¡Qué tropa!

26/05/2016 - 19:59 Antonio Yagüe

25.350.447 españoles,137.536 de Guadalajara votamos una cosa el pasado 20 de diciembre.

25. 350.447 españoles, 137.536 de Guadalajara, votamos una cosa el pasado 20 de diciembre. Y los partidos, tras casi cinco meses de culebrones interminables, charadas, jeroglíficos, pantomimas, palabrería inútil y de pactos que solo servían para no hacer otros pactos, han puesto todo su empeño en que votemos otra distinta el 26J. Y que corrijamos las urnas, como persiguió en su día el iluminado Artur Mas.
    El último barómetro del CIS apunta que nos vamos a quedar como estábamos. Aunque podrán votar 7.148 personas más, 90 de ellas en nuestra provincia. Pero los ciudadanos empiezan a estar hartos, y algunos tendrán ese día una boda, un viaje a alguna parte o se levantarán con el típico resfriado del aire acondicionado o algún desarreglo tras el festejo sanjuanero. El fantasma de la abstención crece cada día. Seguro que a ellos les dará lo mismo. En las pasadas elecciones, todos -salvo Podemos y Ciudadanos, que fueron de vírgenes- perdieron votos a mansalva. Pero la ley d’Hont, que tiene nombre de cuchilla de afeitar, como apunta un articulista, les repartió los sillones.
    Es posible que algún votante, enfadado, cambie su voto y compre  sus nuevas promesas que nos acercarían al imposible cielo en la tierra. Todo indica que nos han tomado por gilís (del caló o gitano español, bobo, lelo). Pero muchos han empezado a ver que España es un país donde la casta empiezan a ser todos los que pisan las alfombras del Congreso de los Diputados, viven y esperan seguir viviendo del erario público. Y todos, como los que nos representan en parlamentos autonómicos, aforados y preparados para la corrupción. Ni en Italia.
    Las urnas dejarán claro quiénes tienen que corregir el rumbo, y si los gilís no son ellos. Iglesias con su cifosis chulesca, Sánchez con su disfraz de cadete de West Point sin haber pisado un cuartel, Hernando con su risita majadera, Villalobos con sus grotescos comentarios marujiles, el canario Rodríguez con sus rastas… Y así hasta 350 ¡Qué tropa!, como dicen que dijo Romanones, muy conocido en estos pagos, cuando solo votaban los de la casta de entonces: Siendo presidente del Gobierno con Alfonso XIII, fue propuesto para ocupar un sillón en la Real Academia de la Lengua y no le votaron  ni los que le habían propuesto.