El Gobierno resta importancia a las indisciplinas militares
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
La vicepresidenta primera y portavoz del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró ayer que los últimos casos de indisciplina en las Fuerzas Armadas son "aislados" y están ya "controlados", al haberse aplicado el régimen disciplinario, al tiempo que destacó la valía profesional de los más de 130.000 militares españoles.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De la Vega afirmó, al ser preguntada sobre si el Gobierno está preocupado por los últimos casos de indisciplina en las Fuerzas Armadas, que éstos son "casos aislados" que ya han sido "controlados"y "conducidos" con arreglo al régimen disciplinario. "Creo que no tiene mayor trascendencia que la del caso concreto, que, repito, es un caso aislado y que, por tanto, está en el lugar en el que tiene que estar", agregó.
La vicepresidenta inició su respuesta insistiendo en que España tiene las mejores Fuerzas Armadas de su historia, integradas por "unos grandes profesionales", "admirados en todos los sitios" y reconocidos a nivel nacional e internacional por su labor en las misiones de paz. "Esa es su misión fundamental: garantizar la paz, la seguridad y la estabilidad de todos", subrayó la vicepresidente, para después insistir en el orgullo que siente por el trabajo de los militares españoles "dentro y fuera de España".
En los últimos cinco días, el Ministerio de Defensa ha tenido que afrontar tres 'episodios' distintos de indisciplina por parte de otros tantos altos mandos del Ejército de Tierra, los generales ya retirados José Mena y Blas Piñar y el comandante militar de La Coruña y Lugo, el coronel Lorenzo Fernández Navarro de los Paños.
El primer 'capítulo' lo protagonizó el ex jefe de la Fuerza Terrestre, el teniente general retirado José Mena, quien presentó un libro en el que, además de criticar duramente al Gobierno, desveló que expuso en octubre de 2005 ante la cúpula del Ejército que el Rey debía intervenir ante la deriva del Estatuto catalán con el apoyo de las Fuerzas Armadas. La revelación de sus propias palabras podría ser constitutiva de delito, toda vez que las deliberaciones en el seno de los Consejos Superiores de los Ejércitos son secretas.
La vicepresidenta inició su respuesta insistiendo en que España tiene las mejores Fuerzas Armadas de su historia, integradas por "unos grandes profesionales", "admirados en todos los sitios" y reconocidos a nivel nacional e internacional por su labor en las misiones de paz. "Esa es su misión fundamental: garantizar la paz, la seguridad y la estabilidad de todos", subrayó la vicepresidente, para después insistir en el orgullo que siente por el trabajo de los militares españoles "dentro y fuera de España".
En los últimos cinco días, el Ministerio de Defensa ha tenido que afrontar tres 'episodios' distintos de indisciplina por parte de otros tantos altos mandos del Ejército de Tierra, los generales ya retirados José Mena y Blas Piñar y el comandante militar de La Coruña y Lugo, el coronel Lorenzo Fernández Navarro de los Paños.
El primer 'capítulo' lo protagonizó el ex jefe de la Fuerza Terrestre, el teniente general retirado José Mena, quien presentó un libro en el que, además de criticar duramente al Gobierno, desveló que expuso en octubre de 2005 ante la cúpula del Ejército que el Rey debía intervenir ante la deriva del Estatuto catalán con el apoyo de las Fuerzas Armadas. La revelación de sus propias palabras podría ser constitutiva de delito, toda vez que las deliberaciones en el seno de los Consejos Superiores de los Ejércitos son secretas.