“El Alto Tajo tiene una energía especial y mucho potencial a todos los niveles”

En pleno corazón del Alto Tajo, en Peralejos de las Truchas, echó a andar hace cinco años la empresa Sentir el Alto Tajo, una iniciativa pionera de Gemma Roselló Aparicio dedicada al ecoturismo, pero especializada en el ecoturismo inclusivo, que se ha convertido en un referente.

En los últimos días de 2020, su impulsora recibió el Premio Emprendedoras, en la categoría de Emprendimiento Social concedido por la Diputación de Guadalajara. Durante los últimos dos años, Gemma Roselló ha participado también en el programa Impulsa Mujer que lleva a cabo la Institución provincial. Y recientemente, Sentir el Alto Tajo ha formado parte de un proyecto innovador que ha puesto en  marcha la Consejería de Desarrollo Sostenible del Gobierno de Castilla-La Mancha, dentro de la Estrategia regional de Educación Ambiental, para revitalizar la educación ambiental y situarla en primera línea dentro del objetivo de conseguir un desarrollo sostenible pensando en todos los ciudadanos. Esto solo ha sido el principio, pues van a trabajar más en proyectos de Educación Medioambiental y también de atención a la discapacidad con proyectos inclusivos y accesibles en la naturaleza,tal y como explica Roselló.

Pregunta: ¿Qué es Sentir el Alto Tajo?

Respuesta: Es una empresa de ecoturismo inclusivo, lo que quiere decir que cualquier persona con una capacidad diferente, con una discapacidad, puede participar en todas las actividades en igualdad de condiciones que una persona sin discapacidad. Nosotros trabajamos para todo tipo de público, pero estamos especializados en personas con discapacidad. Todas nuestras actividades son inclusivas. A nosotros lo que nos diferencia es que somos una empresa pequeña y que también hacemos las cosas de manera pequeña para proteger este gran entorno en el que estamos, que tiene una biodeversidad en ecosistemas impresionante. Y cuidándolo de esa manera de ecoturismo, con un mínimo de impacto al medio, creemos que es la manera en la que se debe actuar sobre este territorio.

P: ¿Por qué estáis en Peralejos de las Truchas?

R: Estamos en Peralejos por una cuestión de amor por la tierra, a parte de que mi compañero José, que forma parte también del equipo, tiene sus raíces aquí. Hemos tenido experiencias de guiado por toda España, pero hemos decidido desarrollar este proyecto. Es que el Alto Tajo es muy especial, tiene una energía especial, es un paisaje único y creemos que tiene mucho potencial, pero a todos los niveles, no solo en patrimonio natural y geológico, sino también cultural y etnográfico. De hecho, nosotros diseñamos un producto especializado de vacaciones para para las personas con discapacidad en el que se tiene en cuenta toda la cadena de la accesibilidad. Nosotros eso lo cuidamos mucho. Hacemos estancias en las que cubrimos todo ese kit de accesibilidad: el alojamiento accesible, talleres inclusivos, visitas culturales, degustaciones, transporte y servicio de guiado adaptado a cada tipo de discapacidad...

P: ¿Cómo nació Sentir el Alto Tajo?
R: Nosotros estábamos trabajando ya como guías, sobre todo en reeducación de sentidos, y en concebir la naturaleza despacio, respetando, causando el mínimo impacto... y fue un poco por casualidad. Nos llamaron dos chicas ciegas y nos dijeron que querían venir a ver el Alto Tajo y nos contrataban como guías. Nosotros no habíamos trabajado con público con discapacidad, pero ellas nos dijeron que estuviéramos tranquilos que nos iban a explicar un poco, que estaban acostumbradas a hacer montaña con grupos de la ONCE... Vinieron y después de estar cinco días aquí nos dijeron que nos dedicáramos a esto porque habían estado pagando para ir a otros sitios con actividades accesibles y no habían llegado a entrar en un contacto tan directo con la naturaleza ni a vivir sensaciones como las que habían vivido aquí con nosotros. Nosotros no habíamos trabajado nunca con personas con discapacidad. Entonces a partir de ese momento, nos sentamos, reordenamos nuestra estrategia, me puse a hacer un estudio de mercado para ver cómo estaba en España el tema del ocio accesible en entornos naturales, ví que había un vacío inmenso, nos formamamos, nos titulamos como guías de montaña para personas con discapacidad y a partir de ahí fue crear, crear y crear actividades para que fueran accesibles. Y a partir de ahí ha sido crecer y crecer. La gente ha empezado a venir y a creer en nosotros, a pasárselo bien y disfrutar, y ahí estamos. Fue un poco por casualidad, pero hemos acabado aquí.

