Recamder y Prosegur firman un convenio de 3,5 millones para la instalación de 100 cajeros en el medio rural

Los Grupos de Desarrollo Rural se han sumado a la lucha contra la brecha financiera que viven muchos habitantes del mundo rural tras el cierre de numerosas sucursales bancarias y la desaparición de cajeros automáticos en muchos pueblos. El miércoles, Recamder (Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural) y Prosegur Cash firmaron un convenio de colaboración para la instalación de 100 cajeros automáticos en pequeños pueblos de Castilla-La Mancha. El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, presidió el acto de esta firma en la Delegación de la Junta de Guadalajara, trámite que da continuidad al protocolo que el propio consejero firmó con el presidente de Recamder, Jesús Ortega, el pasado 23 de diciembre. 

Los Grupos de Desarrollo Rural destinarán 3,5 millones de euros a esta iniciativa, que se distribuirán en los 800 euros más IVA por cajero que recibirá Prosegur Cash, empresa adjudicataria tras sacar el servicio a licitación entre las 48 empresas con sistemas de pago registradas en el Banco de España. El periodo del contrato será de tres años, con la posibilidad de prorrogarlo otros dos más a un precio “ventajoso” de unos 6.000 euros al año por cajero. 

El consejero aprovechó este acto para “agradecer” el trabajo tanto de Recamder como de Prosegur Cash, pero también les pidió “compromiso” con la gente para que esta iniciativa salga “perfecta”. Arroyo explicó que serán los Grupos de Desarrollo Rural los que seleccionarán los lugares donde se instalarán estos cajeros automáticos, teniendo en cuenta la ausencia de servicios financieros, la población de la comarca y la distancia a recorrer para tener acceso al cajero más cercano. “Éste es un proyecto piloto que marca un antes y un después en el medio rural”, señaló el consejero, satisfecho por la presencia de los cuatro vicepresidentes de Recamder, representantes de todas las provincias castellano-manchegas junto al propio Jesús Ortega. “Estoy muy satisfecho además porque probablemente estamos en uno de los lugares donde más necesarios serán esos cajeros, como es la provincia de Guadalajara”, apuntó el consejero. Y serán precisamente Guadalajara y Cuenca las provincias que acogerán la mayor parte de ese centenar de equipos, al tener un amplio número de localidades de menos de 100 habitantes. “No queremos fallar, por lo que vamos a estar muy vigilantes para que funcione”. 

Por su parte, el presidente de Recamder señaló que los cajeros se instalarán principalmente en municipios “de intensa y extensa” despoblación. “En los últimos años hemos ido viendo el cierre de oficinas y la supresión de cajeros, por lo que muchas personas no pueden ni acceder al dinero en efectivo”. Recordó Ortega que una directiva europea reconoce el acceso de los ciudadanos a los cajeros, una medida que también se recoge en la Ley contra la Despoblación de Castilla-La Mancha. 

Por su parte, el director comercial de Prosegur Cash, Policarpo Ledesma, agradeció la “oportunidad” y “confianza” depositada en su compañía para favorecer el acceso al dinero en efectivo a los sectores “más vulnerables”, con rentas bajas y un acceso a la digitalización. “El 2 por ciento de la población española no tiene acceso a un banco, y se estima que en 2025 ese porcentaje ascenderá al 5 por ciento, unos 2 millones de personas”. 

Los ciudadanos podrán utilizar estos cajeros las 24 horas del día independientemente del banco o caja de ahorros en la que tengan la cuenta. Los trámites que podrán realizar son la retirada de dinero en efectivo, consulta del saldo y de los últimos movimientos, cambio del pin de las tarjetas de crédito o débito y recarga de teléfonos móviles de prepago. En la retirada de efectivo, cada operación tendrá un coste para el usuario de 1,35 euros.