Ferretería Alique, una amplia oferta de productos y el mejor asesoramiento

03/08/2021 - 09:22 E. Hatamoto

Dando el callo. Así se pasaron los meses del confinamiento desde la Ferretería Alique en Mondéjar. Este establecimiento de origen familiar, de tercera generación, puede presumir de llevar más de 50 años ofreciendo el mejor servicio de la mano de grandes profesionales.

El que hoy habla y rememora toda la historia es Santiago Alique Jiménez, nieto del fundador del negocio, que hoy cuenta no sólo con el establecimiento de Mondéjar sino con otro también en la localidad de Pioz. 
Su plantilla, conformada por poco más de una decena de trabajadores, tuvo que emplearse a fondo durante los meses de confinamiento para poder atender la creciente demanda de productos y servicios. “La gente, al no poder salir, se ha dedicado a arreglar las viviendas, a acomodarlas más”, explica Alique, reconociendo que “nos ha venido bastante bien”, ya que esto se tradujo en un considerable incremento de las ventas, durante esos meses de encierro; que pudo llegar en torno a “un 20 por ciento más”. “Pasamos de estar preocupados al principio por cómo íbamos a trabajar y luego fue un boom”, asegura el ferretero. Afirma que el confinamiento al sector “le ha venido bien” y mucha gente que salió de las ciudades se dedicó a buscar el bienestar en sus casas de pueblo. Pero, si han podido hacerlo, también ha sido gracias a la amplia gama de productos con que cuentan en cualquiera de sus dos establecimientos. “Tocamos mil cosas, al ser una ferretería convencional, de una zona rural”, explica su gerente. De esta forma, dan respuesta a la elevada demanda que hay por la zona. 

Así, los vecinos de Mondéjar pueden encontrar en la ferretería Alique electrodomésticos como lavadoras, pequeña maquinaria agrícola, de jardín e incluso instalación de muebles de cocina. 
Lo mejor, que forma parte “del comercio de proximidad”, fundamental para facilitar el día a día de sus gentes, evitando desplazamientos innecesarios y la consiguiente pérdida de tiempo. Esto se traduce en una pequeña contribución también al desarrollo de la vida rural en los pueblos y su entorno.  “En nuestro caso, Internet no nos beneficia”, reconoce el ferretero puntualizando que “es cierto que hay mucha venta online pero en esto se necesita una formación, un asesoramiento”. 
Alique señala la diferencia existente entre una ferretería del mundo rural y una urbana. “Posiblemente en una ciudad esté más especializada pero no tenga tanto surtido como tenemos en el medio rural”, valora. De ahí el centenar de clientes que cada día puede llegar a pasar por cada una de las dos ferreterías, tanto en Mondéjar como en Pioz. 

La profesionalidad que caracteriza a su plantilla ha hecho que cada vez sea mayor el número de clientes que acuden a sus locales; incrementando así el radio de cobertura desde ambos establecimientos hasta unos 30 kilómetros a la redonda, donde atienden a una mayoría de pequeños pueblitos pero con mucha clientela de Madrid. “Muchos son de segunda residencia”, destaca Alique, añadiendo que también prestan servicio a “la industria que tenemos en esta comarca”.
    
Ampliación de local
Fruto de este esfuerzo por ofrecer siempre al cliente la mejor opción a sus necesidades y su consecuente aumento de trabajo les ha llevado a realizar unas obras de ampliación tanto en Mondéjar -con un local contiguo de unos 550 metros cuadrados, como en Pioz, donde contarán con otro local adicional de unos 200 metros cuadrados; para “ampliar la zona de venta y exposición en ambas”, indica el ferretero. Si todo sale según lo previsto, esta ampliación verá la luz a finales de año, tal y como detalla Alique. 

Desde la ferretería también contaron, el pasado año, con la valiosa ayuda de ADASUR, que les concedió una subvención de unos 6.000 euros que les permitió afrontar la adquisición de una furgoneta destinada a reparto; una cantidad que supuso cerca de un “30 por ciento” del valor de la compra. “Cosas de éstas son las que hacen falta en el medio rural”, reconoce agradecido Alique, calificándolas como “totalmente necesarias y un desahogo” para los perceptores de este tipo de ayudas. 

A día de hoy, ambas ferreterías se encuentran inmersas en plena temporada alta de trabajo, en la que la demanda se concentra en los clientes provenientes de “las segundas residencias”, donde “la gente se dedica al ocio de la casa” con la pisicina o el jardín como grandes protagonistas. Y, desde ferretería Alique, trabajan para ello; esforzándose por ofrecer el mejor servicio posible a  su prioridad número uno: los clientes.