Los dos etarras detenidos ocultaban seis armas y material para fabricar coches-bomba
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
Los dos miembros de la banda terrorista ETA detenidos en Montpellier (Francia), Iurgi Mendinueta Mintegi y Joanes Larrechea Mendiola, en una operación de la Policía francesa y Guardia Civil, ocultaban seis armas y material explosivo para la fabricación de coches-bomba, según informó ayer el Ministerio del Interior.
En el momento de la detención llevaban dos pistolas --una del calibre 22 y la otra procedente del robo perpetrado en la localidad francesa de Vauvert--, detonadores, munición y cordón detonante, un ordenador portátil, un ordenador portátil pequeño (netbook), memorias portátiles, un disco duro, el DNI original de Joanes Larrechea, documentaciones falsas e identificaciones falsas de Guardia Civil.
Tras las detenciones, la Guardia Civil y la Policía francesa descubrieron un depósito de ETA en Rivieres (Francia) que contenía un bidón en cuyo interior escondían armas y material para fabricar coches-bomba: cuatro armas cortas, pentrita, temporizadores, varios metros de cordón detonante, una troqueladora francesa, 3 ó 4 juegos de matrículas empaquetadas listas para ser utilizadas en vehículos Peugeot 206 y 207.
La operación comenzó el pasado sábado, cuando las fuerzas de seguridad detectaron en la zona de Montpellier un Peugeot 307 gris con las matrículas dobladas. Ante las sospechas de que pudiera ser utilizado por miembros de la banda terrorista ETA, la Guardia Civil y la Policía francesa pusieron en marcha un dispositivo que permitió, a primera hora del domingo, la detención de dos de los presuntos etarras más buscados por las fuerzas de seguridad, que ocupaban puestos de responsabilidad en la logística operativa del aparato militar de la banda.
Mientras, según informó el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, la Guardia Civil está investigando el material incautado tras el hallazgo el pasado sábado de un zulo de ETA en la localidad alicantina de Confrides con diez kilos de explosivo, con el objetivo de intentar identificar a los responsables. En lo que va de año, las fuerzas de seguridad españolas y francesas han desmantelado una veintena de depósitos en los que ETA escondía más de una tonelada de explosivos, más de 40 armas cortas, más de mil metros de cordón detonante, más de 13.000 cartuchos, más de 300 detonadores, varios bidones llenos de componentes electrónicos y abundante herramienta y documentación, entre otros efectos.
Tras las detenciones, la Guardia Civil y la Policía francesa descubrieron un depósito de ETA en Rivieres (Francia) que contenía un bidón en cuyo interior escondían armas y material para fabricar coches-bomba: cuatro armas cortas, pentrita, temporizadores, varios metros de cordón detonante, una troqueladora francesa, 3 ó 4 juegos de matrículas empaquetadas listas para ser utilizadas en vehículos Peugeot 206 y 207.
La operación comenzó el pasado sábado, cuando las fuerzas de seguridad detectaron en la zona de Montpellier un Peugeot 307 gris con las matrículas dobladas. Ante las sospechas de que pudiera ser utilizado por miembros de la banda terrorista ETA, la Guardia Civil y la Policía francesa pusieron en marcha un dispositivo que permitió, a primera hora del domingo, la detención de dos de los presuntos etarras más buscados por las fuerzas de seguridad, que ocupaban puestos de responsabilidad en la logística operativa del aparato militar de la banda.
Mientras, según informó el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, la Guardia Civil está investigando el material incautado tras el hallazgo el pasado sábado de un zulo de ETA en la localidad alicantina de Confrides con diez kilos de explosivo, con el objetivo de intentar identificar a los responsables. En lo que va de año, las fuerzas de seguridad españolas y francesas han desmantelado una veintena de depósitos en los que ETA escondía más de una tonelada de explosivos, más de 40 armas cortas, más de mil metros de cordón detonante, más de 13.000 cartuchos, más de 300 detonadores, varios bidones llenos de componentes electrónicos y abundante herramienta y documentación, entre otros efectos.