Quabit anima a sus accionistas a participar en la ampliación de capital

14/04/2016 - 12:36 D.P.P.

“Durante todos estos años hemos trabajado muy intensamente para asegurar la viabilidad de la compañía y 2015 ha sido determinante para nuestro futuro”, señala Félix Abánades, durante la Junta General de Accionistas.

Quabit inmobiliaria celebró ayer su Junta General de Accionistas en Madrid. En ella se abordaron asuntos vitales para la compañía, como la realización de un Contrasplit, en la proporción de una acción nueva por cada 50 antiguas. Esto supondrá elevar el valor nominal de la acción de 0,01 euros a 0,50 euros. Además, por primera vez en la historia de la compañía, está previsto el reparto y entrega de acciones liberadas a los accionistas mediante la realización de una ampliación de capital con cargo a reservas. Por otro lado, se propuso la realización de una nueva ampliación con derecho de suscripción preferente y por importe nominal máximo de 10 millones.
    El presente de Quabit, Félix Abánades, señaló durante su intervención que el presente de la compañía pasa por continuar dando cumplimiento a los objetivos detallados en el Plan de Negocio 2015-2020. De hecho, durante los próximos cinco años está prevista la entrega de más de 3.000 viviendas (con una facturación de más de 950 millones), y realizar inversiones en suelos urbanos con alto potencial de demanda.
    De forma inmediata, este año pondrán en el mercado más de 470 viviendas, lo que supone cumplir en un 65 por ciento el objetivo de promoción sobre suelo propio finalista detallado en el Plan Estratégico. En el Salón Inmobiliario que se celebrará en Madrid en mayo, comenzarán con las ventas de más de 300 viviendas.
    Para terminar, invitó a los presentes a participar en la próxima ampliación de capital. “Confiamos en seguir contando con su apoyo y con su participación activa en los nuevos proyectos de Quabit, precisamente ahora que el sector inmobiliario vuelve a ser una gran oportunidad de inversión”.
    En la junta también se dio cuenta de los resultados de la compañía, que Abánades tachó de “muy positivos” al haber logrado un beneficio neto de 21,7 millones. “En ello han tenido mucho que ver el impacto positivo de las quitas de deuda asociadas a su cancelación parcial (54,1 millones de euros); y, en menor medida, la activación parcial de créditos fiscales (5,2 millones de euros)”. Además, tras los acuerdos de reestructuración alcanzados con las entidades financieras, está previsto para los próximos años un descuento de 53 millones sobre la deuda.
    Asimismo, a cierre de 2015 estaba pendiente la activación de créditos fiscales por importe de 183 millones de euros, lo que supone un importante activo y una gran fortaleza para la compañía.
    La suma de todos estos activos “permitirá” a la Quabit generar resultados positivos en próximos años, señaló Abánades. Pero destacó que, “tanto por la generación de facturación como la obtención de resultado operativo, se irá produciendo gradualmente conforme vayan avanzando los proyectos residenciales cuyo periodo de maduración medio es de 24 a 36 meses”.
    Además, Quabit cerró 2015 con una estructura financiera “consolidada” y una situación patrimonial “saneada”. Lo más significativo, por un lado, fue la reducción de la deuda en un 31,2 por ciento, hasta situarla en 234 millones a 31 de diciembre. Con la materialización de los acuerdos de cancelación firmados, esta cantidad se reducirá aplicando las quitas y las entrega de activos previstas, hasta ajustar la deuda en 118 millones, de los que el 80 por ciento tiene vencimiento a partir de 2019. Paralelamente, el patrimonio neto se ha incrementado en 68,5 millones hasta situarse en casi 106 millones por el efecto positivo del beneficio neto y gracias también a las ampliaciones de capital realizadas.
    “Durante todos estos años hemos trabajado muy intensamente para asegurar la viabilidad de la compañía y 2015 ha sido determinante para nuestro futuro”, señaló el presidente, quien destacó tres hitos “determinantes”. El primero, el acuerdo con Sareb para la refinanciación de la deuda. El segundo, la cancelación de deuda mediante la dación de pago en activos.  Y por último, la culminación en diciembre de la ampliación de capital en su importe máximo.

Confianza en la economía
Félix Abánades, aseguró durante su intervención que el 2015 ha sido el año de la recuperación económica. “Hemos vuelto a registrar ritmos de crecimiento de la actividad y del empleo por encima del 3 por ciento, al tiempo que las condiciones financieras se normalizaban y aumentaba la inversión exterior. Además, este crecimiento se ha producido en un entorno de mínimos de inflación y de superávit en la balanza de pagos”.
    El presidente de Quabit confió que en 2016 “se apoye la actividad y el empleo también durante este ejercicio”. Por lo menos durante un par de años se continuará, a su juicio, con este ciclo expansivo, “aunque se frenará el ritmo adquirido en los últimos trimestres”.
    Pese a todo, Félix Abánades recalcó que los “riesgos” se han agravado los últimos meses. “Hoy se cumplen 116 días sin Gobierno”. Esto a llevado a que se perciban “síntomas de un flaqueo de la demanda y una clara retracción de la inversión extranjera”. Por ello, instó a que se trabaje por la estabilidad del país y por un entorno de “certidumbre, seguridad jurídica y atractivo para la inversión”, por el impacto directo que ello tiene en la creación de empleo y en el crecimiento económico.
    También detectó riesgos externos, como las tensiones en los mercados financieros internacionales o la “fragilidad” de algunos mercados emergentes.
    En cuanto al déficit, –un 5 por ciento del PIB, unos 10.000 millones más que el objetivo del 4,2 por ciento “apalabrado” con la Comisión Europea–, lo consideró “mareante”.
    
Mensaje de optimismo
Pese a todas las dificultades que apuntó, se presentó Abánades  con un mensaje de optimismo. “En sólo tres años pasamos de ser un lastre para Europa a ser considerados un ejemplo de recuperación”. Y añadió que confía en que que el sector inmobiliario se mantenga en la senda del crecimiento sostenido. “Por primera vez desde 2006, el mercado de la vivienda y todo lo que la rodea hizo pleno de estadísticas positivas en 2015. De este modo, se ha confirmado el despegue de nuestro sector tras el punto de inflexión en 2014 y seis años de aguda crisis”.