Trillo y sus pedanías celebran el Día del Mayor con diferentes actos

08/05/2012 - 13:31 Redacción


   Trillo celebró este lunes el Día del Mayor, una jornada de convivencia dedicada a los jubilados de la localidad y de sus pedanías. Como cada año, su objetivo es el de mostrar el máximo respeto y admiración de la sociedad local por una generación a la que le tocó nacer y crecer en tiempos difíciles, aún más que los que vivimos ahora, y que tuvo que pelear muy duro por sacar a sus familias adelante, acercándolas progresivamente a la sociedad del bienestar y de la educación.


  A partir de las 12:30 horas de la mañana tenía lugar una Misa en una abarrotada Iglesia de la Asunción. La Asociación de Mayores de Trillo hizo una ofrenda floral a la Virgen, mientras que el coro de la Iglesia le puso la banda sonora a la ceremonia. En representación de los mayores de Trillo intervinieron Angelines Alvaro y el presidente de la Asociación, Teodoro Martínez, que declamó una poesía, haciendo referencia, entre otras cosas, a los que ya no están.

  Por su parte, el párroco local, Santiago Jiménez, destacó el papel que cumplen los mayores en nuestra sociedad, permitiendo que los padres puedan trabajar, mientras que ellos cuidan de sus nietos, ejerciendo en muchos casos una segunda paternidad. La banda sonora de la ceremonia la puso la Rondalla de Trillo.

  Poco después tenía lugar una comida de fraternidad en el Polideportivo de la Virgen del Campo. Acompañando la celebración estuvo la corporación municipal, encabezada por el alcalde de Trillo, Francisco Moreno, buena parte de los profesionales que trabajan en el día a día con los mayores, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Mayores de Guadalajara, Carmen Hombrados y el diputado provincial delegado del área de Bienestar Social, Antonio Ruíz Morán.

  Precisamente fue el regidor quien tomó la palabra antes del inicio de la comida para dar la bienvenida a todos los presentes. Moreno recordó a los mayores que, por motivos de salud, no pudieron acudir al acto de hermandad y a los bailes. También tuvo unas palabras para aquellos que honraron el acto con su presencia y que ya no están. Santiago Jiménez bendijo la mesa. Los comensales disfrutaron de la comida y de largas conversaciones sobre cuando moceaban, en las que la alegría del reencuentro fue protagonista. A los postres, y por cortesía de las entidades bancarias con sede en Trillo, se repartieron diferentes obsequios a sorteo. Por último, cada uno de los presentes recibió un detalle por parte del Ayuntamiento.

  El hombre orquesta, Ignacio Simón, volvió a amenizar la tarde con su música de siempre. Con esta, el músico lleva ya diecinueve ediciones consecutivas tocando para los mayores de Trillo en esta y otras celebraciones. Los bailes tradicionales, el pasodoble, el vals, el tango, la cumbia protagonizaron la tarde. Curiosamente Ignacio Simón también tiene pasado roquero. Tocó con dos grupos míticos de nuestra provincia, Rangers y Azimut, durante 19 años.

  “Desde hace 22 años toco, muy a gusto y cada vez más, en otros ambientes distintos un género musical muy distinto, e injustamente minusvalorados. Hay muchos pasodobles muy bonitos y muy bien hechos. El pasodoble está considerado como música menor, y no lo es, en absoluto”, explicaba esta tarde el hombre orquesta.

  El Ayuntamiento de Trillo fletó un trasporte para desplazar a todos aquellos ancianos que no tenían la oportunidad, por cualquier circunstancia, de hacerlo por sus propios medios. Varios munícipes trillanos llevaron el detalle del Ayuntamiento a los residentes del Sanatorio Leprológico y de la Residencia Fuentealegre que no pudieron acudir a la celebración por sus propios medios.