El Orfeón Joaquín Turina interpreta un solemne concierto de fin de año en la iglesia de Yebes
30/12/2012 - 23:40
A los sones del Jesús Bleibet Meine Freude de Johann Sebastian Bach, el Orfeón Joaquín Turina de Guadalajara iniciaba el concierto de Nochevieja que ofreció ayer en Yebes y que organizaba la Escuela Municipal de Música dentro del programa de actos preparado para la ocasión por el Ayuntamiento de Yebes. Tras esta vibrante pieza del compositor alemán, tomaba el relevo el Ave María de Giulio Caccini, que entusiasmó al público que llenaba la iglesia parroquial de San Bartolomé. El impresionable retablo barroco de doce metros de altura de este templo de estilo renacentista, erigido en su mayor parte en la segunda mitad del siglo XVI, sirvió de marco incomparable para la actuación de esta sociedad coral fundada por Sergio Cano en 2009, que puso el colofón al repertorio religioso con la interpretación del Lascia chio pianga, de G. F. Handel.
La segunda parte del programa estuvo dedicada en su totalidad a la música tradicional navideña. El Orfeón Joaquín Turina desgranó una amplia selección de villancicos, algunos tan populares como Ay del Chiquirritín, Blanca Navidad o Adeste fideles, y otros que sorprendieron por su diversidad vocal, como Oh Holy night, el popular Pat-A-Pan, Jingle Bell Rock o el Campanas de la Mezquita de Ramón Medina. Con el público puesto en pie y totalmente entregado, este magnífico coro de voces de Guadalajara cerró el concierto con el más clásico de los villancicos, un Noche de Paz que sonó en toda su plenitud. Una orquesta de salón de dos violines, un violonchelo y una flauta travesera, acompañada por el piano, sirvió de acompañamiento instrumental en varios temas.
A la conclusión, la Concejalía de Cultura felicitó al orfeón por ofrecer una actuación sonora y emocionante en la iglesia parroquial de Yebes. José Antonio Real agradeció a Antonio Gómez, que se estrenaba como codirector, el entusiasmo demostrado por el orfeón durante todo el concierto. El edil yebero se mostró enormemente satisfecho de la respuesta de los vecinos, que completaron el aforo y respondieron con sus aplausos a una actuación inolvidable y emotiva para el pueblo de Yebes a cargo de la que es, sin duda, una de las mejores agrupaciones corales de Castilla-La Mancha.
Con el estreno el pasado 24 de noviembre del concierto de Réquiem en Re Menor de W. A. Mozart en la iglesia del Carmen de Guadalajara, el Orfeón Joaquín Turina culminaba un proyecto iniciado hace más de tres años. Un total de 56 voces integran en la actualidad esta sociedad coral, que nació gracias al impulso y dedicación de un pequeño grupo de profesionales de diferentes escuelas de música de Guadalajara. A lo largo de esta breve e intensa andadura, ha ofrecido a su público un amplio repertorio de obras maestras del barroco, piezas populares y temas tradicionales, a solas o con acompañamiento orquestal.
Un mes después de aquel acontecimiento social y musical, ayer reaparecía en público con este concierto en Yebes. Constituido como asociación cultural de Castilla-La Mancha, el Orfeón Joaquín Turina de Guadalajara tiene como objetivo fomentar la música coral, desde la Edad Media y el Renacimiento hasta nuestros días, sin olvidar el rico patrimonio musical español. Entre otros escenarios, ha actuado en el Colegio San José de la capital, el Centro Superior de Estudios de la Defensa, el Patio de la Biblioteca Pública del Estado ubicada en el Palacio de Dávalos, la iglesia de Santiago Apóstol de Guadalajara o el Pósito de Sigüenza.