El histórico polígono industrial de el Balconcillo

05/04/2022 - 08:52 Eduardo Díaz

Historia de una de las zonas más longevas de Guadalajara.

La fecha del 23 de octubre del año 1959 está grabada en oro en la ciudad de Guadalajara. Ese día el Consejo de Ministros aprobaba de manera oficial el nombrar a la ciudad de Guadalajara como núcleo urbano preferente para la descongestión industrial de Madrid. Esta decisión fue definitiva para que el Ministerio de la Vivienda adquiriese dos amplias parcelas en las afueras de la ciudad para la instalación de los polígonos industriales del Henares y del Balconcillo.
  Ante el comienzo de las obras del Polígono Industrial de l Balconcillo, simultáneamente se fueron construyendo en sus cercanías numerosas viviendas en forma de bloques y torres a través de diferentes cooperativas, denominándose Complejo Residencial del Balconcillo.  La denominación de Balconcillo se debió a que donde terminaba la ciudad de Guadalajara en el paseo de las Cruces, existía un enorme mirador desde el que se divisaban las ciudades que llegaban hasta Madrid.
                      
Las primeras empresas del polígono de el balconcillo

Las principales empresas que empezaron a instalarse en el Polígono de el Balconcillo procedían mayoritariamente de la capital de España. La primera de ellas fue la del empresario Paulino Moreno que se dedicaba a la fabricación de molduras para todo tipo de vehículos, llegando a tener más de cuatrocientos trabajadores en el interior de sus amplias naves. Otra de gran importancia fue la fábrica de Lovable, dedicada principalmente a la confección de ropa interior para señoras e igualmente bañadores y los primeros bikinis que se fabricaron en ‘Espanten’. En la calle Méjico se asentó la empresa textil de “Lombrey”, perteneciente al grupo madrileño de confecciones Santa Clara a la que con el paso del tiempo se agregó el empresario local Manuel Pérez García, llegando a tener en las temporadas altas a más de trescientos trabajadores. Desde Barcelona llegó la empresa “Fiseat”, dedicada a la venta y reparación de vehículos de la marca Seat que actualmente sigue existiendo en el mismo lugar.
  Muchas fueron las imprentas que se instalaron en el Polígono del Balconcillo, destacando la empresa “ Cosol” en donde se imprimían las principales revistas nacionales del motor, así como otras revistas y periódicos de tirada nacional. llegando a tener más de doscientos trabajadores. Posteriormente llegaron las gráficas Nueva Alcarria, Minaya y Rotativas Canales que es la única que existe en la actualidad y es donde se imprime el periódico bisemanal “Nueva Alcarria” y el gratuito Noticias de Guadalajara. Los empresarios del sector de panadería fundaron la panificadora “ Ipasa”, donde se fabricaba la mayoría de las barras de pan que luego se distribuían en las numerosas tiendas de la cadena empresarial de Guadalajara. 
  
Circuito de motociclismo

En los primeros años de la década de los 70 del siglo XX, el polígono de el Balconcillo acogió pruebas de motociclismo durante la celebración de las Ferias y Fiestas de Guadalajara ya que su llanura y numerosas curvas lo convirtieron en un atractivo circuito que era elogiado por los pilotos participantes. Con el paso del tiempo se celebraron los campeonatos de España de Velocidad fuera ya del polígono industrial, aunque siguió denominándose “Circuito del Balconcillo” e incluso algunos años las pruebas fueron televisadas en directo por Televisión Española, que era la única que existía en aquella época. Por todo ello el polígono del Balconcillo acogió numerosos talleres de reparación de vehículos e igualmente las oficinas de ventas de vehículos de las marcas Mercedes, Opel, Peugeot, Renault, Kia, Nissan, Skoda, Toyota, Volkswagen y Audi; todas estas marcas permanecen en la actualidad a excepción de Renault que se trasladó al polígono de Cabanillas. 

 La ampliación de la calle batalla de villaviciosa

Ante el aumento de la actividad comercial en las calles de Méjico, Trafalgar, San Quintín y Lepanto, todas ellas pertenecientes al Polígono de el Balconcillo, este polígono se vio ampliado por la calle Batalla de Villaviciosa en la que se instalaron numerosos talleres de reparación de vehículos, tiendas de repuestos de todo tipo de vehículos e incluso la sala de conciertos “ Óxido”, en donde se celebran conciertos principalmente de grupos locales y nacionales. Hay que recordar que esta calle era antiguamente un descampado en el que únicamente estaban instalados los almacenes comerciales de la familia García Romo y la empresa de Áridos de los hermanos Pascual. La llegada de una gasolinera del grupo Repsol dio el empuje definitivo para la llegada de nuevas industrias a esta calle comercial.

La llegada de los grandes supermercados

Ante el cierre de grandes empresas industriales, el polígono de el Balconcillo ha sido el elegido para la implantación de grandes superficies comerciales de las primeras marcas alimenticias. La primera en llegar fue el supermercado “ Gelco” que ocupó las naves  de la antigua “ Lombrey” y que tras tener varios nombres es en la actualidad “ Supeco” con la tienda de “ Aki” en la planta superior. Otra de las grandes marcas que aterrizaron en el Balconcillo, fue la alemana de “Lidl”, con gran aceptación por parte de la ciudadanía por sus ofertas sorpresivas. Muy cerca de este lugar se instaló la marca francesa de “ Día” que está justo en la glorieta de entrada al polígono. A todos estos supermercados se unió la cadena comercial valenciana de “ Mercadona” que ocupa los antiguos talleres y depósitos de camiones de la familia Saboya y que sigue conservando la gasolinera en el inicio de la calle Trafalgar. La última en llegar ha sido la cadena comercial “ Ahorramás” con la inclusión de la gasolinera de la marca “ Plenoi” que han ocupado los antiguos terrenos de la imprenta Cosol y la antigua distribuidora de butano “Diarsa”. Todos estos supermercados han producido un aumento en la circulación de vehículos tanto ligeros como pesados. Por ello el Ayuntamiento de Guadalajara se ha visto obligado a instalar bolardos de plástico para evitar cambios de sentido prohibidos y garantizar la seguridad de los conductores.