El Azuqueca se despide haciendo aguas

13/05/2017 - 20:44 Ana G. Hernández

A pesar de que ni el Azuqueca ni el Quintanar del Rey se jugaban nada, el San Miguel pudo disfrutar de un buen espectáculo, especialmente el equipo visitante que endosó una ‘manita’ a los de Alfaro haciendo un partido serio, con tensión y eficacia (1-5).

La primera mitad comenzó con vendaval rojinegro. En el 9, Néstor la ponía al segundo palo donde Javi Martín, solo, estampaba su remate con el larguero que lo escupía sobre la línea de meta y lo echaba fuera. Al rechazo, Roberto Izquierdo se inventaba una chilena que sacaba con una gran estirada Jiménez. En el saque de esquina, Pancorbo en el segundo palo la cabeceaba muy cerca del palo. En el 11, Rober filtró para que Javi Martín tuviese un uno contra uno con el portero visitante que cayó en favor conquense. Las ocasiones no acabaron y la última la tenía Varo después de un centro de Javi Martín que le dejaba solo en el corazón del área. Pero a su remate rozó en un defensor y se marchó alto.

El Quintanar reaccionó en el 16 con un disparo desde la frontal de Raúl. Y en el 18, era Caín el que castigaba los errores en la definición del cuadro local. El extremo se inventaba una gran jugada por la banda izquierda en la que dejó tumbados a tres defensores y a Gandía. Mediada la primera parte, el línea anuló un gol de Matías por fuera de juega. Y en el 36, un córner acababa en la cepa del palo rojinegro. Dos minutos después, Tomy cometía penalti sobre Caín y Pablo transformaba la pena máxima. El Azuqueca reaccionó pronto: en el 41, Javi Martín aprovechaba una prolongación de Tena en un córner para recortar distancias.

La segunda mitad comenzó con otro tanto. Kin intentó despejar un balón con tan mala fortuna que acabó dentro de la jaula equivocada. El Quintanar se marchaba 1-3 arriba en un partido en el que la defensa azudense demostró estar muy blandita. Tan blandita que Alfaro acabó sustituyendo tanto a Kin como a Tena. Poco después, Brotón lo probaba desde la frontal demostrando que su equipo no se resignaba y que iba a plantar pelea hasta el final. El problema, la facilidad con que el Quintanar le llegaba. Minuto 60: Caín cedió a Matías que anotaba el cuarto.

Tras el tanto, el ánimo local decayó. De hecho, el Quintanar se imponía en todos los balones divididos. Y al Azuqueca le costaba un mundo llegar y, cuando lo hacía, Jiménez desbarataba la opción o la puntería fallaba. Como en el 69, cuando Pancorbo aprovechó un centro de Varo al primer palo y detuvo el portero. O, como en el 75, cuando Javi Martín rozó el poste con su chut. O, en el 78, cuando Varo remató mordido un pase de la muerte de Javi Martín.

En cambio, cada vez que el Quintanar se acercaba, se olía el quinto. Y llegó en el 81 después de que Pablo Rojo diera el balón con la mano dentro del área y de que Pablo volviese a anotar la pena máxima, 1-5.