El Lujisa Guadalajara se queda a las puertas de vencer en Tenerife (90-87)
Kristof Horvath se estrenó con derrota en las filas de los de Román Peinado.
El Guadalajara no pudo sumar en su visita a Tenerife en un encuentro que se presentaba incierto para el Lujisa desde la previa debido a las numerosas bajas con las que se presentaba el conjunto entrenado por Román Peinado. Kristof Horvath se estrenó con derrota en un choque en el que el Lujisa Guadalajara se quedó cerca de llevarse un resultado positivo.
Comenzó la contienda muy igualada desde los compases iniciales, con más peso en el juego de los atacantes que de los defensores. El Náutico Tenerife solo pudo obtener un punto de ventaja al término del primer cuarto (25-24), algo que se prolongaría en el marcador prácticamente durante el resto del encuentro.
Los tinerfeños se despegaron ligeramente en el luminoso en el segundo cuarto, con una renta de cinco puntos (39-34), lo que obligó a Román Peinado a llamar a filas a los suyos con un tiempo muerto para corregir ciertos aspectos del juego alcarreño.
Luis Valera y Kristof Horvath eran los faros ofensivos, aunque pese a su inspiración de cara a canasta, el Náutico Tenerife dejó el marcador favorable al descanso para los anfitrioenes (45-38).
Insuficiente acierto morado
El mejor momento de juego del Lujisa Guadalajara hizo acto de presencia en el tercer periodo, con el recién aterrizado Horvath probando y acertando desde la línea de tres (cuatro de nueve de acierto en triples). No obstante, los tinerfeños no se dejaban doblegar y cerraban el tercer cuarto con un 67-60 que dificultaba mucho las cosas para el Lujisa en el asalto final.ç
Además, los canarios salieron más fuertes a la cancha en el arranque del último cuarto, de tal forma que a los cuatro minutos de juego ya vencían por un solvente 82-69. El Guadalajara, por su parte, lo intentaría hasta el bocinazo final y asustó al Naútico Tenerife con un parcial de 0-9 tras un triple de Valera y canastas de Guillermo y Riki.
Sin embargo, el tiempo muerto solicitado por el entrenador local permitió que los tinerfeños amarrasen su renta pese al arreón final de un Lujisa que se volvió de vacío pese a un gran esfuerzo.