La Escuela de Folklore prepara una exposición con reproducciones de piezas originales de la provincia
La Escuela de Folklore de la Diputación de Guadalajara, que desde hace meses mantiene su actividad a pesar de que no cuenta con alumnos, prepara una futura exposición itinerante que viajará por los pueblos para mostrar la cultura tradicional de esta tierra, mediante reproducciones de piezas originales de la provincia.
Francisco Javier Plata, nuevo director de la escuela, está viviendo esta etapa con "ilusión". "Nos hemos querido reinventar y aprovechar este parón para la realización de piezas propias para motivar a los profesores en la reproducción de objetos originales de la provincia y así, relanzar el folklore de Guadalajara. A pesar de las circunstancias que vivimos hemos hecho todo lo posible para sobreponernos a la situación".
Los 13 docentes --seis artesanos y siete en la vertiente musical-- se están centrando en la documentación a través de las distintas materias que se imparten, ha informado la Diputación de Guadalajara en nota de prensa.
Chus Benito es la encargada de enseñar las labores de esmaltista en el centro, pero ahora está reproduciendo el azulejo de la solana y el arrimadero del Palacio de los Duques de Medinaceli para mostrar una colección en esa futura exposición y Luis Larriba se encarga de divulgar el arte de la alfarería.
Con Berta Bucán, la experta en cestería, también se está trabajando en realizar pequeñas piezas para ambientar el belén napolitano que presidirá el salón del Centro San José de la Diputación de Guadalajara estas navidades.
En el apartado de costura y textil, las profesoras están empeñando su tiempo también en la recuperación de la cultura tradicional. Los trajes típicos de las fiestas de los pueblos son el terreno donde mejor se mueve Leticia Martínez, que se encuentra arreglando los ropajes de los maceros de la Institución Provincial.
Ester Ródenas por su parte, es la responsable de que no se pierda el encaje de bolillos. La profesora Mari Luz Vadillo lleva meses restaurando el despacho del médico e historiador de la provincia de Guadalajara Francisco Layna Serrano que está cedido a la Diputación y que se encontraba en muy malas condiciones.