La Red de Museos de Castilla-La Mancha como activo cultural clave

La vasta y rica historia de Castilla-La Mancha encuentra su reflejo y salvaguarda en la red de museos gestionados por la Junta de Comunidades. Tal y como establece la Ley 2/2014, la misión de estos centros trasciende la mera exposición: consiste en “conservar e interpretar el pasado, analizar el presente y proyectar el futuro”, actuando como un excelente activo social que despierta la curiosidad y refleja el nivel de desarrollo cultural de la región.

Esta red se compone de un conjunto diverso y fundamental para el patrimonio español. Incluye los cinco museos de titularidad estatal cuya gestión fue transferida en 1984, situados en las capitales de provincia: el Museo de Albacete, el Museo de Ciudad Real-Convento de La Merced, el Museo de Cuenca, el Museo de Guadalajara y el Museo de Santa Cruz en Toledo. A estos se suman las filiales de los museos de Toledo, que ofrecen un viaje temático por la historia: el Taller del Moro, el Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda, la Casa-Museo de Dulcinea en El Toboso y el Museo Ruiz de Luna en Talavera de la Reina.

Además de este legado transferido, la Junta de Comunidades ha enriquecido la oferta cultural con la creación de museos regionales que miran al futuro y a campos especializados. Entre ellos destacan el Museo de las Ciencias y el Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha (MUPA), ambos en Cuenca, que albergan colecciones únicas de relevancia internacional.

La lista se completa con centros de arte contemporáneo de primer nivel, como la Colección Roberto Polo en Toledo y Cuenca, y el especializado Museo del Niño Juan Peralta en Albacete. 

En total, 15 instituciones que convierten a la red de museos de Castilla-La Mancha en un pilar esencial para el conocimiento, la identidad y el turismo cultural.

El MUPA, referente paleontológico en Europa
El Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha (MUPA), creado por decreto el 20 de marzo de 2015, ha experimentado una notable metamorfosis para cumplir su misión fundamental: la conservación, protección y exposición ordenada del vasto patrimonio paleontológico regional. Con la ambición clara de ser uno de los mejores museos de su campo en España y Europa, el MUPA se ha convertido en el custodio de restos que abarcan los últimos 550 millones de años de la historia de la Tierra.

    El núcleo fundacional de la colección está compuesto por los espectaculares fondos procedentes de dos yacimientos conquenses de relevancia mundial: Las Hoyas (Cretácico Inferior, con más de 20.000 ejemplares de hace 125 millones de años) y Lo Hueco (Cretácico Superior, con más de 12.000 ejemplares de hace 75 millones de años, incluyendo esqueletos parciales de dinosaurios gigantes). La riqueza del MUPA se extiende a registros paleozoicos de Toledo y Ciudad Real, mesozoicos de Guadalajara y Cuenca, y cenozoicos de toda la región.

    El museo aloja un conjunto crucial de holotipos de fósiles de plantas, animales e icnofósiles, destacando nombres célebres como Iberomesornis, Concornis, Pelecanimimus, Concavenator y Lohuecotitán.

    Tras la inauguración inicial en marzo de 2015 con la exposición Tierra de Dinosaurios, la segunda fase, financiada con una subvención de 300.000 euros de la Diputación de Cuenca, incorporó los fósiles más destacados de Las Hoyas y Lo Hueco. La verdadera transformación llegó con la tercera fase, inaugurada en enero de 2018. Con un apoyo financiero de 900.000 euros, esta remodelación supuso una mejora integral que aprovechó al 100% la superficie del antiguo Ars Natura. Actualmente, el montaje expositivo se nutre fundamentalmente de piezas originales, constituyendo más del 95% de la colección expuesta. Las nuevas condiciones museísticas de control de luz, temperatura, humedad y seguridad permiten la exposición al público de este rico patrimonio. Con las últimas intervenciones, los yacimientos estrella de Las Hoyas y Lo Hueco tienen el espacio expositivo que merecen, poniendo en valor su singularidad junto a otros recursos regionales, y consolidando al MUPA como un actor dinamizador clave en el panorama paleontológico nacional e internacional.
 

· Horario de apertura

De martes a sábado, de 10.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 19.00 horas; y domingos de 10.00 a 14.00.

· Días de cierre

Todos los lunes; 1 y 6 de enero, Jueves y Viernes Santo y 24, 25 y 31 de diciembre.

· Entradas

General | 5 euros.

MUPA y Museo de las Ciencias | 7 euros.

Entrada combinada para el mismo día.

Reducida | 2,5 euros.

Grupos de 10 o más personas con visita concertada.

Gratuita | Miércoles y18 y 31 de mayo.

· Dirección

Calle Río Gritos, nº5. Cuenca

969 27 17 00

MuPaCLM.es

 

Museo del Niño Juan Peralta: viaje a la infancia

El Museo del Niño de Castilla-La Mancha Juan Peralta, en Albacete, se consolida como el centro más completo de sus características en España. Fundado en 1987 por el maestro Juan Peralta como un proyecto de innovación educativa para rescatar el patrimonio histórico de la infancia y la escuela, desde 2003 pertenece a la Junta de Comunidades. Es, además, el primer museo creado en el siglo XX en nuestro país dedicado al mundo educativo tras la desaparición del Museo Pedagógico Nacional. Considerado uno de los 10 mejores museos para visitar con niños por diversos medios, su valor reside no solo en su colección museográfica sino también en albergar el único Centro de Documentación de la Infancia, la Familia y la Educación existente en España.

