¿Utilizamos de forma correcta los fármacos?

30/11/2016 - 14:21 Diana Pizarro Pesado

El uso racional del medicamento implica a paciente, médico y farmacéutico

La automedicación, el abuso de fármacos, no consultar nuestras dudas con los profesionales o recurrir a la compra por internet en webs ilegales son algunos de los peligros que acechan en estos momentos a la población. Por ello, las autoridades abogan por un uso racional del medicamento, necesario también para mantener nuestro sistema de salud pública en una sociedad en la que la población de edades más avanzadas va ganando terreno. Sin embargo, esta preocupación no es exclusiva de estos tiempos ni tampoco de nuestro país, pues ya en 1985, la Organización Mundial de la Salud definió el uso racional del medicamento como el hecho de que “los pacientes reciben la medicación adecuada a sus necesidades clínicas, en las dosis correspondientes a sus requisitos individuales, durante un período de tiempo adecuado y al menor coste posible para ellos y para la comunidad”. 

 

Podemos hacer la compra por internet, reservar las vacaciones del próximo verano o beneficiarnos de las mejores ofertas del Black Friday, ¿por qué no podemos comprar también nuestros medicamentos en internet? La respuesta tiene varios vértices. En primer lugar, estamos hablando de nuestra salud, y no del último modelo de teléfono móvil. En segundo lugar, ya es posible adquirir medicamentos a través de la web, pero solamente los que no están sujetos a receta médica, lo que es más que evidente. En estos momentos hay 1.235 medicamentos no sujetos a prescripción médica, según la Asociación para el Autocuidado de la Salud.

 

 

Las páginas web que realizan actividades ilegales...

 

- Venden medicamentos no autorizados en España.

 

- En algunos casos, los medicamentos que venden son falsificaciones, actividad perseguida por la OMS y la Interpol.

 

- Venden medicamentos que requieren receta médica, lo que está expresamente prohibido en nuestro país.

- No se corresponden con oficinas de farmacia legalmente autorizadas.

 

- Son webs en las que no se informa de quién es el propietario, el farmacéutico responsable y no hay una dirección física.

 

- Las webs ilegales, además, pueden vender medicamentos no autorizados, importados ilegalmente o que han sido retirados del mercado por producir efectos adversos.

 

- En muchas ocasiones, el medicamento comprado en webs ilegales se recibe con un etiquetado o prospecto en otro idioma. Esto incide directamente en la eficacia y seguridad del tratamiento.

 

- Es una actividad comercial fraudulenta, por lo que estás poniendo en peligro tus datos personales y financieros.