Exposición de Enrique Delgado en el Museo Francisco Sobrino

La mejor explicación del sentido de la exposición de Enrique Delgado es la que redacta Gema García Vizcaíno, docente y Asesora Técnica de Cultura de la JCCM, en el texto del catálogo oficial de la nuestra: “En esta exposición hay obras que responden más a una abstracción geométrica ortogonal. Colores y formas combinadas en estructuras con rigurosas líneas horizontales, verticales o inclinadas, rigurosamente estructuradas en distintas posiciones geométricas de apariencia muy racional. Obras para la reflexión y la concentración, que sin intención teórica, también nos transmiten emociones”.

Enrique Delgado es maestro de profesión y fotógrafo por afición. pasión y pulsión creativa ineludible. Compró su primera cámara, una Kodak que costaba 300 pesetas, a los 14 años con los ahorros de la paga para los recreativos y desde entonces no ha cesado de fotografiar el entorno. El nacimiento de la tecnología digital no ha modificado su visión analógica para comprender y medir la naturaleza de las cosas con “el disparo” único para conseguir LA FOTO, la única posible en ese instante.

Para configurar la muestra del Museo Francisco Sobrino, Enrique Delgado ha seleccionado aquellas fotografías cuya sobriedad de líneas busca el ideal de belleza en la percepción de las figuras geométricas, una búsqueda intuitiva del número phi o proporción áurea. Ha titulado la muestra “SOBRI O” una forma conceptual y con toque humorístico de acercarse a la creación de su admirado Francisco SOBRINO, el cual logró fraguar en su crisol la “piedra filosofal” con la que convertir en bello todo aquello que concebía y surgía a su alrededor. Enrique, con humildad y visión poética también convierte en bello todo lo que concibe. Laura Domínguez, comisaria de la exposición, define así el proceso creativo “Enrique cierra tanto el campo de visión, que los lugares representados en sus imágenes son irreconocibles, con una lógica interna que responde a la frialdad de las líneas y consigue el calor de la emoción”.

Remata Gema García Vizcaíno su texto del catálogo con un párrafo esperanzador que anima a visitar la muestra: “Después de ver la obra de Enrique Delgado en esta exposición, compartimos el espíritu de históricos artistas geométricos como Víctor Vasarely, Cesar Domela, Yacoov Agam, entre otros, cuando expusieron su obra en 1946, en el primer salón des Réalités Nouvelle en París, que plantearon la Geometría como promesa de un futuro ordenado y clarificador.”

Pedro José Pradillo Esteban y Laura García Martín-Gil coordinan la muestra de Enrique Delgado desde su exquisita gestión del espacio y su reconocimiento al legado del Maestro Sobrino, proporcionando a Guadalajara experiencias artísticas de calidad desde lo que fue un Matadero Municipal a finales del siglo XIX y que desde marzo de 2015 es un “matadero renacido”, un Museo de Arte Cinético que divulga la figura y obra de Francisco Sobrino y es referencia para el arte contemporáneo mundial.