La solidaridad vecinal fue fundamental para salvar de las llamas a una casa y su moradora

La apacible vida veraniega en la localidad de Puebla de Valles quedó este martes truncada. A las 16.12 horas, el incendio en una cocina de la vivienda de una mujer de 75 años, sita en la carretera de Valdesotos, provocó que su única moradora tuviera que ser trasladada al Hospital Universitario de Guadalajara en una UVI móvil.

La cocina se emplaza en la única planta de una casa lugareña que tiene un garaje en el sótano. La mujer, que habitualmente goza de un buen estado de salud, sólo tuvo quemaduras leves. Sin embargo tuvo que ser ingresada debido a una intoxicación por el humo que inhaló, procedente de la quema del aglomerado de una de las encimeras, que arrojó un humo muy denso que afectó a sus pulmones. “Fue más aparatoso de lo que realmente era, pero nos dio un buen susto”, señala uno de los testigos.

“Esta mañana acudía un sobrino que se trasladaba desde Murcia y nos ha comentado que se encontraba en bastante buen estado, a la espera del alta”, asegura la misma fuente.

Una vez más, la solidaridad vecinal fue clave para que el suceso no se quedara en nada más que un susto. Los habitantes de este pequeño pueblo trabajaron todos a una, codo con codo, para colaborar en la extinción del incendio y limpiar los restos procedentes de la quema de la encimera y los residuos que dejó la quema de otros muebles.

Testigos aseguran que la mujer salio por su propio pie, de espaldas. “Nada más verla una persona que vive en el pueblo y venia de trabajar la vio se fue hacia ella y en ese momento se desvaneció, aunque no perdió el conocimiento”, describe otro de ellos.

Para garantizar la seguridad del inmueble y su total extinción se desplazaron bomberos del parque de Sigüenza. Una UVI móvil del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) trasladó a la herida al hospital. Agentes de la Guardia Civil también se desplazaron para colaborar.