Iglesias señaló que es preciso abordar reformas estructurales y consideró "insuficientes" las medidas aprobadas por el Ejecutivo el pasado sábado.
Por su parte, el secretario general de Cepyme, Elías Aparicio, señaló que la "base del diagnóstico compartido" sobre la economía que dio lugar al diálogo social en julio sigue siendo válida, si bien pidió que se mejore su precisión "para llegar al fondo de los asuntos". "Las situaciones complicadas no se resuelven con medidas globales y a corto plazo", advirtió.
Por su parte, el secretario confederal de Acción Sindical de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, advirtió de que ni siquiera ahora se ve la crisis en toda su extensión, por lo que pidió una reflexión sobre la ley concursal y los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).
Su homólogo de UGT, Toni Ferrer, pidió ahondar en reflexiones sobre la reforma de los servicios públicos de empleo y pidió un incremento del salario mínimo interprofesional (SMI) el año que viene, algo que, dijo, "va a medir el compromiso de diálogo del Gobierno".
Por último, esperó que se renueve el acuerdo para la negociación colectiva, adaptándolo en lo necesario a las nuevas circunstancias, pero con la condición de que sea prácticamente el mismo que el vigente. "Si no no habrá acuerdo", sentenció.