P: Es una empresa pionera en este sector...
R: Nosotros somos pioneros en España. Fuera de España sí que encuentras más actividades inclusivas, pero en España, Sentir el Alto Tajo es una empresa pionera. Hemos empezado nosotros a hacerlo y a raíz de nuestra experiencia han aparecido en otros lugares pequeños iconos, pero con el tiempo que hacemos nosotros no hay una empresa que se dedique a hacer lo que hacemos nosotros en realidad, que es atenderlo en todos los sentidos, toda la propuesta de ocio inclusiva. Realmente llenamos un vacío de ocio de calidad accesible, proque las personas con discapacidad quieren acceder a los espacios naturales, pero no pueden porque no tienen respuesta. Respondemos a un nicho de mercado que existe   y atendemos a una necesidad real para un colectivo que quiere moverse, que la mayoría de las veces llegan a sitios más increíbles y viviendo sensaciones más interesantes de las que llegan las personas sin ningún tipo de discapacidad.

P: ¿Cuál es el balance de estos años?
R: Estamos muy contentos porque hemos ido creciendo. Al principio es muy difícil, y sobre todo cuando trabajas con el colectivo de discapacidad, porque llegar a ellos, lógicamente, porque muchas veces se han sentido engañados, pero scuando están contentos con una cosa son clientes muy fieles. En el 90 por ciento de los casos los que vienen repiten, y en diferentes épocas del año. Cada año creamos experiencias, actividades y rutas nuevas y precisamente por eso siguen viniendo. Estamos formándonos constantemente para crear un producto movible y que pueda ser disfrutable cada vez que vengan.
  

P: ¿Cómo les está afectando la situación sanitaria?
R: La lástima es que la mayor parte de los clientes son de fuera de Castilla-La Mancha. Estamos trabajando con clientes de Sevilla, Bilbao, Galicia, Valencia, Barcelona, Madrid, Cantabria... de casi todo el territorio español y esto nos afecta porque no podemos trabajar con ellos. Sí que trabajamos a nivel de grupos y familia en Castilla-La Mancha, siempre a nivel reducido, porque nosotros ya en una situación habitual trabajamos en grupos reducidos de máximo 10 personas, por lo que eso no nos ha afectado tanto. Pero sí nos ha afectado en las restricciones de movilidad. Nosotros lo que hemos hecho es poner el Alto Tajo y el entorno natural de Castilla-La Mancha en boca de la gente con discapacidad del resto de comunidades españolas que se desplazan aquí para disfrutar de unas vacaciones a su medida.
  

P: ¿Qué ha supuesto su participación en el programa Impulsa Mujer de Diputación?
R: Ha ayudado mucho al desarrollo, se le ha dado un revulsivo importante porque, lógicamente, ellos te proporcionan medios para que lleven a cabo todos tus proyectos. Te ayudan en todo, te hacen crecer mucho como persona y creer mucho en tí, que eso es básico para poder desarrollar cualquier cosa, y tienen un elenco de profesionales importante. Solo tengo palabras de agradecimiento hacia ellos. Al final se ha convertido en una relación personal. Han estado arropando a todas las emprendedoras y animándolas a seguir para adelante. Empatizan mucho. La mayoría de los coaches son emprendedores, por lo que entienden los problemas con los que nos encontramos, y te dan las herramientas para poder solucionarlos”.