“Cuando pasen 20 o 25 años, esta legislatura se verá como de enorme transición”
Llegó hace dos años a la Presidencia de las cortes regionales y ya ha conseguido que sea el parlamento más activo del país. Aprobación de leyes, consensos y trabajo con la oposición son las marcas de identidad del azudense Pablo Bellido, quien asegura que aún queda “mucho” por hacer. Desde Nueva Alcarria le entrevistamos en su doble faceta como presidente de las Cortes y como secretario general del PSOE.
Se cumplen dos años de su labor al frente de las Cortes regionales, un parlamento que en su balance calificaba como “muy activo”.
Estamos muy satisfechos. Somos uno de los parlamentos que más produce: 24 leyes en lo que llevamos de legislatura, mucho más que el Congreso de los Diputados, el Senado y, por supuesto, que la inmensa mayoría que los parlamentos autonómicos de España. Y además con una gran participación de la oposición y con mucho consenso. Por lo tanto, muy satisfecho y muy agradecido a todos los que lo hacen posible, Gobierno y oposición.
Habla de actividad pero también de cercanía y mucha actividad institucional.
El propósito que tuvimos cuando accedimos a la Presidencia de las Cortes es que la cámara que representa a los hombres y mujeres de Castilla-La Mancha estuviera más conectada con la realidad. A pesar de la pandemia y las dificultades que ha habido, hemos hecho cosas que nunca se han hecho, como las jornadas de puertas abiertas. Hemos tenido una enorme presencia institucional y como presidente he visitado muchísimos municipios. Hemos producido videos para acercar la labor de representación a la ciudadanía; hemos establecido canales de comunicación bidireccionales… en definitiva, estamos intentado que la sociedad comprenda y conozca mejor lo que hacemos y, sobre todo, ser más permeables a las críticas, sugerencias, necesidades y demandas de la sociedad. Ésa es la obligación que tenemos como Cortes de Castilla-La Mancha, pero además es una sensibilidad, que los ciudadanos tengan un mayor conocimiento y mejor comprensión y sobre todo una mayor capacidad de influir en las decisiones que tomamos desde el poder legislativo.
Esa transición a unas Cortes regionales más “modernas” y “abiertas”, ¿se ha complicado a causa de la pandemia?
Ha sido más complicado, pero teníamos muy claro el objetivo y nos hemos enfrentado a las circunstancias como ha hecho todo el mundo. Hemos ideado sistemas de participación que hasta ahora no habían sido necesarios, como el voto telemático o las reuniones telemáticas. Hemos adaptado el reglamento y hemos tenido que restringir las visitas a las Cortes y lo hemos sustituido por videos con una presentación del trabajo parlamentario y del propio espacio físico que nos acoge. En fin, hemos tenido que ir adecuando las respuestas a las circunstancias que han sobrevenido. Pero estamos satisfechos porque no hemos rebajado el nivel de exigencia. Quizá alguna cosa no hemos podido hacerla, pero siempre lo hemos intentado. Y en ese sentido hemos sido muy respetuosos con los objetivos marcados. Y aún ambicionamos más, porque no se trata de ser cercanos por ser cercanos. Se trata de ser cercanos para que la gente sepa que puede influir para ser útiles, que es el objetivo de nuestra labor parlamentaria.
¿Esos cambios han venido para quedarse?
Han venido para quedarse, aunque lo deseable en el trabajo parlamentario es la presencialidad. Porque hay muchas cosas que hay que negociar. No se puede ir a un parlamento a fijar una posición y a mantenerla consolidada sin moverla un milímetro. La obligación es escuchar al adversario, que representa también a una parte de la sociedad, e intentar alcanzar acuerdos. Por tanto, por las obligaciones, las circunstancias, hemos ido a accesos e instrumentos que hasta ahora no habían sido necesarios, pero en la medida de lo posible, nuestro objetivo de negociar, consensuar y construir unas mejores leyes con la suma de todos, debe hacernos intentar hacer posible la presencialidad siempre que las circunstancias lo permitan.
En esas 24 leyes que se han aprobado estos dos años, de las que 18 han sido sin un voto en contra y 10 por unanimidad. ¿Por qué cree que se ha producido este cambio respecto a legislaturas pasadas?
