Trillo vivió la locura de la Noche del Terror
Trillo volvió a vivir la locura de la Noche del Terror en la quinta edición de una actividad que concita cada año a más público. A partir de las diez de la noche, y con una temperatura que rondaba a esa hora los cinco grados, los trillanos desafiaron el frío y salieron a la calle ataviados con variopintos y terroríficos atuendos. Si el año pasado eran los zombies quienes tomaban el centro de la localidad, esta vez fueron doctores y pacientes de una institución mental de finales del siglo XIX quienes viajaron en el tiempo hasta Trillo, apareciendo en una ambulancia en mitad de la Plazuela de la Vega. Fueron ocho actores caracterizados quienes acompañaron en el pasacalles a niños y mayores disfrazados hasta la calle Jardines.
A partir de las 22:00 horas se abrieron las puertas del Pasaje del Terror. El edificio de las antiguas escuelas había quedado magistralmente transformado en una institución mental de finales del siglo XIX. Inicialmente el doctor Arizmendi mostraba a los grupos de trillanos que iban pasando un vídeo sobre los procedimientos que utilizaban en su antigua institución mental. Bien aleccionado, el público entraba en la galería del pánico en que la empresa Ecoaventura había convertido el lugar para la ocasión. Laberintos, lobotomías, sustos, jaulas y la convincente actuación de los personajes, lograron sacar, un año más la sonrisa del miedo a los trillanos mayores de doce años.
Los más pequeños fueron maquillados por estilistas profesionales en el local municipal contiguo. También hubo ruleta del truco o trato para los niños, y pitonisas.