Celebrada la procesión de la Virgen de los Remedios

09/09/2015 - 10:18 Redacción


Ayer y hoy son dos días especialísimos en Pareja, que la villa vive con intensidad y emoción. El 8 y el 9 de septiembre corresponden a la celebración del día de Virgen de los Remedios, patrona de la localidad.
Además del nutrido programa de festejos de Pareja, que cuenta con epígrafes para todos los gustos, la parte más solemne y tradicional de las fiestas arranca con la novena, que comienza el día 30 de agosto. Ese mismo día, la imagen de la Virgen, una talla de mediados del siglo XX puesto que la original fue destruida en la Guerra Civil, es trasladada desde su Ermita, en la entrada del pueblo y a la vera del lago, hasta la Iglesia. Se iza entonces la bandera en el mástil de El Torreón, donde permanecerá hasta el día 26 de septiembre próximo. No es esa la única tradición en torno a la patrona de Pareja. El mismo sábado en el que comezó la novena, se llevó a cabo la almoneda en la que se rifaron donaciones de los feligreses parejanos. Ya en lo más granado de la fiesta, la víspera, el día 7 de septiembre, la de los Remedios sale en procesión por la puerta norte de la Iglesia, continúa por la plaza de la Constitución, Avenida de Calvo Sotelo, Plaza del Palacio y calle de San Julián, para regresar al templo por la misma puerta.
Ayer, día 8 de septiembre, Pareja celebró misa mayor en honor a su patrona, con procesión corta por la calle de la Iglesia y plaza de la Constitución. Fue el día en el que los miembros de la hermandad de la Virgen, más de cuatrocientos, pusieron a la venta en la misma plaza objetos con los que recabar fondos para el mantenimiento de la organización y los gastos derivados del culto. Durante la misa, las majas, tanto las infantiles como las juveniles, hicieron la ofrenda floral a la Virgen de los Remedios. Además, los parejanos recibieron la visita del presidente de la Diputación, José Manuel Latre, que quiso acompañar a la corporación municipal, que encabezaba el alcalde de Pareja, Javier del Río.
La ceremonia religiosa fue oficiada por el párroco local, Javier Lucía, y musicalmente amenizada por el grupo Arrabal Folk.
“En este día 8 de septiembre, fiesta mayor de Pareja, queremos recordar a todos los parejanos que nos dejaron, por hacer grande nuestra Villa, así como a todos los que en un día como hoy tienen en su cabeza y en su corazón a nuestro pueblo, aunque sea lejos de él. ¡Viva Pareja!”, afirmó ayer Javier del Río después de los oficios religiosos.
Ocho miembros de la Hermandad se encargan cada año de vestir y preparar a la Virgen de los Remedios para estos días de celebración. Son sólo un exponente de la fe enorme que hay en la localidad hacia la patrona. Benita Moya es una de las muchas parejanas que se emociona cuando ve a la Señora salir de la Iglesia. “Le pido cosas y me las concede. Le tengo mucha fe”, reconoce. A lo largo del año baja, siempre que regresa a Pareja, “a pasar un ratito con la Virgen en la ermita”. Como a muchos parejanos, le cuesta reprimir las lágrimas cuando la ve pasar, “tan guapa y tan adornada”. Ella y su hermana, Adoración Moya, ya están pensando en qué nuevas ofrendas hacerle.
Hoy, día 9 de septiembre, es la fiesta litúrgica propiamente dicha de la Virgen de los Remedios. De nuevo, la Señora sale en procesión, a partir de las 13 horas, comenzando por la Puerta del Sol, para continuar por las calles Hospital, plaza de la Reina María Cristina, calles de Cañuelo, Los Crespos, travesía y calle de Castro y Hermosilla y plaza de la Constitución, para terminar por la avenida de Calvo Sotelo, calle de los Olmos, plaza del Palacio, calle de San Julian y entrada por la puerta norte de nuevo a la Iglesia. Encierro infantil Como cada año desde hace ya una década, y para subrayar la afición taurina que hay en Pareja, el grupo segoviano Tirotateiro hizo ayer el pasacalles de gigantes y cabezudos, acompañado por dulzaina y redoblantes, y luego el encierro infantil, en el que niños y mayores llevaron a cabo todo el ritual previo de los corredores, antes de enfrentarse a los carretones. Como cada año, cerca de un centenar de niños lo pasaron en grande con los segovienos.