Nuevo tallaje para las mujeres españolas
01/10/2010 - 09:45
Por: MATEO BALÍN. COLPISA
Las tallas actuales de ropa tienen los días contados. El patrón clásico de medición dejará paso en unos dos años a un tallaje más ajustado al perfil físico de las mujeres. Esta revolución textil que el Gobierno pretende llevar a Bruselas con rango de normativa busca promover una imagen de belleza más saludable.
Para ello, el Ministerio de Sanidad ha presentado este jueves un estudio pionero del que se extraen tres morfotipos o categorías generales entre la población femenina española, y que ayudarán a conformar las nuevas medidas para la ropa.
Estas categorías se forman como resultado de medir los perímetros de busto, cintura y cadera en relación con la estatura. Para ello se han cogido muestras de más de 10.000 mujeres de entre 12 y 70 años, de 59 ciudades españolas. Se tratan de morfotipos que no se habían catalogado hasta ahora, ya que la anatomía siempre ha establecido categorías científicas en función del sexo masculino, como así se regula desde 1972. Este desfase explica como hoy en día un 40% de las mujeres tiene problemas para encontrar su talla, según revela el estudio elaborado por Sanidad.
Con los datos antropométricos en la mano, los técnicos han establecido que el cuerpo femenino responde a tres categorías según su forma anatómica: diábolo, campana y cilindro, que representan con precisión y de forma proporcional a las mujeres, según el ministro Bernat Soria. De esta manera, el tamaño de la ropa quedaría ahora definido por códigos con tres dígitos que contemplarían los parámetros citados (pecho, cintura, cadera) para cada altura.
En función de estas medidas, un 39% de las mujeres se encuadran en el diábolo, el mayoritario, seguido del cilindro (36%) y la campana (25%). Por edades, en los momentos de pubertad y juventud (12-30 años) destaca la forma cilindro, en la madurez (de 31 a 60 años) prima el diábolo y el modelo más extendido a partir de los 60 es la campana. No obstante, el porcentaje de morfotipos en cada franja de edad no es muy acentuado.
Todos los resultados del estudio y las conclusiones que de ellos se deducen deben constituir una base de datos de gran utilidad para el sector del textil, la confección y el género de punto. Con esta información se podrán definir los morfotipos por grupo de edad o tablas de tallaje que servirán, entre otras cosas, para el desarrollo de modelos, físicos y virtuales, para la realización de pruebas, la creación de sistemas de personalización de la ropa o la mejora del ajuste de la indumentaria.
Estas categorías se forman como resultado de medir los perímetros de busto, cintura y cadera en relación con la estatura. Para ello se han cogido muestras de más de 10.000 mujeres de entre 12 y 70 años, de 59 ciudades españolas. Se tratan de morfotipos que no se habían catalogado hasta ahora, ya que la anatomía siempre ha establecido categorías científicas en función del sexo masculino, como así se regula desde 1972. Este desfase explica como hoy en día un 40% de las mujeres tiene problemas para encontrar su talla, según revela el estudio elaborado por Sanidad.
Con los datos antropométricos en la mano, los técnicos han establecido que el cuerpo femenino responde a tres categorías según su forma anatómica: diábolo, campana y cilindro, que representan con precisión y de forma proporcional a las mujeres, según el ministro Bernat Soria. De esta manera, el tamaño de la ropa quedaría ahora definido por códigos con tres dígitos que contemplarían los parámetros citados (pecho, cintura, cadera) para cada altura.
En función de estas medidas, un 39% de las mujeres se encuadran en el diábolo, el mayoritario, seguido del cilindro (36%) y la campana (25%). Por edades, en los momentos de pubertad y juventud (12-30 años) destaca la forma cilindro, en la madurez (de 31 a 60 años) prima el diábolo y el modelo más extendido a partir de los 60 es la campana. No obstante, el porcentaje de morfotipos en cada franja de edad no es muy acentuado.
Todos los resultados del estudio y las conclusiones que de ellos se deducen deben constituir una base de datos de gran utilidad para el sector del textil, la confección y el género de punto. Con esta información se podrán definir los morfotipos por grupo de edad o tablas de tallaje que servirán, entre otras cosas, para el desarrollo de modelos, físicos y virtuales, para la realización de pruebas, la creación de sistemas de personalización de la ropa o la mejora del ajuste de la indumentaria.