Valdenuño Fernández cumplirá con la tradición del Santo Niño Perdido
08/01/2011 - 22:00
Los danzantes y la botarga protagonizarán los actos de esta Fiesta de Interés Turísitco Provincial
Como la tradición dicta, la fiesta del Santo Niño Perdido será el próximo día 9 de enero, primer domingo después de Reyes, en la localidad campiñera de Valdenuño Fernández. Para ello, la población se viste de gala, lista para la celebración de una de sus fiestas más importantes del año. La fiesta tiene su origen en el siglo XVIII, tiempo en que se cree que un niño abandonó su casa y el pueblo se volcó en su búsqueda yendo casa por casa para encontrarle. Finalmente fue encontrado en la iglesia donde todo el mundo lo celebró con gran entusiasmo. Hoy, todo ello se representa en la figura de una botarga acompañada de ocho danzantes y un tamborilero. Juntos van por las casas del pueblo en busca del santo niño, en las cuales también se pedirán limosnas, dulces, licores, etcétera. Además, en muchas de ellas, se hará una pequeña representación de la danza del paloteo. La búsqueda finaliza en la iglesia del pueblo, donde tras una misa se realiza cabo la danza del paloteo. Esta danza es símbolo de confrontación entre el bien y el mal. Los danzantes, al son del tamborilero, chocan sus palos con gran fuerza llegando incluso muchos a romperse. Se trata de una danza de gran impacto visual y con la que el pueblo se siente muy involucrado, pues de ella todos han participado. Los danzantes son jóvenes entre 18 y 23 años, que suelen estar de danzantes cerca de cinco o seis años. De ahí que el pueblo esté involucrado, pues todos los hombres del pueblo durante su juventud han sido danzantes, y los niños ya desde los 14 años aprenden la danza para dar relevo en un futuro. Ya por la tarde se celebra una procesión con la imagen del Santo Niño Perdido, tras la cuál se realizará la también tradicional guerra de las naranjas, también símbolo de lucha entre el bien y el mal, pues se lanzan naranjazos entre botarga y danzantes. Para concluir con la fiesta se rifa una cordera, anguila, jamón, regalos sorpresas y otros muchos objetos entre la gente del pueblo y todo aquel que haya ido a la fiesta. Se trata de una Fiesta de Interés Turístico Provincial, por lo que los vecinos de la localidad están siempre encantados de que personas de otros lugares vayan siempre al pueblo a disfrutar de esta maravillosa tradición y la hagan conocer a gente que no la ignore. No en vano, son muchos los que aprovechan que todavía nos encontremos dentro de las fiestas navideñas para acudir a esta celebración, muestra del rico folclore que podemos encontrar en la provincia de Guadalajara.