El Gobierno no necesita del apoyo de la oposición para aprobar nada, pero consciente de que una ley aprobada por todos es una ley que perdura, ha buscado el acuerdo, no por necesidad, pero por principio. La oposición podría desentenderse de la función normativa y legislativa. No vamos a imponer nuestras ideas. En general hemos conseguido grandes acuerdos, dos terceras partes de nuestras normas sin votos en contra. Es verdad que hay que distinguir, por ser justos, la oposición de Ciudadanos, que ha sido más constructiva y más de negociación, que la del PP. Aún así, en el trabajo final es para estar muy satisfechos. Otra cosa distinta es que en algunas ocasiones, el PP, en lugar de atenerse a la realidad y hacer propuestas, intenta presentar una deformación de la realidad. Creo francamente que esto no es conveniente e incluso indeseable. Pero con carácter general estamos satisfechos del trabajo de búsqueda de consenso que hay en el parlamento. Y el resultado está ahí: muchas leyes, más que la inmensa mayoría de parlamentos autonómicos y más que el Congreso y el senado, y además que con mucha más unidad.
De las leyes aprobadas, ¿cuál es la que más ilusión le ha hecho sacar adelante?
Hay muchas leyes importantes, como la de la Despoblación, que afecta mucho a la provincia, y demuestra que no se trata sólo de palabras y de hechos. Muchas voces hoy hablan de la despoblación y del reto demográfico, pero poco se hace. El Gobierno de esta región no se queda en el discurso y la elocuencia y se pone a trabajar. Ha hecho una ley muy participada de abajo arriba, escuchando a todos lo sectores de la sociedad y también a la oposición. Hemos conseguido tener la primera ley en toda España, una ley pionera, que va a ser imitada y que esperamos que el Congreso de los Diputados también valore. Luego vendrá una estrategia y planes concretos para materializar las ayudas, que podrán ser directas a la inversión, blindaje de los servicios públicos, incentivos a la cotización de la Seguridad Social, ventajas fiscales en la cuota autonómica del IRPF, en definitiva, muchas medidas de todo tipo. Hay otras leyes muy importantes, como la Ley para una reserva de material sanitario, una garantía que nos previene y protege de cara a futuras pandemias y circunstancias sobrevenidas muy extraordinarias; la Ley de economía circular, de la mujer rural… muchas leyes que tienden a hacer una sociedad más cohesionada y más justa.
Después de estos años de hiperactividad, ¿hay algo pendiente para los dos años que restan de legislatura?
Queda mucho trabajo por hacer desde el punto de vista normativo y legislativo, pero no es mi deber hacer anticipo de las leyes que pueden venir, porque mi labor es de arbitraje. Pero creo que estamos en una legislatura que, cuando pasen 20 o 25 años, se verá como una legislatura de enorme transición, de enorme adecuación a los nuevos tiempos. Queda mucho que hacer por esa parte y queda el propósito de consolidar los cambios que hemos comenzado en la parte institucional y representativa. Queremos de verdad que las Cortes jueguen un papel perenne en la sociedad, que haya más vinculación y conocimiento. Queremos aprovechar el 40 aniversario del estatuto de autonomía como de la constitución de las Cortes para que la ciudadanía conozca mejor el trabajo parlamentario, a sus representantes y representados y sobre todo para que tenga más capacidad de influencia. Eso entre otras muchas cosas: queremos unas Cortes más accesibles, sostenibles, igualitarias y que participen además en la construcción de una sociedad más igualitaria.
La semana pasada se anunciaba la recuperación de dos frecuencias de tren en la línea Madrid-Sigüenza, pero la plataforma en Defensa del Ferrocarril acusó al PSOE de apropiarse de una lucha propia.
