El juez ratifica prisión incondicional para los miembros del comando Nafarroa
01/10/2010 - 09:45
Por: Redacción
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ratificó ayer el ingreso en prisión incondicional de los cuatro presuntos integrantes del reconstruido comando Nafarroa detenidos la semana pasada. Además, en su auto de prisión, el juez también ratifica lo que adelantó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que confirmó que durante su estancia en Francia dos de los arrestados mantuvieron un encuentro con el jefe de los comandos de ETA, Garikoitz Aspiazu, alias Txeroki, que les instruyó en el uso de armas y elaboración de explosivos.
En el auto de ayer, de 13 páginas, confirma la decisión de su compañero Pedraz al ratificar la situación de prisión incondicional comunicada y sin fianza para los cuatro. Aunque la parte más jugosa de la resolución es la que se refiere al ya conocido encuentro de dos de los detenidos, presunto líder del comando, Aurken Sola, y su lugarteniente, Xabier Rey, en Francia con Txeroki en el que el jefe de los comandos de ETA les habría revelado que él fue uno de los autores materiales del asesinato de los dos guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero en la localidad francesa de Capbreton el 1 de diciembre de 2007.
El juez señala que los dos detenidos viajaron a Francia entre el 15 y el 20 de octubre y Durante esta mantuvieron contactos con tres miembros liberados de la organización terrorista ETA, siendo uno de ellos Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki, jefe de los comandos, quienes les entrenaron en el uso de armas y elaboración y colocación de explosivos, entregándoles los efectos de esa naturaleza.
El juez se basa, no ya solo en los testimonios de los etarras, sino en los seguimientos policiales que controlaron a Sola y Rey desde su salida de Pamplona hasta su llegada a Hendaya (Francia), pasadas las 17.00 horas del día 15. Fue en esa localidad francesa se encontraba la Avenida Lissardy donde se produjo la reunión con Txeroki, concretamente en un domicilio de esta calle --situado en el interior de una urbanización-- que era propiedad de la tía de Araitz Amatria, compañera sentimental de Rey y también presunta miembro del comando detenida en Valencia.
En cuanto al papel de Amatria, detenida en Valencia, Grande-Marlaska dice que es una experta en temas informáticos, no en vano trabaja diseñando páginas web un dato muy relevante ya que las tradicionales formas de comunicación entre los integrantes de la banda se están llevando a cabo utilizando nuevos canales de información que reúnan una mayor seguridad, para lo que es fundamental contar con personas con la pericia necesaria. Respecto al cuarto presunto integrante del comando, Sergio Boada, detenido también en Pamplona el pasado martes, el auto recoge una reunión a la que acudió junto a Rey y Amatria de claro contenido orgánico entre los tres.
Integrantes y colaboradores
Teniendo en cuenta estos datos, Grande-Marlaska considera que la actuación de Rey y Sola podría ser constitutiva de un delito de integración en banda terrorista, un delito de tenencia y depósito de armas, otro delito de tenencia y depósito de explosivos y un delito de conspiración para la comisión de atentados. Por su parte, en cuanto a Boada y Amatria dice que colaboraron con el comando por lo que su participación podría suponer un delito bien de integración en organización terrorista, bien de colaboración terrorista.
En cuanto a los registros practicados tras las detenciones, el juez señala en su auto que el comando tenía a su disposición un camarote, situado en la calle Tomás Burgui, número 9 de Pamplona, dónde se incautó material que iba a ser utilizado en la comisión de delitos de naturaleza terrorista. Grande-Marlaska se refiere a dos revólveres y munición, varios temporizadores, pentrita, cordón detonante, polvo de aluminio, nitrato amónico, una sustancia que podría ser nitrometano, sistemas lapa y abundante material informático.
Además señala que en el domicilio habitual de Aurken Sola, entre otros efectos, se ha incautado detonadores, así como material informático, memorias USB, entregada por los miembros liberados de la organización terrorista ETA, y donde entre otras informaciones, constaba aquélla relativa a concretos objetivos. También tenía a su disposición y para el almacenamiento de distintos materiales un Zulo en la localidad de Etxauri (Navarra), compuesto por dos neveras tipo playa, enterradas.
El juez señala que los dos detenidos viajaron a Francia entre el 15 y el 20 de octubre y Durante esta mantuvieron contactos con tres miembros liberados de la organización terrorista ETA, siendo uno de ellos Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki, jefe de los comandos, quienes les entrenaron en el uso de armas y elaboración y colocación de explosivos, entregándoles los efectos de esa naturaleza.
El juez se basa, no ya solo en los testimonios de los etarras, sino en los seguimientos policiales que controlaron a Sola y Rey desde su salida de Pamplona hasta su llegada a Hendaya (Francia), pasadas las 17.00 horas del día 15. Fue en esa localidad francesa se encontraba la Avenida Lissardy donde se produjo la reunión con Txeroki, concretamente en un domicilio de esta calle --situado en el interior de una urbanización-- que era propiedad de la tía de Araitz Amatria, compañera sentimental de Rey y también presunta miembro del comando detenida en Valencia.
En cuanto al papel de Amatria, detenida en Valencia, Grande-Marlaska dice que es una experta en temas informáticos, no en vano trabaja diseñando páginas web un dato muy relevante ya que las tradicionales formas de comunicación entre los integrantes de la banda se están llevando a cabo utilizando nuevos canales de información que reúnan una mayor seguridad, para lo que es fundamental contar con personas con la pericia necesaria. Respecto al cuarto presunto integrante del comando, Sergio Boada, detenido también en Pamplona el pasado martes, el auto recoge una reunión a la que acudió junto a Rey y Amatria de claro contenido orgánico entre los tres.
Integrantes y colaboradores
Teniendo en cuenta estos datos, Grande-Marlaska considera que la actuación de Rey y Sola podría ser constitutiva de un delito de integración en banda terrorista, un delito de tenencia y depósito de armas, otro delito de tenencia y depósito de explosivos y un delito de conspiración para la comisión de atentados. Por su parte, en cuanto a Boada y Amatria dice que colaboraron con el comando por lo que su participación podría suponer un delito bien de integración en organización terrorista, bien de colaboración terrorista.
En cuanto a los registros practicados tras las detenciones, el juez señala en su auto que el comando tenía a su disposición un camarote, situado en la calle Tomás Burgui, número 9 de Pamplona, dónde se incautó material que iba a ser utilizado en la comisión de delitos de naturaleza terrorista. Grande-Marlaska se refiere a dos revólveres y munición, varios temporizadores, pentrita, cordón detonante, polvo de aluminio, nitrato amónico, una sustancia que podría ser nitrometano, sistemas lapa y abundante material informático.
Además señala que en el domicilio habitual de Aurken Sola, entre otros efectos, se ha incautado detonadores, así como material informático, memorias USB, entregada por los miembros liberados de la organización terrorista ETA, y donde entre otras informaciones, constaba aquélla relativa a concretos objetivos. También tenía a su disposición y para el almacenamiento de distintos materiales un Zulo en la localidad de Etxauri (Navarra), compuesto por dos neveras tipo playa, enterradas.