La Guardia Civil desarticula una red de tráfico de drogas con tres laboratorios clandestinos

La operación comenzó a mediados de febrero de 2012 cuando agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Guadalajara detectaron que un vecino de Guadalajara, M.A.B, podría estar traficando con drogas, ya que adquiría productos químicos, que se pueden utilizar en la elaboración de distintas sustancias, como la cocaína. Además, las investigaciones realizadas determinaron que esta persona no trabajaba ni tenía relación con alguna empresa que utilizase este tipo de productos, el nivel de vida era superior al de una persona en paro y en las reuniones con otras personas tenía tomaba “precauciones excesivas”, por lo que “podría ser indicio de que estuviera tratando de encubrir determinado tipo de operaciones ilegales”, explicó el delegado. Este tenía una estrecha relación con W.N.A, su suegro, que era quien le ordenaba dirigirse a distintos lugares y reunirse con varias personas “posiblemente implicadas también en esta organización”. Con todo ello, las investigaciones realizadas por los agentes llegaron a la conclusión de que debían disponer de un laboratorio clandestino de cocaína y una estructura organizada dedicada al tráfico de drogas. Además, descubrieron que contactaban con otras personas en Madrid a las que encargaban grandes cantidades de cocaína y que pertenecían a un grupo organizado que actuaba en Madrid. “Después de muy complejas investigaciones que se han prolongado durante más de 10 meses se consiguieron indicios de la existencia de dos grupos perfectamente jerarquizados y organizados que operaban en las provincias de Madrid y Guadalajara” y localizaron tres laboratorios clandestinos que utilizaban ambos grupos.

Gracias a las investigaciones practicadas, el 28 de noviembre, los agentes pudieron saber que dos de los miembros de la banda iban a recoger a la oficina de Correos un paquete procedente de Brasil y lograron interceptar el envío y detener a estas dos personas. El paquete contenía cinco colchas impregnadas en cocaína con un peso de cinco kilos. Posteriormente, se estableció un dispositivo encubierto en torno a la vivienda del cabecilla de la banda y se procedió a su detención y desarticulando así la organización en Guadalajara.

Entre los días 28 y 29 de noviembre se realizaron 10 registros domiciliarios en Guadalajara, Cabanillas del Campo, Fontanar, Valdeaveruelo, Mantiel y Huete (Cuenca), que finalizó con nueve detenidos y dos laboratorios desmantelados. La operación finalizó en el mes de diciembre en Madrid con la detención de otras cuatro personas y el desmantelamiento de otro laboratorio en el que había más de cuatro kilos de heroína.

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La operación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

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Labrador ha felicitado a la Guardia Civil de Guadalajara por esta “importante” operación que ha conseguido desarticular dos organizaciones y tres laboratorios de droga, “por lo que se ha dado un golpe bastante considerable a lo que es el tráfico de drogas en la provincia de Guadalajara”. Y, además, ha precisado, “se ha eliminado una vía de entrada de heroína a nuestro país, sustancia que es una de las peores drogas que existe y la más dañina respecto a los ciudadanos”. Asimismo, el delegado del Gobierno ha aprovechado también para felicitar a los agentes por las “brillantes operaciones” que ha realizado la Guardia Civil de Guadalajara, no solo en este ámbito, “sino también en la protección del derecho a la propiedad que ha llevado a cabo en los últimos meses en Guadalajara y que refleja la efectividad, eficacia y profesionalidad de los agentes”, ha concluido.