Esto nace a raíz de una reunión de la plataforma con los responsables del Gobierno de España y de Renfe, un día antes de una rueda de prensa del PSOE. Pero quiero recordar que la lucha sobre la recuperación de estos trenes que se quitaron por la pandemia la inició el PSOE. Yo fui a Sigüenza junto con el senador Rafael Esteban y hablamos con la alcaldesa seguntina y también el de Jadraque. Luego se sumó la plataforma, a la que respetamos en general. Pero prácticamente todo el trabajo lo han hecho los parlamentarios socialistas, los alcaldes socialistas, el presidente Emiliano García-Page que, junto con el consejero de Fomento y conmigo, tuvo una reunión con el ministro de Fomento para pedirle la recuperación de los servicios. En definitiva, hemos trabajado mucho; no decimos que la plataforma no haya aportado, que desde luego sí, pero el PSOE se ha implicado mucho. Y lo que dije en la rueda de prensa, un día después de que la plataforma valorase la reunión satisfactoriamente, fue agradecer a los alcaldes su lucha constante. La diferencia es que cuando gobierna el PP en España, el PP aquí aplaude los recortes. Y cuando gobierna el PSOE en España, el PSOE aquí lo que hace es exigirle al máximo. Y bueno, hemos conseguido revertir los recortes que se produjeron en la pandemia, y cuando gobernaba el PP en España, Castilla-La Mancha y Guadalajara, la discriminación fue brutal y no se revirtió nada. Por cierto, el exalcalde de Espinosa del PP que ha salido ahora a quejarse, guardó entonces un silencio cómplice. Por tanto, apoyo a las reivindicaciones de la plataforma y mucho respeto a las que forman parte de ella y sobre todo a quienes representan a alguien: alcaldes, partidos políticos, sindicatos, asociaciones, y una persona que va porque es exalcalde del PP y cuyo único objetivo es erosionar la imagen del Gobierno de la nación.
Otro caballo de batalla es el trasvase Tajo-Segura, riqueza que se lleva yendo desde hace ya más de 40 años.
El trasvase se aprobó en la dictadura cuando era imposible protestar. Hoy en día sería imposible que se produjera. La realidad es la siguiente, cuando gobierna el PP en España, en Castilla-La Mancha y en Guadalajara se trasvase más agua y se aprueban unas reglas que nos saquean. Ahora gobierna el PSOE en Madrid, Castilla-La Mancha y Guadalajara y hemos conseguido reducir la cantidad de agua que se va a trasvasar con carácter general. ¿Estamos satisfechos? No. Los parlamentarios socialistas estamos trabajando junto con los alcaldes ribereños para que haya menos agua trasvasada. Pero tenemos que reconocer la evidencia. Gracias al Gobierno de Pedro Sánchez y al de Emiliano García-Page, hoy se trasvase menos agua que antes y se va a trasvasar aún menos. No reconocer los avances sería tanto como favorecer que haya retrocesos. Cuando gobernaban Rajoy y Cospedal saqueaban la provincia de Guadalajara. Cuando gobiernan Pedro Sánchez y García-Page, se dan pasos adelante hacia el fin del trasvase. Por lo que la valoración que tengo que hacer es de satisfacción, pero sin rebajar el nivel de exigencia, porque nuestro objetivo es que no se trasvase excepto para consumo humano.
Quizá algún escéptico piense que si se rebaja la cantidad de agua en nivel 2, esos trasvases podrían ser más frecuentes.
Se va a trasvasar menos agua y va a haber más agua en cabecera. Por tanto, se va a permitir más el uso turístico y el aprovechamiento en origen de esa agua. Los municipios ribereños lo saben, esto es un avance. Lo saben en el Levante, donde se están quejando, y lo sabe el PP, que crea una atmósfera de irritabilidad muy propia de la crispación. Pero saben que ellos aprobaron un memorándum de la traición. Cuando gobernaron en Castilla-La Mancha vendieron a la región y a Guadalajara para que Cospedal tuviera un puesto en Madrid. Y ahora Emiliano García-Page ha sido muy exigente, ha negociado con fuerza y ha conseguido enormes avances para el conjunto de la región y particularmente para los municipios ribereños. Por tanto, estamos satisfechos, pero eso no significa que dejemos de ser exigentes. El PSOE de esta tierra siempre antepone los intereses de los ciudadanos de la provincia a los del partido. Esa es la diferencia con el PP, que se sirve de la provincia para su provecho partidario.
Otro avance importante es el fin del abastecimiento con cisternas en el caso de Chillarón.
Esperamos que ya nunca más haya que abastecer con cisternas de la Diputación a ningún municipio ribereño. Esto se suma a los 40 millones que ha conseguido García-Page del Gobierno de España, que se va a traducir en importantísimas infraestructuras de abastecimiento y depuración y también en la generación de proyectos turísticos para que el rendimiento económico de esa agua almacenada sea lo mejor para los vecinos de la comarca ribereña. Estamos agradecidos por el esfuerzo inversor del Gobierno de España y muy satisfechos de la defensa de Guadalajara del Gobierno de García-Page. Ojalá que el PP, en lugar de lamentar los avances, nos ayude para conseguir más.