    El museo se ubica en un edificio diseñado por el arquitecto Agustín Morcillo y construido entre 1956 y 1958 para albergar dos Escuelas Graduadas de Niños y Niñas. Su diseño se inspira en los principios arquitectónicos de la Oficina Técnica de Construcciones Escolares de los años 20, destacando su cuerpo central porticado y sus amplios ventanales orientados al sur. Las instalaciones cuentan con 12 salas expositivas y dos galerías que ofrecen un recorrido exhaustivo por la historia pedagógica.   Los visitantes pueden sumergirse en la historia a través de la recreación de aulas históricas que van desde la Restauración Borbónica hasta la Segunda República y la Dictadura franquista, además de antiguos gabinetes de Física, Química, Historia Natural y Geografía de los institutos históricos de la región. La galería de la planta baja se centra en la historia de la educación en Castilla-La Mancha, las Escuelas Normales y la educación de las niñas, e incluye un espacio dedicado a la Ilustración infantil con obras originales del artista toledano Teo Puebla. En la planta superior, las salas abordan diversas temáticas de la infancia como las linternas mágicas, el ajuar y los juguetes de la Noche de Reyes, el mundo de los tebeos y los títeres. Una de las salas más impactantes es Infancias Robadas.
 

· Horario de apertura

De septiembre a junio: de martes a viernes, de 9.00 a 14.00 y de 16.00 a 19.00; y sábado y domingo de 10.00 a 14.00.

Julio: de martes a domingo de 10.00 a 14.00 horas.

Navidad y Semana Santa: de 10.00 a 14.00.

· Entrada gratuita

· Dirección: Calle del Amparo, 14. Albacete

El Museo Casa Dulcinea evoca La Mancha del Quijote

Dentro del marco de la conmemoración del IV Centenario de la publicación de Don Quijote de la Mancha se produjo la reapertura del Museo Casa Dulcinea, tras una remodelación que actualizó las instalaciones y contenidos expositivos con un nuevo montaje que recrea la vida de una casa de hidalgos ricos de la época cervantina. Este museo se alberga en un edificio que mantiene parte de su estructura original del siglo XVI, y a pesar del tiempo transcurrido y las alteraciones experimentadas a lo largo de los siglos conserva en líneas generales los caracteres de la casa manchega de un hidalgo con sus diversas dependencias: molino, bodega, patios, corrales, pozos, etc.  La casa pertenecía a una de las familias más ilustres de El Toboso, los Martínez Zarco de Morales, cuyos escudos podemos ver en la fachada. Según la tradición, en época cervantina fue habitada por don Esteban y doña Ana, su hermana, quien inspiró el personaje de la sin par Dulcinea de El Toboso. El edificio que alberga el Museo casa Dulcinea del Toboso conserva parte de su estructura original que se remonta al siglo XVI y, a pesar de las diversas transformaciones experimentadas a lo largo del tiempo, conserva el carácter de la típica casa manchega perteneciente a un labriego acomodado, a un hidalgo con sus diversas dependencias: cocina, patio, molino, bodega, corrales, pozos, etc. Desde el punto de vista arquitectónico, el edificio consta de dos plantas: la superior, bastante alterada en las obras de la década de los 60, y rematada por un torreón moderno (la popular torrecilla que le da nombre) y la inferior, abierta a un gran patio trasero. La fachada es de mampostería en la planta baja mientras que la planta superior está construida con tapial y ladrillo encalados. La portada es de sillería con dovelas adinteladas y rematadas por sendos escudos heráldicos de los Martínez Zarco de Morales. El interior, al que se accede por un zaguán, presenta un pavimento de guijarro que se abre a diversas estancias de servicio, destacando la cocina, la despensa y la bodega a la izquierda de la entrada y, a la derecha, una escalera que comunica con el piso superior y un acceso a una estancia de planta cuadrangular con un molino de aceite o almazara de tracción animal. Desde el molino o desde un pequeño patio porticado se da salida a un gran patio o corral a través del cual se accede a una de las construcciones más llamativas y originales, un palomar formado por cuatro crujías de muros cubiertos de columbarios. En el patio se accede a un amplio corral que conserva un antiguo pozo de brocal de piedra junto al que crecen unos grandes olmos que bien podrían ser centenarios. En el extremo del corral se instaló, en 1971, un lagar con una enorme prensa de aceite o uva, cuya viga, de madera maciza, mide unos 15 metros de longitud. Por último, en la planta superior y además del acceso a la torre, se encuentran las estancias destinadas a la vida social (las más cercanas a la escalera de acceso) y a la vida íntima (las alcobas y estrado femenino al fondo).

· Horario de apertura

De martes a sábado, de 10.00 a 14.00 horas y de 15.00 a 18.30 horas; y domingos de 10.00 a 14.00.

· Días de cierre

Todos los lunes; 1 y 6 de enero, 1 de mayo, 28 de agosto y 24, 25 y 31 de diciembre.

· Entradas

General | 3 euros.

Reducida | 1,5 euros.

Grupos de 10 o más personas con visita concertada. 

Gratuita | Todos los miércoles a partir de las 15.00 horas; y los domingos 18 y 31 de mayo.

· Dirección. Calle Don Quijote, 1. El Toboso (Toledo)

925 19 72 88 casadulcineadeltoboso@jccm.es