El Ungría, ¿paisaje natural?

21/10/2017 - 13:38 Luis Monje Ciruelo

García Marquina es el cantor del Ungría con su libro 'Nacimiento y Mocedad del río Ungría'. 

En cada salida al campo descubro algo nuevo. Por ejemplo, la frondosidad del valle del arroyo Ungría que ya conocía en su curso desde el Borbotón, de Fuentes, donde nace, hasta su unión con el Matayeguas debajo de Horche. Antes de seguir, es justo recordar que García Marquina es el cantor del Ungría con su libro Nacimiento y Mocedad del río Ungría, premio de la Diputación. Pero yo no había visto hasta ahora la amenidad del entorno del Borbotón, hoy ya no a la vista del curioso, por una construcción cerrada con llave, pero enriquecido el lugar por frondosos árboles de vega, álamos, nogales, zarzamoras, etc. que han crecido y enreciado hasta poder clasificar a  alguno de ellos como árbol singular, lo que justifica la propuesta de la  cátedra de Medio Ambiente de la Universidad de Alcalá de que el valle del Ungría sea designado “paisaje natural”. El lugar, en la hondura de un valle rodeado de altos cerros de pronunciada pendiente, seguramente disfruta de un microclima que se prestará a científicas experiencias. En realidad, ese hondón es el final (o el comienzo), según el punto de vista, de la larga barranquera que crea las ondulaciones de la carretera de Torija a Brihuega  y que todos conocemos por las “Alcantarillas de Fuentes” en las que  la guerrilla de El Empecinado infligió sonadas derrotas a las tropas napoleónicas La barranquera continúa ahondándose hasta chocar con el cerro de figura de buque boca abajo sobre el que se asienta el pueblo, al que rodea y ciñe, dándole así impresión de más altura. Al Ungría y valle de nacimiento le he dedicado un poema al que pertenecen  estos versos:  Naces de un pueblo en alto/ un pueblo en que durmió un rey/ entre uno y otro asalto  / . Hace ya justo tres siglos, cuando el archiduque Carlos/ disputó a Felipe Quinto en choques encarnizados/quién de los dos ocupara/el trono del Hechizado/ Y allí se te incorpora/ algún pequeño caudal que riega huertos, florestas/ y viene de Valdesaz./ y aunque llegas a Caspueñas/ con bastante más caudal, en un paisaje de ensueño/ ya no mueves ni un molar/ ni criarás ya más truchas/ porque de moda no están/ Se te junta el Matayeguas/tras Lupiana éste pasar/ y reforzais al Tajuña/ en su camino hacia el mar/:Ya sois todos río Tajo/ para juntos acabar.