El juicio por el triple crimen de Chiloeches entra en su fase decisiva
El juicio con jurado popular por el triple crimen de Chiloeches afronta desde este lunes su recta final después de que la presidenta del Tribunal, María Elena Mayor, diera por concluida la práctica de la prueba y los informes finales de las partes. En la sesión, la magistrada ofreció a los tres acusados su derecho a la última palabra, un trámite que únicamente decidió utilizar D.M.A.
Mayor confirmó que este martes hará entrega al jurado del objeto del veredicto, momento a partir del cual quedarán aislados para iniciar la deliberación a puerta cerrada. Tras recordarles personalmente que la ley les reconoce ese derecho, tanto F.P.S., autor confeso de las tres muertes, como C.B.M., acusado de colaborar en el robo previo al crimen, renunciaron a intervenir. “No tengo nada que añadir, gracias”, expresó el principal acusado. C.B.M. se limitó también a declinar.
En cambio, D.M.A., para quien la Fiscalía solicita tres años y medio de prisión como cómplice del robo y cuya defensa sostiene que no participó en la planificación, pidió dirigirse al jurado. “Solo quiero decir que lo siento mucho. Estuve en el sitio equivocado con la persona equivocada y, a partir de ese día, intenté hacer lo mejor que pude”, afirmó visiblemente emocionado.
Escuchadas las tres intervenciones, la magistrada dio por finalizada la sesión y convocó a las partes a las 10.00 horas de este martes. Tras las correcciones pertinentes, el objeto del veredicto será entregado al jurado a las 12.00 horas para iniciar su aislamiento. De este modo, el procedimiento queda listo para una deliberación que pondrá fin a seis jornadas de vista oral en la Audiencia Provincial de Guadalajara.
Conclusiones de las partes
La sesión había comenzado con la presentación de las conclusiones definitivas. La Fiscalía mantuvo su solicitud de prisión permanente revisable para F.P.S. por uno de los asesinatos y 40 años más por los otros dos, al considerar que fueron ejecutados con alevosía y de forma “sorpresiva”. Para C.B.M. mantuvo su petición de cinco años de prisión como colaborador necesario en el robo con violencia, mientras que para D.M.A. rebajó su papel a cómplice, con una pena solicitada de tres años y seis meses.
La acusación particular defendió que existió un plan conjunto y solicitó que C.B.M. y D.M.A. sean condenados como cooperadores necesarios, no como simples cómplices, manteniendo para F.P.S. la petición de prisión permanente revisable y 40 años adicionales.
Las defensas reiteraron sus posiciones. La de F.P.S. solicitó que se le condene por un homicidio y dos asesinatos, alegando que en el caso de A.E.V. hubo un enfrentamiento directo y que el acusado había consumido drogas. La defensa de C.B.M. incidió en la discapacidad intelectual límite de su cliente y sostuvo que no participó en la planificación ni mencionó las joyas o dinero que hubiera en la vivienda. Por su parte, la defensa de D.M.A. subrayó que este se desmarcó del plan, colaboró desde el primer momento con la Guardia Civil y pasó ocho meses en prisión preventiva pese a su papel “secundario”.