Alcocer tendrá su "Corral de Comedias" como homenaje al de Almagro

19/02/2021 - 16:43 Redacción

Será un espacio multiusos, gracias a los Planes Provinciales de Diputación, que se adaptará sobre el viejo silo local donde se celebrarán además bodas, exposiciones o eventos culturales.

El antiguo almacén, de 2.000 metros cuadrados en una única planta –la amplísima mayoría de estos almacenes se construyeron en altura- será  adaptado, “siempre respetando su estructura principal, del viejo silo del pueblo, que pertenecía antaño al Senpa (Servicio Nacional de Productos Agrarios), cuya función primordial era almacenar grano”, asegura el alcalde de Alcocer, Borja Castro. 

La inversión máxima contemplada asciende a 65.000 euros euros, de los que 10.000 correrán a cargo del Consistorio y el resto será asumido por los Planes Provinciales de la Diputación de Guadalajara, localidad beneficiaria de los mismos. “Será un lugar polivalente de una sola planta, con muy buena accesibilidad, al estilo de un Corral de Comedias, en el que usaremos para su funcionamiento energías renovables, de eficiencia energética”, destaca el primer edil. La intención municipal es la celebración mensualmente de eventos que atraigan visitantes al pueblo. 

Estas dotaciones resolverán una necesidad que ha detectado que tenía el municipio. “Será un espacio muy camaleónico en donde se celebrarán eventos multitudinarios, desde las fiestas patronales de septiembre - uno de los cuatro días suele llover-o eventos familiares”, ilustra Castro, pero sin duda será un lugar “muy especial” para el desarrollo de obras de teatro con una estructura similar al de un antiguo Corral de Comedias. 

 

Instalaciones

El viejo silo, de una sola planta al nivel del suelo, al contrario de lo que sucede con la mayoría de estas instalaciones del Senpa, construidas en altura, se hallaba en una situación de deterioro porque el suelo tenía mucho polvo y muy malas condiciones de aislamiento térmico. “Es una estructura muy bonita de diseño industrial con un tejado con tirantas de acero que imprimen al edificio un carácter muy singular”, reseña el alcalde.  

El proyecto resultante, que correrá a cargo de José Luis Condado, arquitecto de la Diputación provincial, recogerá la adaptación de una pequeña plaza exterior que serviría, por ejemplo, para dar cócteles en bodas, y que se complementaría con la ejecución de las obras de remodelación interior: un espacio de antesala o recepción, y una gran superficie para la inclusión de mesas, banquetas o sillas, un escenario para la puesta en escena de obras de teatro de siete metros de ancho, por 15 de largo, una cocina industrial con un pequeño camerino, para la celebración de comidas populares, así como unos cuartos de baño adaptados a la normativa vigente sobre accesibilidad. Igualmente –destaca el regidor- “servirá para que los niños del colegio puedan hacer gimnasia cuando llueva, ya que en la actualidad no disponen de espacio techado suficiente en el colegio”. 

 

En los Planes Provinciales

En la actualidad la idea se encuentra en fase de previa a la elaboración del diseño. Este miércoles, el arquitecto de la Diputación, José Luis Condado, se informó de las medidas y otros detalles arquitectónicos y a partir de ahora se ajustará la distribución al espacio existente y al presupuesto. La fase siguiente será la licitación, a cargo de Diputación. “Será una vez se apruebe el proyecto, el Ayuntamiento lo haya visado y estemos todos de acuerdo”, matiza el alcalde. Una vez concedida la licitación pública, la empresa responsable tendrá seis meses para la ejecución. 

“La inversión más grande la hace la Diputación, con cargo a los Planes Provinciales, mientras que nuestra aportación supone un compromiso con la Institución provincial para que nosotros hagamos un seguimiento debido del desarrollo de la iniciativa”, quiere destacar Castro.   

En Guadalajara se contabilizan 27 silos: Albares (1969), Alcocer (1957), Alcolea del Pinar (1969), Atienza (1957), Brihuega (1966), Casar de Talamanca (1966), dos en Cifuentes (1957 y 1969), Cogolludo (1957),  Galápagos, dos en Guadalajara (1967 y 1975), Horche (1957),  Humanes (1958), Jadraque (1955), Milmarcos (1957), dos en Molina de Aragón (1956 y 1970), Mondéjar (1957), Paredes (1957), Pastrana (1966), Sacedón (1957), Sigüenza, Tomelloso de Tajuña (1957), Torija (1962), Torremocha del Campo (1956), Viñuelas (1957) y Yunquera de Henares (1966)  

Como señala Carlos Barciela, en su libro La red nacional de silos y graneros (1930-2000) “entre 1945 y 1984 se levantaron por todas las regiones españolas cientos de silos y almacenes de diverso tamaño y funcionalidad, que transformaron las prácticas comercializadoras de los agricultores y la propia imagen de muchas localidades”. La torre del silo pasó a perfilar la silueta de los pueblos, con la de las iglesias y los castillos y, aún más, “las grandes construcciones, los denominados «macrosilos», rivalizaron en dimensiones, aunque no en estética, lamentablemente, con las antiguas catedrales”.