Anfac denuncia absentismo más alto de la historia del sector del automóvil
01/10/2010 - 09:45
El absentismo laboral en la industria automovilística española se situó el año pasado en el índice más alto de su historia, al alcanzar alcanzando el 7 por ciento, que supone la pérdida de casi 6,7 millones de horas de trabajo, 300.000 horas más que en el ejercicio anterior.
Según datos aportados hoy por la Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), el número de horas de trabajo pedidas el año pasado implica también la pérdida del 64% de la producción de una factoría de turismos de 8.000 trabajadores a dos turnos, es decir 272.000 turismos.
El 80% de todo el absentismo laboral de los fabricantes de automóviles en 2007, incluido el injustificado, se amparó en una baja médica.
Llevado a términos estrictamente económicos, este tiempo no trabajado el período 2000-2007, en el que se acumulan más de 51 millones de horas, se traduce en más de 26.000 millones de euros.
Anfac califica esta coyuntura laboral de la industria automovilística española de "preocupante" y más si se compara con índices de absentismo del pasado, cuando estaba en torno al 5,2%, es decir en ocho años este registro se ha elevado en 1,8 puntos poercentuales.
Asimismo, la situación de la industria española no resiste la comparación con la de otros países directamente competidores como Japón, donde el absentismo apenas llega al 1%, Turquía con el 1,2%, Rumanía, con el 2% o Francia que se eleva hasta el 4%
Estos datos se ha trasladado por parte de Anfac a los partidos políticos para que analicen el grado de competitividad de la industria española y también se han denunciado al secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, en una reunión mantenida el pasado lunes en la sede del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, que se ha comprometido, según Anfac, a estudiar medidas que palíen el problema.
Para Anfac, el absentismo afecta a trabajadores no absentistas, a la competitividad de la empresa, y genera graves consecuencias económicas, organizativas, sociales y productivas, suponiendo una amenaza para el empleo.
Admite esta asociación que el problema es complejo y requiere, junto a medidas dirigidas a un mayor control en la concesión y duración de las bajas, potenciar una mayor concienciación social, ya que "el absentismo injustificado constituye un fraude al Estado, a la empresa y al resto de los trabajadores".
El 80% de todo el absentismo laboral de los fabricantes de automóviles en 2007, incluido el injustificado, se amparó en una baja médica.
Llevado a términos estrictamente económicos, este tiempo no trabajado el período 2000-2007, en el que se acumulan más de 51 millones de horas, se traduce en más de 26.000 millones de euros.
Anfac califica esta coyuntura laboral de la industria automovilística española de "preocupante" y más si se compara con índices de absentismo del pasado, cuando estaba en torno al 5,2%, es decir en ocho años este registro se ha elevado en 1,8 puntos poercentuales.
Asimismo, la situación de la industria española no resiste la comparación con la de otros países directamente competidores como Japón, donde el absentismo apenas llega al 1%, Turquía con el 1,2%, Rumanía, con el 2% o Francia que se eleva hasta el 4%
Estos datos se ha trasladado por parte de Anfac a los partidos políticos para que analicen el grado de competitividad de la industria española y también se han denunciado al secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, en una reunión mantenida el pasado lunes en la sede del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, que se ha comprometido, según Anfac, a estudiar medidas que palíen el problema.
Para Anfac, el absentismo afecta a trabajadores no absentistas, a la competitividad de la empresa, y genera graves consecuencias económicas, organizativas, sociales y productivas, suponiendo una amenaza para el empleo.
Admite esta asociación que el problema es complejo y requiere, junto a medidas dirigidas a un mayor control en la concesión y duración de las bajas, potenciar una mayor concienciación social, ya que "el absentismo injustificado constituye un fraude al Estado, a la empresa y al resto de los trabajadores".