Esta pasando en Guadalajara: Estafa tecnológica a mayores

El nombre de Gabino Cogollo resultará familiar a muchas personas de la provincia. Durante años ha sido representante del PP en distintas instituciones y ahora rescata su vocación de servicio púiblico para advertir a la población de una estafa de la que él mismo ha sido víctima. 

Según explica, durante la mañana del pasado 13 de Septiembre, semana de las ferias de Guadalajara, se contraba conectado a internet desde su portatil cuando recibio "una llamada telefónica de un señor que dice llamarse Peter Smith, indicando que lo hace en nombre de Microsoft. Han detectado en mi ordenador toda una serie de anomalías, de archivos maliciosos… De inmediato, aparecen en la pantalla toda una relación incalculable de ellos. Me pide que lea en la parte superior de la pantalla el número de estos archivos que creo recordar eran muchísimos".

El tal Smith le dijo que se encargaría de limpiar el ordenador en nombre de Microsoft. "Me aseguró que este trabajo de limpieza no tenía coste alguno, tan solo que se ingresarán cinco euros como verificación y control del trabajo".

Convencido con sus argumentos, Cogollo le proporciono el número de cuenta de su tarjeta bancaria para el abono de esa cantidad de cinco euros y rellenó los datos que se le pidieron en un formulario: Nombre, dirección, teléfono y DNI. "Lo mismo que hago cuando saco un billete de tren, avión..."

Acto seguido le llamaron para que siguiera el proceso de limpieza en la pantalla. "Es a partir de este momento, creo yo, cuando comienza la estafa, sin posibilidad alguna de detenerla"; ya que aunque las alertas saltaron en su entidad bancaria en forma de “intentos de acceder a mi cuenta”, a las 12,52, 12,53 y otros muchos, "los SMS no llegaban a mi teléfono, posiblemente al tenerlo intervenido los defraudadores".

Además, debido a las fiestas de la ciudad, las oficinas bancarias tenían horario reducido, lo que impidió que su oficina "pudiera intervenir para detener la estafa, ya que son conocedores de que nunca realizamos transferencia alguna desde nuestra cuenta y mucho menos comprar esos artículos que se especifican, que sigo sin saber lo que son, como MoonPay 9796, aunque he mirado en Internet y hace referencia a la compra de criptomonedas".

Al final, los estafadores generaron nuevas claves de las cuentas para poder acceder al dinero. 

Fue al recibir dos SMS de la entidad bancaria a las 15,38 horas con la indicación: “No compartas NUNCA este SMS... con su número para operación en moonpay.io – Importe: 500 EUR y tarjera termina en xxxx” cuando se dieron cuenta de lo que estaba ocurriendo, llamando de inmediato para anular la tarjeta. 

"En días posteriores, 14 y 15 de septiembre, han intentando continuar con la estafa lamentando lo ocurrido y asegurando que Microsoft nada tiene que ver en esto, estando dispuesto a devolver lo sutraido de mi cuenta". De hecho, al acusarle de ser un defraudador "amenazó con entrar en el ordenador, aspecto que ya cuidamos llevando el portatil a un informático de confianza para su análisis y seguridad".

Cogollo agradece el trato recibido por el personal de su oficina bancaria, pero lamenta la perdida de fondos a través de cuatro cargos no autorizados: "Una transferencia de 1.000 euros a un señor, a través de BNP Paribas Bank Polska, SA, en concepto de Medicina y otras tres de 500, 199 y 199 euros de venta MoonPay". En total, casi 3.000 euros. 

Se trata de fondos que da por perdidos "aunque jure que todas esas operaciones de pago nunca tuvieron mi autorización, que se realizaron de manera fraudulenta y con engaño y que si tuvieron éxito para los defraudadores fue por la sencilla razón de no bloquear una cuenta con cuatro intentos de acceder a ella y darse, por otro lado, la faltal coincidencia de que nuestra Oficina disfrutaba de su jornada reducida por fiestas, por lo que no pudieron ponerse en contracto co ellos (..) Todo es achacable al pobre jubilado por dejarse engañar con soluciones fáciles al arreglo de su portatil".

En este sentido, destaca lo que considera un fallo de seguridad, "ya que a pesar de tener constancia de los cuatro o cinco intentos fallidos de acceder a una cuenta no la bloquean y se ponen en contacto con el cliente, mediante otros medios como puede ser el segundo teléfono del que disponen (...) La alerta debe ser contínua. Estos defraudadores tienen unos poderosísimos medios para llevar a cabo sus estafas”.