Mauricio Martínez, el alcalde con más de 45 años en el cargo, que no recibió su homenaje en el Senado porque no había nadie que le llevara

El Senado ha sido hoy testigo del homenaje realizado por el Gobierno y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) a los 22 alcaldes de todo el país que llevan al frente de sus ayuntamientos desde el inicio de la democracia. Allí estaba el alcalde de Matilla, Ignacio Gordón Boza, e incluso el de Arroyo de Fraguas, Jaime Gutiérrez Gil, que tiene 19 años y es el más joven de toda España. Los dos tienen sus fotografías recogiendo el oportuno reconocimiento. Pero hay una persona que no sale en ninguna imagen: Mauricio Martínez, alcalde de Valdarachas desde 1972. “Me nombraron alcalde sin cortar conmigo. Un día me llegó una carta del gobernador en la que me nombraba y ya está”, recuerda. “Ya desde entonces no lo he dejado. Los del pueblo me dicen que siga y eso que esta vez yo ya no quería”.

El motivo por el que Mauricio no ha podido acudir al evento es simple: nadie podía llevarle. “Tengo 87 años y ya no puedo conducir, y mucho menos para ir a Madrid”. Aunque reconoce que le habría gustado participar en el acto celebrado en el Senado, decidió no molestar a los suyos. “Es que aquí tengo a todo el mundo trabajando y tampoco puedo pedir al partido que me mande a alguien para llevarme allí”. Y tampoco es que el transporte público sea una solución en este pequeño pueblo de 40 habitantes. “Antes había un autobús que pasaba por aquí para ir a Madrid, pero ya no”. Lo confirma una de sus hijas, quien indica que “es que ni siquiera hay uno que vaya todos los días de Guadalajara. Pasa un día sí y uno, pero de todas formas tienes que llamar antes por teléfono”, cosas de la España rural, esa que lucha contra la despoblación. Él se quedó sin su homenaje en el Senado, pero reciba desde aquí nuestro más sincero agradecimiento por tantos años de servicio público.