Un Ciudad de Guadalajara poco eficaz cae ante el Anaitasuna
Los de Jose Molina encaden tres jornadas consecutivas sin conocer la victoria (2-3).
El Ciudad de Guadalajara FS Recuperaciones Alcarreñas sucumbió ante el CD Anaitasuna en la séptima jornada de Liga. El dominio en el juego del equipo dirigido por Jose Molina no fue suficiente para superar a un rival que a través de rápidos contraataques logró llevarse el triunfo. Con esta, los morados acumulan tres jornadas consecutivas sin ganar antes de medirse a CFS Zierbana el próximo fin de semana.
El Ciudad de Guadalajara FS Recuperaciones Alcarreñas recibió la visita del CD Anaitasuna con el objetivo de ahuyentar los fantasmas que habían impedido al equipo lograr mejores resultados como local, y las primeras ocasiones fueron moradas. En el 3´, Dani Calatrava estrelló un balón en el lateral de la red, y también provaron suerte David y Raúl de Luz. Desde los primeros compases se vio la idea de los dos equipos, los locales dominadores del balón pero sin efectividad, mientras que los visitantes buscaban salir rápidos en transiciones.
Así llegó el primer tanto de los visitantes, que aprovecharon una pérdida en creación morada para, con un disparo cruzado, inaugurar el marcador en el minuto 9. El Ciudad de Guadalajara no se desdibujó y, a falta de tres minutos para el descanso, Octavio tuvo en sus botas el tanto del empate en un mano a mano que no aprovechó.
El paso por vestuarios nuevamente sirvió para agitar al Recuperaciones Alcarreñas, que jugó entonces sus mejores minutos. Los de Jose Molina empataron el partido a la salida de un córner por medio de Dani Calatrava, que se estrenó como goleador con el equipo. Pero un nuevo error de los locales propició que fuesen los de Pamplona los que nuevamente tomaran ventaja a seis minutos del final.
Ya con el portero-jugador en pista por parte del cuadro local, el CD Anaitasuna puso el tercero al anotar a puerta vacía. A pesar de ello, el Ciudad de Guadalajara FS siguió buscando el empate. Octavio, de cinco, recortó distancias a falta de un minuto para el pitido final, pero fue insuficiente para evitar que los tres puntos se marchasen de la capital.