Un ganadero denuncia presiones e insultos por parte del alcalde de Armallones
Discrepancias generadas por la caza y el uso de un monte público, enfrentan al Consistorio de Armallones y a su alcalde, Eduardo Temprado, con el ganadero Inocente Barriel.
El ganadero ha puesto en manos de un abogado lo que considera una “rotura unilateral del contrato” que mantenía con el Ayuntamiento. Según explica, en el acuerdo de alquiler suscrito con el alcalde se indicaba “que podía tener mis cabras desde el mes de marzo hasta el mes de septiembre pastando en el campo”, a cambio de un pago que él abonó. La controversia se inició al resultar incompatibles las monterías que organizaba el Ayuntamiento con la actividad natural de las cabras.
“Entiendo que algún día se puede realizar una montería, tan solo me lo tienen que decir y yo retiraré mis animales a otros pastos para que no exista ningún problema”, señala Barriel. Sin embargo, asegura que la disputa acabó con el alcalde rompiendo el contrato que les ligaba, negándose a empadronarle en el pueblo e incluso presionándole para que abandone la vivienda municipal en la que habita junto a su familia. Todo empeoró, además, cuando “el alcalde con unos familiares y amigos suyos empezaron a faltarme el respeto con insultos, ante lo cual no tuve más remedio que llamar a la Guardia Civil”. Ahora teme que le pueda ocurrir algo al ganado. “Como les pase algo a mis cabras, los culpables serán ellos”.
Por el momento, el ganadero ha recogido 40 firmas de personas que están a favor de que se quede en la localidad y que sus animales puedan pastar en el monte, realizando lo que algunos consideran además una labor de limpieza necesaria en el monte.
Nueva Alcarria ha intentado sin éxito ponerse en contacto con el alcalde para conocer la versión del Consistorio. Únicamente un concejal de la oposición ha querido valorar los hechos: “El ganadero paga sus pastos y el alquiler de la vivienda municipal, con lo que cumple su parte del contrato”. Además, critica que el Ayuntamiento no haya realizado ningún pleno desde el pasado mes de junio de 2018. “El alcalde y su concejal son quienes hacen y deshacen”.