El PSOE se prepara para una época de congresos. ¿Cómo afrontará esos procesos?
Como siempre, con responsabilidad, con participación… Vamos a hacer primero un congreso federal para elegir al secretario general, pero no tiene ningún sentido que nadie se interponga en el camino de Pedro Sánchez. Ha conseguido dos apabullantes victorias electorales y está afrontando la recuperación económica. Lo mismo en el caso de García-Page. Tenemos al mejor presidente autonómico, por lo que tiene que ser el secretario general de los socialistas de Castilla-La Mancha. Además tiene una voz propia, siempre defendiendo los intereses de la región por encima de los del partido. Y también cuando toque, celebraremos el congreso provincial. Nosotros lo afrontamos siempre con el objetivo de ser no sólo la primera fuerza política de la provincia, sino de obtener la mayoría absoluta. Porque si no, Vox y PP se aliarán. El objetivo del PP hoy en día es ganar a Vox, pero sabe que probablemente no lo consiga. Sabe que la alternativa a los gobiernos socialistas en esta provincia es tener alcaldes de Vox apoyados por el PP. Por eso es tan importante que nosotros salgamos reforzados, ilusionados y movilizados de cara a las próximas elecciones de 2023. Porque ya nuestro rival no será sólo la derecha, sino la ultraderecha.
¿En el Congreso Provincial podríamos ver algún cambio?
Yo no adelanto especulaciones al respecto; cuando cerremos el congreso federal y regional y hayamos elegido nuestro secretario general a nivel de España y nuestro secretario general a nivel Castilla-La Mancha, valoraremos cómo nos organizaremos en la provincia. Creo francamente que a los ciudadanos de la provincia les interesa más cómo trabajos en las instituciones que cómo nos organizamos hacia adentro. En los congresos de los partidos políticos no se ganan elecciones, pero se pueden perder si salimos divididos. Por tanto, lo sensato, lo razonable, lo deseable es que antepongamos el trabajo político, la elaboración de un proyecto que nos sirva como borrador del futuro a disputas personales. Pero cuando toque hablar de personas, hablaremos. Ahora estamos centrados en el Congreso Federal, luego en el regional, a continuación tocará el provincial y luego los locales. Es muy importante que tengamos claro que lo fundamental es lo que afecta a la ciudadanía, y eso son los gobiernos. Y tanto el Gobierno de España, como el de la región, como la Diputación, la inmensa mayoría de ayuntamientos de la provincia que hoy gobernamos, tienen gobiernos sólidos, estables y preocupados por los problemas de la ciudadanía.
¿Cómo ve los gobiernos de la provincia de Guadalajara?
Desde el partido estamos muy agradecidos del trabajo de nuestros alcaldes y de nuestros concejales, donde gobiernan y en la oposición. Con mucha responsabilidad en la oposición, pues no han puesto problemas a los gobiernos de otros partidos a la hora de colaborar con la crisis del Covid. No intentamos subirnos a lomos de la crisis pandémica para erosionar un gobierno. Queremos ayudar a los gobiernos para que sean útiles a la ciudadanía. Y donde gobernamos, que es en la mayoría de los lugares, atendiendo a quien más lo necesita. Esta región se ha caracterizado por ser la que más gasto por el Covid ha hecho en toda España y la que más ayuda ha dado a sus autónomos y empresarios. Alguno podrá pensar que ha sido insuficiente, pero si ha sido insuficiente aquí, más lo ha sido en otros lugares. Castilla-La Mancha ha sido el lugar donde más ayudas ha habido para sus empresarios y la que más gasto sanitario por habitante ha hecho. Y la Comunidad de Madrid ha sido la que menos. Y en la Diputación, el Gobierno de José Luis Vega y los compañeros que están con él en las funciones de Gobierno, ha sido enormemente responsable y además con una mirada de apoyo al mundo rural. Nosotros somos comprensivos de que el Corredor y la capital tienen que ayudar a la provincia y lo que hacemos es que la institución que puede trabajar por la igualdad de la provincia hace una discriminación positiva a los municipios más pequeños. Lo ha hecho con el Covid y con Filomena, por ejemplo.