Zorita advierte de alarmantes variaciones de nivel en el río Tajo en un solo día

17/04/2017 - 12:41 J. PASTRANA

Los habitantes de Zorita advierten que, desde hace un año, se producen cambios en el nivel del agua del Tajo de hasta un metro en un solo día, lo que estaría perjudicando a regantes, medio ambiente y desarrollo turístico.

El río Tajo no ofrece su mejor cara estos días. A la situación que están provocando los continuos trasvases en la cabecera, viene a sumarse la imagen que ofrece a su paso por Zorita de los Canes. Allí, agricultores y empresarios turísticos alertan de que, desde hace aproximadamente un año, se están produciendo unas fluctuaciones en el nivel de agua  de hasta un metro en periodos de apenas 24 horas.
A la hora de buscar una explicación, señalan a la gestión que Gas Natural hace de las centrales hidroeléctricas de Zorita y Almoguera, entre las que se encuentra este tramo de río. Ni el Ayuntamiento ni los afectados ponen en duda que la compañía esté trabajando dentro de los márgenes establecidos por la Confederación Hidrográfica del Tajo, pero sí consideran que se ha producido un cambio en el régimen de explotación. “Antes, el nivel del agua solía oscilar entre los 20 y 40 centímetros, pero llega hasta de un metro” y, según otros afectados, hasta metro y medio.  Además de los efectos que esta situación pueda tener sobre la actividad de los agricultores, también destacan el daño que provoca a la flora y fauna del entorno.

La primera vez en 40 años
Manuel Ruiz Prada es uno de los agricultores más importantes de la zona y es contundente: “Gas Natural ha cambiado su política de explotación (...) Bajan el pantano a lo bestia en el salto de Almoguera y lo vuelven a rellenar con el de Zorita”. Ruiz Prada asegura que en los momentos críticos ni siquiera puede regar porque el agua no llega a los motores de la toma de agua. Por eso ha recurrido a la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), pero “dice que tienen derecho a hacer estas variaciones”.  De hecho, este medio ha intentado ponerse en contacto con la CHT para tratar la situación y saber si tienen conocimiento de lo que está sucediendo, pero hasta la fecha la confederación no ha respondido a las comunicaciones.
Ruiz Prada recuerda que “desde hace unos ocho años tenemos declarado un parque fluvial” y que “al variar el caudal, el entorno de los patos y los peces cambia brutalmente (...) Llevo 40 años regando y antes no habíamos tenido problemas, hasta que cambió el sistema de explotación”. También el negocio turístico se está viendo afectado por la situación. En la localidad apuntan que en verano suelen ser muchos los que se acercan hasta allí a darse un baño, “pero baja tanto el agua, que ahora se llena de barro”.
Elías Baldominos es el propietario del restaurante La Abuela Maravilla. “Nosotros estamos sufriendo esta situación. Es que a veces la lámina de agua desaparece casi por completo y eso es un problema porque esto parece  casi seco (...) Siempre hemos sacado pecho porque teníamos vistas al Tajo, pero ahora... ”.
 Baldominos asegura que para un municipio como Zorita, el agua “es el motor de desarrollo. Somos 30 habitantes y aquí el río es fundamental”. En este sentido, también apunta hacia la gestión de las centrales hidráulicas. “Otras veces han regulado este tramo de otra forma, con más delicadeza”.
Algo similar opina Raquel Adalid, gerente de La posada de Zorita. En su caso, teme los olores que puedan llegar con los meses de verano, cuando el río esté más bajo. Además, se hace eco del malestar que se vive en el municipio. “La gente está preocupada, porque esto no había pasado antes”.  
Jesús García Olmos tiene un negocio de piraguas en Zorita y suma su voz a la llamada de atención. “A mí me afecta de forma directa porque tengo que meter a los clientes por el cieno que se genera cada vez que baja el nivel”. Y también ha recibido quejas por el mal olor.  “Es que hablamos de zonas que pierden el agua de un día para otro. Son plantas que se mueren, huevos de peces que se mueren... Es que en un rato esto baja muchísimo”.

Cumpliendo con la concesión
Desde Gas Natural han explicado su posición. En primer lugar, confirman lo que nadie niega, que realiza el aprovechamiento hidroeléctrico de estos embalses “con un riguroso cumplimiento de los requisitos legales y ambientales existentes en los mismos”, cumpliendo en todo momento lo establecido por la  CHT, “asegurando, tanto los caudales destinados a abastecimiento y riego, como a los usos ambientales y el caudal ecológico establecido”.
Desde la compañía recuerdan que la producción de energía hidroeléctrica está sujeta a la demanda existente y a las oscilaciones que se pueden producir en otros generadores, como la energía eólica y la solar. Por este motivo “Gas Natural debe combinar los requisitos del sistema eléctrico nacional con los desembalses establecidos”, que están regulados por la concesión aprobada por la CHT.
Respecto a los problemas con las tomas de agua que se emplean para otros usos, señalan que algunas de ellas fueron construidas “hace años”, por lo que se ha tratado de colaborar con los propietarios para adaptarlas a la situación actual. Finalmente, apuntan que, “aunque los usos lúdicos en los embalses no son en ningún caso descartables”, cabe recordar que no son prioritarios frente a las necesidades de abastecimiento, regadío y energéticas. “Las actividades lúdicas pueden existir y ser compatibles, pero en ningún caso son condicionantes al funcionamiento de los embalses”.