La pegada del Villarrubia amarga la fiesta de un inofensivo Azuqueca

23/09/2018 - 16:45 Pedro Manuel Sanz

En un ambiente festivo con motivo de las fiestas de Azuqueca, la escuadra azudense vio frenada su trayectoria de dos victorias consecutivas después de caer por 1-3 en el San Miguel ante el potentísimo Villarrubia, exequipo del actual entrenador rojinegro, Manolo Alfaro, y que ha tomado velocidad de crucero, encaramándose a los puestos de eliminatorias de ascenso a Segunda División B tras enlazar ya tres triunfos sucesivos.

El último, el conseguido en Azuqueca en la tarde-noche del sábado, fue inapelable y contudente (1-3). Decidió la pegada y efectividad de los manchegos, con los exdeportivistas Nando Copete y Nico Cháfer en plan estelar -y el exentrenador del Deportivo Guadalajara, Alberto Parras, viéndolos en la grada del San Miguel-, ante un voluntarioso e inofensivo Azuqueca. Los de Manolo Alfaro no estuvieron mal, pero fueron inferiores a un equipo que luchará por ascender a Segunda B.

0-2 en menos de media hora
De salida, el cuadro rojinegro sostuvo al Villarrubia con un buen orden táctico e intentando salir en velocidad con aproximaciones de peligro como la que tuvo José Luis Brotón en el minuto 3 en un lanzamiento frontal. El partido transcurría igualado, sin apenas ocasiones y con los dos equipos intentando bajar el balón.

Nando Copete avisó en el minuto 14 con un centro-chut que despejó Nacho como pudo. El portero rojinegro fue, sin duda, el mejor de los azudenses en una tarde aciaga para el resto de sus compañeros. El guardameta evitó una goleada mayor. Pero el ‘9’ del Villarrubia no perdonó tras recibir un centro de Domenec desde la banda derecha y rematar al segundo palo, haciendo el 0-1 en el minuto 20.

El 0-1 apenas afectó a un Azuqueca combativo que quería seguir percutiendo por las bandas para que le llegara algún balón claro a Pancorbo. Apenas siete minutos después, en el 27, ni la barrera del Azuqueca ni Nacho pudieron hacer nada ante el gran gol de falta lateral botado por Domenec. Un golazo, ajustando el balón al palo largo de Nacho, que se llevó el aplauso del respetable del San Miguel. Ese gol, el que significaba el 0-2 sin haber cumplido la media hora, hizo mella, y mucho, a un Azuqueca que a partir de ahí se descompuso y que, incluso, pudo haberse marchado al descanso con mayor desventaja de no ser por las grandes intervenciones de Nacho a los lanzamientos de Copete o Nico Cháfer.

La segunda mitad apenas tuvo historia. Manolo Alfaro metió más pólvora en el descanso con Gorka y Lucas. El Azuqueca lo intentó por todos los medios y formas, pero se topó con un Villarrubia que tiró de oficio para cortar cualquier jugada local. La desesperación se apoderó de los rojinegros, tanto con el árbitro como al ver que pasaban los minutos y no podían recortar distancias y tener algo de chance en el partido.

Y con un Azuqueca volcado, en el minuto 78 Pablo puso la puntilla al hacer el 0-3 con un lanzamiento desde la frontal. La respuesta del orgullo rojinegro la ofreció Borja Cabanillas, que apenas instantes antes había sustituido a Matas, para lograr el 1-3 en el minuto 81. Pero ya no quedaba tiempo para más en un Azuqueca que aceptó la realidad de claudicar ante un Villarrubia superior en presupuesto, plantilla y pegada.

AZUQUECA, 1; VILLARRUBIA, 3
AZUQUECA:
Nacho, Matas (Borja Cabanillas 73´), Corral, Rubén (Gorka 46´), Néstor, José Luis, Maikel, Prieto (Lucas 46´), Neila, Pancorbo y Ramiro.
VILLARRUBIA: Manolo, David, Carlos, Víctor, Toni, Nico Cháfer (Pablo 70´), Copete, Domenec (Juli Cacho 68´), Charli (Sanged 90´), Ruiz Hernando, Diop.
ÁRBITRO: Escribano Ortiz. Amonestó a Rubén, Maikel, Neila, Pancorbo y Corral, por el Azuqueca, y a Carlos, Domenec y Pablo, por el Villarrubia.
GOLES: 0-1. Min. 20. Nando Copete. 0-2. Min. 27. Domenec. 0-3. Min. 78. Pablo. 1-3. Min. 81. Borja Cabanillas.
INCIDENCIAS: Encuentro de la quinta jornada en el Grupo XVIII de Tercera División, disputado en el estadio San Miguel en la tarde-noche del sábado de fiestas de la localidad. El equipo estrenó la camiseta para esta temporada en la que figuran los nombres de 300 socios del club. Además, la jornada fue solidaria, recaudando fondos para la lucha contra el cáncer infantil.