El Quabit del cambio abre este sábado el nuevo curso

06/09/2019 - 17:49 Alberto Moreno Pérez

Llega la hora de la verdad. Las jornadas de intensas pesas, de esfuerzo físico y sobre todo de mucha carga de trabajo durante la pretemporada echan el cierre y dan paso a la competición oficial, a una nueva  edición de la Liga Asobal.

Con un Barça de nuevo favorito para ganar el título, el interés estará, como es habitual en los últimos años, en comprobar cuáles serán los equipos que se peleen por alcanzar la zona noble y qué otros lucharán por evitar el descenso.

Para el Quabit Guadalajara será su décima campaña consecutiva en la máxima categoría. El equipo se ha renovado notablemente con el cambio de entrenador (Mariano Ortega ocupa el puesto de César Montes) y la llegada de hasta siete jugadores. Es el cambio de ciclo para la entidad morada. Un cambio para el que no obstante, los objetivos se mantienen. “Lucharemos por estar entre los ocho primeros”, sentencia de forma contundente el míster Mariano Ortega que recalca que “desde el club somos conscientes de que el objetivo es muy ambicioso y será al final de la primera vuelta cuando nos pongamos los retos definitivos”.
    
El BM Logroño
El cuadro riojano, tercer clasificado en la pasada temporada y que parte en este curso con la intención clara de repetir presencia en Copa EHF, será el primer rival de los morados. La cita llega mañana sábado, a las 19.00 horas. Será una primera jornada, llena de incertidumbres. “Ningún equipo está al cien por cien; las primeras jornadas de liga sirven para que todos lleguemos a un buen nivel competitivo”, dice Ortega y analiza al rival destacando que “Logroño siempre ha estado en las primeras posiciones de la liga y es uno de los mejores de la liga española. Sumar en Logroño sería muy positivo, aunque está claro que es complicado”.

Salvo imprevistos de última hora el equipo estará al completo para el primer partido liguero. Será, además, el estreno de la capitanía morada para Chema Márquez. El jugador madrileño se ha hecho con los galones y con solo 22 años será el encargado de tirar de un vestuario muy joven. “El vestuario tampoco necesita que se tire mucho de él y aunque yo asuma el rol de capitán, que lo hago con mucha ilusión, hay otros grandes nombres en el equipo y sé que me lo van a poner fácil”, explica un Márquez que también estrenará posición, ya que este año desarrollará su juego como central: “Es algo que tenía que hacer si quería progresar en mi carrera; ya jugué en esa posición algunas veces el año pasado. Ahora es el momento de cambiar; toca hacer que jueguen mis compañeros y sin olvidar también el aspecto goleador”.

De igual forma, Chema Márquez, habla de los objetivos del equipo en una temporada incierta y destaca que “había que encajar muchas cosas y estamos dando pasos hacia arriba. Lo primero es afianzar la permanencia, preferiblemente en la primera vuelta y luego mirar hacia arriba, pensando en quedar entre los ocho primeros. Tenemos un equipo con mucho potencial, aunque todavía está por ver si seremos capaces de sacarle el rendimiento deseado”.