De yo soy Jesús Tomillero

03/06/2016 - 21:14 Pedro Toledo

Este pobre hombre ha cometido un único pecado: reconocer su condición de homosexual de manera pública.

Decía el genial Machado, que una de las dos Españas,  ha de helarte el corazón. El problema es que muchas veces, la España que te lo hiela es la que menos te lo esperas. En este caso, la España del fútbol.
    Si, el fútbol esa “industria” que mueve el 2% de nuestro Producto Interior Bruto y que lo quieran o no, vertebra más este país que el AVE. El mismo fútbol, que nos ha hecho disfrutar de una gran final de Champions con un justo campeón (eso espero al menos, escribo esto el martes día 24) y que esperemos nos depare una gran Eurocopa. Ese fútbol, que nos hace pasearnos con orgullo por Europa, escuchando en la mismísima capital de Baviera, el “Que Viva España” de Manolo Escobar, medio en alemán y ante la atenta mirada de Pep Guardiola.
Ahora no estoy hablando de la vergonzante actuación de nuestros politiquillos de medio pelo; tanto los unos y como los  otros buscando puntos de choque, antes de ayer con el tema de las Esteladas, pasado mañana con otra cosa.  Todos sabemos, que tienen más de un problema para cada solución, en su eterna lucha para hacer de nuestros Estadios,  pequeños campos de batalla, para intentar  ganar su guerra particular para llevarnos a la más absoluta ruina caracolera.
    Sin embargo, como decía, hoy me refiero al caso del árbitro Jesús Tomillero Benavente, con el cual todos hemos de sentirnos plenamente identificados. Este pobre hombre, ha cometido un  único “pecado”: reconocer su condición de homosexual de una manera pública. Algo que en este país, en pleno año de gracia de 2.016, debería parecer lo más normal del mundo.
    Pues no, la España de los carvenícolas y trogolditas, resurge cual Ave Fénix, para insultarle y vejarle hasta tal punto, de hacerle abandonar el arbitraje. Su Comité de Árbitros y la Federación, lejos de apoyarle, toman la táctica del avestruz.
    Por lo que yo desde aquí, manifiesto, que mi más absoluta solidaridad con Jesús Tomillero, no ya como árbitro, que también, sino como persona. Nuestra constitución, recoge en su Título Primero, los derechos y deberes fundamentales y a ellos tenemos que atenernos. Por lo que desde aquí digo que:
-    YO SOY JESÚS TOMILLERO.  #yosoyjesustomillero
    Lo que manifiesto, con independencia de mi orientación sexual, que no voy a revelar, puesto que creo que es indiferente para este caso; pero tanto quien me conoce, como quien me lee, sabe perfectamente cuál es.
    Que la fuerza os acompañe.