Cielos limpios para disfrutar observando el universo

El turismo astronómico está en auge, y los cielos de Castilla-La Mancha cada vez tienen más renombre a nivel  nacional. Con más de 290 municipios comprometidos con la protección del cielo nocturno y una red en expansión de observatorios, miradores y espacios certificados, la región ofrece una experiencia singular basada en la contemplación del firmamento.

Las condiciones naturales de la comunidad, marcadas por una baja densidad de población, escasa contaminación lumínica y extensas áreas rurales, han favorecido el desarrollo de esta modalidad de turismo sostenible. La iniciativa se articula en torno al sello Starlight, una certificación que garantiza la calidad del cielo para la observación astronómica y que reconoce tanto los valores naturales como el compromiso local con la educación ambiental.

Actualmente, Castilla-La Mancha cuenta con múltiples destinos certificados como Destinos Turísticos Starlight, entre ellos: Serranía de Cuenca, Valle de Alcudia y Sierra Madrona, Cielos de Guadalajara, Parque Nacional de Cabañeros, Sierra del Segura, Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel, La Manchuela, Campos de Hellín, Monteibérico-Corredor de Almansa y Júcar-Mancha Centro.

Uno de los ejemplos más destacados es el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, donde se desarrollan actividades guiadas que incluyen observación con telescopios, identificación de constelaciones y charlas divulgativas. Las condiciones de visibilidad durante el invierno, con noches despejadas y menos humedad, permiten disfrutar de fenómenos como lluvias de estrellas o la observación de planetas.

En la provincia de Ciudad Real, el Valle de Alcudia y Sierra Madrona combinan su patrimonio natural con una agenda de observaciones astronómicas organizadas por entidades locales. Además del cielo, el entorno ofrece rutas geológicas, avistamiento de fauna y visitas culturales.

Albacete cuenta con una red de 17 miradores astronómicos distribuidos por las comarcas de la Sierra del Segura, Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel. Localidades como Nerpio, Letur o Bogarra han integrado el astroturismo como eje de su oferta turística, ofreciendo alojamientos temáticos, rutas nocturnas señalizadas y actividades familiares.

Los nuevos destinos certificados como Cielos de Guadalajara, Júcar-Mancha Centro o Monteibérico-Corredor de Almansa amplían la cobertura territorial de esta modalidad, promoviendo el desarrollo rural y la diversificación del turismo más allá del verano. En muchos casos, los municipios han adaptado su iluminación pública para reducir la contaminación lumínica, contribuyendo a un modelo turístico más respetuoso.

El sitio web oficial AstroturismoCLM centraliza la información sobre cada enclave y en él los interesados pueden encontrar un calendario de actividades, alojamientos recomendados y de recursos didácticos disponibles.

Además del componente lúdico, el turismo astronómico tiene una dimensión formativa. Las actividades suelen incluir explicaciones sobre astronomía básica, navegación celeste, historia de la ciencia y mitología de las constelaciones. Muchas de las experiencias están diseñadas para público general, familias y centros escolares.

Bajo sus cielos oscuros, la región invita a levantar la vista y redescubrir el universo, con los pies en la tierra y la mirada en las estrellas.