Iberdrola prevé una ‘guerra’ si EDF lanza una opa

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: COLPISA
Si EDF quiere guerra, la tendrá. El vicepresidente de la eléctrica española Iberdrola admite esa posibilidad en caso que se concrete una OPA por parte del grupo francés, según una entrevista publicada ayer en el diario ‘El País’.
El pasado viernes, la compañía energética gala reconoció contactos preliminares con la constructora española ACS. Juan Luis Arregui, vicepresidente de Iberdrola y miembro de la comisión ejecutiva del grupo, es el primer accionista individual de la eléctrica. Dueño del 1,82% de su capital, acaba de vender por necesidad el 0,28%, pero asegura que mantiene “el máximo que puede”, Por eso se declara dispuesto a defender a la compañía “hasta la muerte” frente a los intentos de quienes pretendan trocearla. “Vamos a ver quien gana”, desafió.

El administrador dejó abierto el camino a una oferta multimillonaria de los aspirantes. Si ofrecen “una barbaridad”, “un precio desorbitado”, el consejo de administración se lo presentará a la junta de accionistas, dijo, tras recordar que la capitalización de la eléctrica en Bolsa supera los 50.500 millones de euros. Reconoció, no obstante, que lo que puede ser bueno para el accionista –que le paguen mucho por sus títulos- puede no serlo para el país.
Y así el vicepresidente de Iberdrola fue explícito en sus críticas a los planes del gigante francés. Carece de sentido, a su entender, que "una compañía de Estado, que no son ejemplo de eficiencia, venga y nos controle, cuando en España hemos privatizado las empresas públicas".
Recordó Arregui que, contra viento y marea, la dirección de Iberdrola ha decidido mantener sus proyectos de inversión de 24.000 millones de euros y seguir adelante con su plan estratégico.
“Dieciocho meses meses es un período largo, pero igual se hace más largo para otros”, estimó Arregui refiriéndose al período apuntado por el presidente de EDF, Pierre Gadonneix, para un potencial desembarco en Iberdrola.
La dirección de la eléctrica española ya ha emprendido una batería de medidas para protegerse. El pasado viernes pidió a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) que limite los derechos de voto de su primer accionista, el grupo constructor ACS, eventual aliado de EDF para lanzar la OPA.