Valeriano Gómez impone la Medalla al Mérito en el Trabajo a dos guadalajareños

25/11/2011 - 12:51 Redacción

 
   Los empresarios guadalajareños Mariano Hervás y Pedro García Moya, de Sigüenza y Horche respectivamente, recibieron ayer la Medalla al Mérito en el Trabajo, en su categoría de plata, junto a otras personas procedentes de distintos puntos del país. El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, fue el encargado de imponer unos galardones que, según aseguró, reconocen el compromiso de estas personas con el proceso de desarrollo y de construcción de la convivencia en España.


  El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, hizo ayer entrega de 25 medallas al mérito en el trabajo, nueve en su categoría de oro y 16 de plata. Entre estas últimas se encuentran dos guadalajareños, los empresarios Pedro García Moya, de Horche, y Mariano Hervás, de Sigüenza. También fueron galardonados con la medalla de oro Francisca Dassí, José Ignacio Lavernia, Francisco Luzón, Ivonne Blake, María Jubilia Fernández, Marcos Gómez Sancho, Luís Bassat, Matilde de Urrutia y Telesfora Galiana.

  Tras el acto de entrega de las medallas, Valeriano Gómez aseguró que con este acto se demuestra que la sociedad sabe reconocer y recompensar los años que estas personas han dedicado al trabajo, su dilatada vida profesional, y su compromiso con el proceso de desarrollo y de construcción de la convivencia en España.

  Durante su intervención, destacó que desde los distintos ámbitos profesionales de los galardonados, todos ellos habían practicado sus oficios con respeto y sin asustarse de los retos a los que habían tenido que someterse. “Lejos de practicar una vida puramente individual nos han dado ejemplo de un grupo de personas unidas por un factor común: el trabajo en su más amplia definición como es la de mejorar la vida de las gentes”. Emprender en la propia tierra Tanto García Moya como Hervás eligieron su tierra para desarrollar su espíritu empresarial.

  El primero en Horche, y el segundo en Sigüenza, tuvieron en contra la falta de recursos y la lejanía de las grandes urbes, pero no fue impedimento para tener éxito en el mundo empresarial. Pedro García Moya nació en Horche hace 75 años y fue allí donde sentó las bases de su empresa. Fue el 10 de enero de 1960 cuando se inició en el mundo empresarial. Recuerda que empezó solo con un “tallercito”. “Me animaron unos amigos de Horche. Me dijeron que no había nadie en Guadalajara que se dedicara al níquel, el cromo y el pulido y entonces localicé un pequeño taller y empecé a funcionar”.

  Fue uno de los primeros en instalarse en el polígono del Henares en el año 1964, y en 1981 creó Industrias Tagar que fue creciendo y diversificando el negocio hacia la fabricación de banquetas, sillas y mesas de cocina y otros tipos de muebles. Tras 52 años de trabajo ha conseguido crear un grupo de empresas dedicado a la fabricación de mobiliario. Mariano Hervás, por su parte, nació en 1934 en Villacorza, pedanía de Sigüenza, y en 1950 se trasladó a Madrid para prepararse para la formación profesional de Renfe.

   Tras aprobar la oposición y formarse como ebanista, en 1953 concluyó el aprendizaje y pasó a formar parte del personal de Renfe. “Por aquellos años no había muchas personas preparadas, por lo que no era raro que la empresa privada viniera a por nosotros”. Así sucedió en su caso, y sin pensárselo, dejó Renfe, donde ganaba 4.000 pesetas al mes, para ganar 12.500 en Garza.

  Sin embargo, la idea de emprender un negocio propio empezó a rondarle al cabeza. “Un amigo del pueblo me comentó que se dedicaba a colocar parqué, cuando yo ni siquiera sabía lo que era”. Decidió iniciarse en el mundo empresarial en este sector, “pero no en Madrid, ni siquiera en Azuqueca, sino en mi tierra, que es una zona deprimida a 70 kilómetros de Guadalajara y a unos 120 de Madrid”. Su inquietud empresarial le llevó en 1990 a crear otra de sus empresas, Hercusa Industrial SA, con el objetivo de hacer piezas pequeñas de madera para bricolaje, también ubicada en Sigüenza y que exporta el 80 por ciento de su producción.