La Liga Prebenjamín de fútbol sala cumple veinte años de diversión y aprendizaje
La liga de las futuras estrellas del fútbol sala cumple veinte años. La competición de las categorías de Iniciación y Prebenjamín de este deporte, que organiza la Agrupación Alcarreña, cerraba el pasado domingo su vigésima edición.
Y lo hacía con el tradicional desfile de participantes, la habitual entrega de trofeos y sobre todo con la gran ilusión que desprendían los jugadores y sus familiares que abarrotaron las gradas del polideportivo San José.
La jornada comenzó temprano, con la disputa de los últimos partidos en la categoría prebenjamín. Aún estaba por decidir el nombre del ganador. Santa Cruz A y Diocesano A se plantaron en la final tras apear en las semifinales a Maristas Víctor y Diocesano C, respectivamente. En el último partido, el Diocesano A se llevó el premio y revalida así el título que ya logró el pasado año.
El club ganador está haciendo “un gran trabajo en la formación de jugadores y se ha convertido ya en uno de los habituales en ocupar el cajón más alto del podio en los últimos años”, explica Mari Carmen Cámara, presidenta de la Agrupación Alcarreña de Fútbol Sala (AAFS), quien destaca también el hecho de que “los cuatro semifinalistas fueron equipos de colegios, no hubo esta vez ningún club entre los cuatro mejores, lo que demuestra que desde los colegios, se está trabajando muy bien con los niños en las extraescolares”.
Tras los partidos llegó el momento del esperado desfile y la entrega de premios que estuvo presidida por Mari Carmen Cámara; el que fuera delegado provincial de fútbol sala, Francisco González Gálvez y Severino Castro, director del Hotel Tryp Guadalajara, una de las empresas, junto con el Ayuntamiento de la capital, que colaboran con estas ligas.
Diocesano A cerraba el desfile y recogía su gran copa de campeón, bajo los acordes del We are the Champions, de Queen. “Para la mayoría de estos niños era su primer desfile y su primer trofeo. Es algo que queda grabado en el recuerdo de los jugadores y por eso creemos que esta fiesta final es necesaria, aunque solo sea por ver la ilusión de los niños”, analiza Cámara.
Categoría de Iniciación
El premio del Diocesano A cerraba una entrega que había comenzado minutos antes con el homenaje a los más pequeños, los jugadores nacidos en los años 2013 y 2014 que formaban la categoría de Iniciación. Esta competición había finalizado hace dos semanas dejando como ganador, por primera vez al Sporting Cabanillas. El conjunto campiñero firmó una excelente temporada ganando todos los partidos disputados. Encabezó así un podio que completó el Dínamo Guadalajara, como subcampeón; el Salesianos, tercero y el Ciudad de Guadalajara Ampas, como cuarto. Estos tres equipos quedaron empatados a puntos en la segunda fase y tuvieron que resolver la igualada por el average.
La clausura también reconoció a todos los equipos de la liga benjamín, aunque los trofeos a los ganadores se entregarán el 8 de junio junto a los ganadores de la liga senior y los campeones de la Copa de la Agrupación.
La liga deja unos números para tener en cuenta, con más de 600 jugadores participantes, encuadrados en 13 equipos en la categoría de Iniciación; 20 en la de Prebenjamín y 18 en la Benjamín, completando una propuesta que comenzó en el mes de noviembre y que se ha desarrollado hasta el pasado domingo.
“Cada equipo ha podido jugar una media de 10 partidos en la temporada”, explica la presidenta de la AAFS que recuerda que “desde hace ya unos años las ligas de Iniciación y Prebenjamín las estamos disputando en fines de semana alternos y creemos que es una buena opción porque los padres no se saturan y además, tenemos así las instalaciones disponibles”. Y es que la preparación de las jornadas no es sencilla. “Requiere mucho trabajo de instalación porque se disputan varios partidos a la vez, hay que adaptar las porterías, las líneas de juego...”, dice Cámara que recuerda cómo el sistema de juego se mantiene desde el inicio de la competición, hace ya veinte años, con un reglamento que se adaptó en su momento, adecuándolo a estas edades y con la intención de que los jugadores aprendan y se diviertan, buscando el compañerismo antes que la competitividad.
Mari Carmen Cámara tiene también un recuerdo para los pioneros de esta competición. “Fue una aventura que nació hace veinte años en los campos del colegio Maristas. Gracias a ese grupo de personas que se atrevieron con este proyecto, hoy podemos disfrutar de una competición que existe en pocos lugares de España y menos de esta magnitud de equipos participantes. Son veinte años de esta liga, pero conservamos la misma ilusión del principio”, concluye.