Campillo de Ranas se queja de falta de agua, pese a tener cerca cuatro embalses
El alcalde socialista del pequeño municipio de Campillo de Ranas, Francisco Maroto, se queja de que, si bien solo en la comarca de la Sierra Norte hay cuatro embalses, haya pueblos que como el suyo o sus pedanías tengan que padecer la falta de agua en los meses estivales, con lo que ello supone para la economía de la zona, con independencia de que este 2023 haya más sequía que años anteriores.
"No se puede tener a los alcaldes todos los años, y con razón, contra el paredón de los vecinos porque quien tiene y debe hacer instalaciones de agua para garantizar el abastecimiento no las hace", ha lamentado en declaraciones a Europa Press el alcalde de este municipio de 60 habitantes en invierno, que durante el verano multiplica la población por cuatro o por cinco hasta finales de septiembre.
"Es una pataleta que tenemos año tras años cuando surge el problema, pero nadie da soluciones", ha denunciado el regidor, que añade que "no es de recibo" que en la Sierra Norte haya cuatro pantanos --Alcorlo, Beleña, el Vado y el Pozo de los Ramos-- y que no tengan agua en los pueblos de la cabecera cuando se incrementa la población.
"Siempre se habla de Entrepeñas y Buendía y nosotros no tenemos tampoco agua", ha protestado, recordando que el antiguo pueblo de El Vado pertenecía a Campillo de Ranas, y haciendo hincapié en que esta situación ya está "generando un conflicto civil" entre los propios vecinos.
Y es que Maroto asegurar entender las quejas, pero quiere dejar claro que esto no debería producirse y que, siempre desde un consumo responsable, cualquier vecino tiene derecho al uso del agua, al igual que los establecimientos, que suponen también riqueza y turismo para la comarca.
"NULO FUNCIONAMIENTO DE AGUAS C-LM"
Por ello, ante esta situación, el primer edil de Campillo de Ranas se queja fundamentalmente del nulo funcionamiento del organismo de Aguas de Castilla-La Mancha. Según Maroto, "no funciona, al menos en lo que se refiere a provincias como Guadalajara".
"Aguas de Castilla-La Mancha, con su gerente, sus ingenieros y toda esa gente que pagamos todos tenían que prever la gestión de todas las instalaciones hidráulicas necesarias para que todos los ciudadanos de la región tengamos agua en las mismas condiciones", ha aseverado muy enfadado.
Alerta de que la escasez hídrica ya está influyendo en el desarrollo económico de pueblos que, como el suyo, cuentan con un número importante de casas rurales y donde los eventos de bodas son un revulsivo turístico en la zona. Pero debido a la falta de agua, estos recursos pueden también peligrar.
En este sentido, Maroto ha recordado que Aguas de Castilla-La Mancha debería afrontar este tipo de situaciones. Y considera una paradoja que si bien cualquier pueblo de la Sierra Norte que quiera hacer una ampliación urbana del casco necesite un informe de este organismo, pero en estos casos no traten de resolver su problema. "Para fiscalizar si existen, pero para gestionar no", afirma contundente.
Una situación que, según ha señalado, se da en al menos una veintena de pequeños municipios de la comarca en época estival y que hace necesaria la realización de una infraestructura que conduzca el agua desde los pantanos que dispone la zona a sus pueblos.
"Campillo de Ranas es un pueblo que quiere progreso y que tiene 22 casas rurales y cinco restaurantes y notamos la falta de agua". Por ello, ha reclamado una estación potabilizadora como la que hay en Mohernando y que desde ahí se reparta a los municipios que lo requieran el líquido elemento porque "es una obra costosa" pero cree que es más necesaria que la fibra óptica porque "sin ella no se puede vivir".
"El vecino de a pie es muy sacrificado y si tiene que tirar de botijo, tira, pero cuando interviene la economía, a todos nos joroba", ha señalado.
La falta de agua también está afectando a la ganadería y, aunque no ha negado que desde la Diputación sí han mostrado su disposición a ayudarles o enviarles agua cisterna por esta situación, según Maroto, no siempre pueden hacerlo o llega a tiempo porque falta personal y también tienen otras necesidades que cubrir.
Lo cierto es que ya han recibido algún camión cisterna pero cuando vuelven a pedir la respuesta que reciben es la siguiente: "Tenemos solo tres camiones cisterna y toda la provincia está igual", declara este regidor, quien, además, reconoce que no todos los pueblos están dispuestos a que les quiten el agua en estos momentos.
Dicho esto, ha relatado que hace varios días tuvo que llamar la atención al servicio de incendios del Infocam porque, sin contar con él, cargaron un camión cisterna en Campillejo y le vaciaron el depósito.
"No hay necesidad de crear estos enfrentamientos civiles si se acometen las infraestructuras que se requieren", abunda Maroto, que se pregunta con ironía qué hacer con las empresas que estén interesadas en instalarse en la comarca.
"Hablamos de que viva gente en los pueblos y este es otro problema añadido", ha concluido Maroto, convencido de que hasta finales del próximo mes algunas de sus pedanías tendrán que seguir "tirando" de cisternas y de que si mañana, por desgracia, se produjese un incendio grave, en la zona no tendrían donde cargar agua.