Un incendio en un trailer deja seis coches calcinados y retenciones durante horas en la A-2

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
Un trailer que portaba diez vehículos en su estructura articulada se incendió ayer en el kilómetro 40,8 de la A-2 en sentido Madrid. Como consecuencia, todos los coches resultaron afectados en diversos grados a causa del fuego. El camión partió hacia las 12.00 horas de ayer de Barcelona, y debía llegar en el día de hoy a Algete y Ciudad Real. El estacionamiento del vehículo en el kilómetro 40,800 de la A-2 en sentido Madrid produjo diez kilómetros de retenciones durante gran parte de la mañana, ya que la grúa de gran tonelaje que debía remolcar el vehículo se retrasó más de lo esperado. Tanto el conductor como su acompañante no sufrieron daños personales.
Cuando José Manuel Cuevas, dominicano de 36 años, partió el jueves al mediodía de Barcelona para trasladar a bordo de un trailer diez vehículos de segunda mano y kilómetro cero hasta la localidad madrileña de Algete, y a Ciudad Real, no sabía lo que le esperaba poco después de alcanzar la ciudad de Guadalajara. Pasadas las 9.30 horas de ayer, José Manuel se percató, mientras conducía el vehículo de gran tonelaje, de la presencia de humo en la parte trasera de la estructura, lo que le obligó a detener inmediatamente el camión en el arcén de la A-2, en el kilómetro 40,800 en sentido Madrid, a la altura del polígono Miralcampo. Allí, con un extintor que portaba en la cabina del conductor, intentó sofocar lo que en ese momento era un pequeño fuego que parecía proceder de uno de los vehículos, concretamente de un Smart, situado en el centro de la estructura. “Afortunadamente, entre los muchos conductores que se fueron deteniendo para ayudarme, se encontraba un bombero que acababa de salir de trabajar. Sin embargo, con su extintor tampoco fuimos capaces de sofocar el incendio, que iba extendiéndose poco a poco”, explica José Manuel Cuevas, todavía impresionado por lo sucedido.
A pocos metros, un grupo de cuatro trabajadores de conservación de las carreteras estatales fueron testigos de la propagación del fuego, por lo que inmediatamente avisaron a la base para dar cuenta de lo sucedido. “Desde allí avisaron al 112 para que se personaran inmediatamente los Bomberos, pues se temía que explotaran los depósitos de gasolina”, recuerda José Luis Castellanos, uno de los trabajadores que cortaba en ese momento las malas hierbas que crecen junto al arcén. El aviso también fue refrendado por el bombero que, estando fuera de servicio, colaboró con el conductor para salvar un Audi A-6 que se encontraba en la parte trasera de la estructura. “Antes de que el fuego aumentase, lo desenganchamos, me metí en él y lo conduje hasta aparcarlo en un sitio seguro”. Peor suerte corrieron seis de los vehículos, que quedaron totalmente destrozados por las llamas, mientras que otros tres se salvaron al sofocarse el incendio antes de que las llamas los consumiesen. “El fuego se fue extendiendo por los coches, registrándose algunas pequeñas explosiones, probablemente en los depósitos de gasolina, todos ellos a la mitad de su capacidad”, explica el conductor. Lo que no sufrió daños materiales de gravedad fue el camión propiamente dicho.
Al lugar de los hechos se desplazaron dos camiones de Bomberos del Parque de Azuqueca, y un apoyo de la Comunidad de Madrid, así como diversas dotaciones de guardias civiles que se encargaron de cortar el carril derecho y controlar la retención que se formó y que llegó a alcanzar los diez kilómetros. Igualmente, en el carril contrario, en sentido Guadalajara, también se registró tráfico lento, provocado principalmente por la curiosidad de los conductores, que aminoraban la marcha al pasar frente al camión siniestrado. Por ello, un efectivo de la Guardia Civil se encargó de aligerar la conducción en ese carril. No obstante, las retenciones se prologaron más allá de las 13.00 horas, ya que la grúa de gran tonelaje que debía remolcar el camión venía desde Madrid, demorándose más de lo esperado.
Según confirmaron los efectivos de la Guardia Civil personados en el lugar, no se registraron daños personales ni en el conductor ni en su novia, que lo acompañaba en este trayecto. “Cuando José Manuel detuvo el camión yo estaba durmiendo, por lo que no me di cuenta de lo que estaba pasando”, explica Yomilca Feliz, de 30 años, y también de República Dominicana. Cuando el fuego comenzó a ser más intenso, la joven salió rápidamente de la cabina y se alejó del camión junto a su pareja. “Teníamos miedo de que explotase y nos cogiese demasiado cerca”, recuerda Yomilca desde el asiento del único vehículo que fue sacado del remolque. Pero José Manuel no sintió miedo, ni siquiera se considera valiente por haber salvado uno de los vehículos habiendo puesto en peligro su vida. Lo que este transportista sentía ayer era disgusto. “En los tres años que llevo en esta empresa nunca me había pasado algo así, y mira ahora, casi todos los coches que tenía que trasladar están echados a perder”. José Manuel ya había hablado con su empresa, y uno de los jefes estaba de camino al lugar de los hechos. “Ya no podemos hacer nada, la carga está totalmente quemada, aunque dicen que hemos tenido suerte porque nosotros estamos bien”, concluye mientras esperaba a que la grúa diese por finalizado este trágico suceso