Narbona destaca el consenso por el Plan del Alto Guadiana
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, destacó ayer durante la firma del convenio para la configuración del Consorcio que gestionará el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), el consenso social alcanzado en la elaboración de dicho plan y el entendimiento administrativo para conveniar dicho Consorcio.
Ministerio de Medio Ambiente, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y Ayuntamiento de Alcázar de San Juan (Ciudad Real) firmaron ayer en esta ciudad el convenio para la configuración del Consorcio que gestionará el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), que se constituyó a continuación.
En este sentido, Narbona, que firmó el acuerdo con el presidente regional, José María Barreda, indicó que para trabajar en "una mejor" política del agua es necesaria la colaboración de administraciones, en este caso la central, la regional y la local, ya que a pesar de que se dice que la política del agua es una política de Estado, "se olvida" que vivimos en el Estado de las Autonomías y que todos los poderes públicos son Estado.
Manifestó asimismo que cuanto más complejo de gestionar es un asunto, más necesario se hace el entendimiento y tras un largo tiempo hasta llegar al modelo que recoge este Consorcio y la puesta en funcionamiento del PEAG, se ha visto esa coordinación administrativa, afirmó.
El consenso social también ha sido un punto determinante, según la ministra, ya que se ha alcanzado en un porcentaje amplio por el interés de todos los protagonistas implicados en la recuperación de los acuíferos 23 y 24, a los que alude este Plan.
El trabajo de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), la implicación de las comunidades de regantes, de los ayuntamientos y el apoyo permanente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ha hecho, en palabras de la máxima responsable de Medio Ambiente que "hoy sea un día importante en la construcción de una política del agua muy diferente a la del pasado".
Entonces las aguas subterráneas "estaban olvidadas", y el agua de los acuíferos y de los embalses "debe ser para hoy y para mañana", por lo que Narbona abogó por utilizarla con el mismo compromiso medioambiental y desarrollar una política del agua de acuerdo con los criterios internacionales que le otorguen su valor medioambiental, social y económico, lo que significa a su juicio, "abandonar otra política que no sea la basada en el consenso".
Tras la firma de este convenio y la puesta en marcha del Plan Especial del Alto Guadiana se abre un camino de recuperación de los acuíferos y de desarrollo sostenible del medio rural, "posible por las leyes y los programas impulsados por este Gobierno" con el objetivo de fijar población en el territorio y mejorar las condiciones económicas de los que se dedican a estas tareas e insistió en la necesidad de anticiparse al futuro y adoptar medidas preventivas en torno al agua "para que el cambio climático no nos pille desprevenidos".
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda remarcó lo importante de este día por la capacidad que demuestra la sociedad de afrontar "con valentía un problema que de seguir iría a la catástrofe" porque se extraía de los acuíferos más agua de que la entraba.
En este sentido, Narbona, que firmó el acuerdo con el presidente regional, José María Barreda, indicó que para trabajar en "una mejor" política del agua es necesaria la colaboración de administraciones, en este caso la central, la regional y la local, ya que a pesar de que se dice que la política del agua es una política de Estado, "se olvida" que vivimos en el Estado de las Autonomías y que todos los poderes públicos son Estado.
Manifestó asimismo que cuanto más complejo de gestionar es un asunto, más necesario se hace el entendimiento y tras un largo tiempo hasta llegar al modelo que recoge este Consorcio y la puesta en funcionamiento del PEAG, se ha visto esa coordinación administrativa, afirmó.
El consenso social también ha sido un punto determinante, según la ministra, ya que se ha alcanzado en un porcentaje amplio por el interés de todos los protagonistas implicados en la recuperación de los acuíferos 23 y 24, a los que alude este Plan.
El trabajo de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), la implicación de las comunidades de regantes, de los ayuntamientos y el apoyo permanente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ha hecho, en palabras de la máxima responsable de Medio Ambiente que "hoy sea un día importante en la construcción de una política del agua muy diferente a la del pasado".
Entonces las aguas subterráneas "estaban olvidadas", y el agua de los acuíferos y de los embalses "debe ser para hoy y para mañana", por lo que Narbona abogó por utilizarla con el mismo compromiso medioambiental y desarrollar una política del agua de acuerdo con los criterios internacionales que le otorguen su valor medioambiental, social y económico, lo que significa a su juicio, "abandonar otra política que no sea la basada en el consenso".
Tras la firma de este convenio y la puesta en marcha del Plan Especial del Alto Guadiana se abre un camino de recuperación de los acuíferos y de desarrollo sostenible del medio rural, "posible por las leyes y los programas impulsados por este Gobierno" con el objetivo de fijar población en el territorio y mejorar las condiciones económicas de los que se dedican a estas tareas e insistió en la necesidad de anticiparse al futuro y adoptar medidas preventivas en torno al agua "para que el cambio climático no nos pille desprevenidos".
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda remarcó lo importante de este día por la capacidad que demuestra la sociedad de afrontar "con valentía un problema que de seguir iría a la catástrofe" porque se extraía de los acuíferos más agua de que la entraba.