Hospitales

29/06/2018 - 17:59 Jesús de Andrés

En toda la provincia hay un único hospital público que debe atender una población cada vez más elevada, más de 253.000 habitantes. 

Después de varios meses de escuchar y leer un día sí y otro también acusaciones en un sentido y en otro sobre el parking del Hospital –con el “y tú más” siempre presente– me van a permitir que contribuya a la controversia sobre la situación hospitalaria en Guadalajara. Comenzaré por señalar que, de entre todos los debates que pueda haber en torno a la sanidad en nuestra provincia, el del aparcamiento es el más falso y trivial: enmascara otras cuestiones mucho más sustantivas a las que, por efecto de la distracción, no se presta atención. Al lado de lo verdaderamente sustancial, poco importa si hay o deja de haber zonas para aparcar el coche, si son de pago o si son más o menos caros que en otros lugares.

Por no aburrirles con datos estadísticos, que como saben siempre admiten más de una lectura, me permitirán que les hablé de mi caso que, por ser mío, conozco bien de cerca. Hace dos años, tras ocho meses en lista de espera, fui llamado para ser intervenido quirúrgicamente. Ante la saturación de los quirófanos del Hospital, me ofrecieron la posibilidad de ser derivado a la sanidad privada, a una conocida clínica de la capital, donde sería atendido cuanto antes. Cansado de esperar, y pese a ser usuario de la sanidad pública por vocación y no por obligación, decidí aceptar. Muy a mi pesar, hace poco más de un año fui de nuevo incluido en lista de espera. Esta vez no han sido ocho meses, ha sido un año completo el que he tenido que esperar una llamada que, de nuevo, me ofreció la posibilidad de ser derivado a la privada, en esta ocasión en una clínica de Madrid.

En toda la provincia hay un único hospital público que debe atender una población cada vez más elevada, más de 253.000 habitantes. Por establecer una comparación, Ciudad Real, por ejemplo, que no llega al doble de población, tiene 6 hospitales públicos (en Alcázar de San Juan, Manzanares, Puertollano, Tomelloso, Valdepeñas y Ciudad Real capital). Por supuesto, cada una de estas localidades tiene sus respectivos centros de salud. En Azuqueca, con una población superior a cualquiera de esas localidades salvo Puertollano y la capital, todavía estamos discutiendo sobre la construcción del segundo centro médico. Hace ya muchos años que el Hospital se quedó pequeño, que sus servicios dejan mucho que desear, que sus listas de espera crecen sin fin y que su población de referencia es enviada a otras provincias para ser atendida. No es sólo un caso de falta de recursos o de inacción política, es además un agravio comparativo: en Castilla-La Mancha unas provincias multiplican sus hospitales y centros de salud (amén de aeropuertos o palacios de congresos) mientras otras, como la nuestra, todavía tiene que alegrarse cuando le toca un parking en la subasta.