Un millar de personas se beneficiarán del programa Verano Joven
El programa Verano Joven del Gobierno regional llegará este año a un millar de personas de la provincia, con una inversión superior a los 100.000 euros, gracias a las actividades de ocio y tiempo libre y las de carácter voluntario que se desarrollan en los campos de trabajo. En la región la inversión alcanza el millón de euros.
En esta edición, Guadalajara tiene en esta edición dos de los 12 campos de trabajo de Castilla-La Mancha, uno en Azuqueca de Henares y otro en la Dehesa Común de Solanillos, éste último en colaboración con la Fundación Apadrina un Árbol. En estos participarán de forma desinteresada un total de 40 jóvenes con edades comprendidas entre los 15 y los 30 años, 20 en cada uno de ellos. Antes de su finalización, el próximo día 13, la delegada de Empleo, Igualdad y Juventud, Elena de la Cruz, supervisó ayer el trabajo que están desarrollando una veintena de chavales en la finca de Solanillos. Unos se encuentran recuperando una mina y un refugio en las inmediaciones de esta finca, pero en el término de Tobillos, y el resto rehabilitando una fuente en el interior de dicha finca. Estos llevan trabajando desde el pasado 28 de julio, donde además se ocuparán de colocar las señales y carteles informativos del trayecto entre Olmeda de Cobeta y Cobeta, elaborar un cuaderno de campo y una memoria gráfica para comprobar los resultados obtenidos, que después se expondrán en el Centro de Educación Ambiental de Solanillos. De forma complementaria también podrán participar en la siembra, germinación, maduración y endurecimiento de diferentes especies vegetales autóctonas que después se plantarán en el monte para restaurar la cubierta vegetal arbórea y arbustiva arrasada por el incendio. "La fuente se está limpiando para uso recreativo y que los animales puedan beber", precisó Calvo, mientras que en la segunda actuación, el objetivo es que sea visitable, por lo que después se añadirán algunos paneles interpretativos. La delegada estuvo acompañada en su visita por el delegado en Molina, Carlos Sanz y el director de la Fundación Apadrina un Árbol, Mario Calvo, entre otros, además de los monitores que le fueron explicando en detalle cada una de las actuaciones realizadas. La particularidad de estos alumnos radica en que proceden no sólo de otras partes de Castilla-La Mancha dos sino también de otros países, como Turquía y Bulgaria. Otra veintena de jóvenes estuvo durante el mes de julio trabajando en la Reserva Ornitológica de Azuqueca de Henares donde los participantes tuvieron la oportunidad de elaborar semilleros, repicar, estaquillar, seleccionar semillas, trasplantar y eliminar las malas hierbas. Estos lugares son, por tanto, no sólo un punto de trabajo, sino también una oportunidad para intercambiar experiencias.